tag:blogger.com,1999:blog-69285727495503214742024-03-13T13:25:29.396-07:00Periodismo de ayerUn espacio para la difusión de ensayos y artículos relacionados con periodistas y medios gráficos del pasado.Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.comBlogger16125tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-84469027039972228712021-09-18T14:43:00.003-07:002021-09-18T16:01:34.119-07:00Los valesanos tras la esperanza americana. De Suiza a la Confederación Argentina.<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhhuAeSLZ_cLY69NxVmsnkQa92jaZQwbo6bZcyKvYmihEMDpDd1iRN5Mbjjbjnsg11Ec-pi1HADmeqa1bKmcpOOHuyHRmIUTORnCGeGP2e9eM3rfdu753isP6JCmMFF4Gs_Al5_W1qzRuw/s1677/P%25C3%25A1ginas+82+83.png" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1103" data-original-width="1677" height="131" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhhuAeSLZ_cLY69NxVmsnkQa92jaZQwbo6bZcyKvYmihEMDpDd1iRN5Mbjjbjnsg11Ec-pi1HADmeqa1bKmcpOOHuyHRmIUTORnCGeGP2e9eM3rfdu753isP6JCmMFF4Gs_Al5_W1qzRuw/w200-h131/P%25C3%25A1ginas+82+83.png" width="200" /></a></div><span style="text-align: justify;">En noviembre de 1993, la revista <b>“Todo es
Historia”</b>, en su número 316 (páginas 82 a 85), publicó bajo este título un
trabajo firmado por Jorge E. Padula Perkins sobre los primeros inmigrantes del
cantón suizo de Valais que llegaron a la, por entonces, Confederación
Argentina.</span><p></p>
<div style="text-align: justify;">Más recientemente (agosto 2021) la misma
nota fue incluida en el reconocido portal <b>“Apellidos Italianos. Genealogía
Italiana en Español…y más”</b>, administrado y dirigido por Analía Montórfano.</div>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Rescatamos para <b>“Periodismo de ayer”</b> este
artículo inserto (28 años atrás) en una de las más importantes revistas de
divulgación histórica de la Argentina.</p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><u><span lang="ES-AR"><span style="font-size: large;">Los
valesanos tras la esperanza americana. </span><span style="font-size: 20pt;"><o:p></o:p></span></span></u></i></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><u><span lang="ES-AR" style="font-size: 14pt; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">De
Suiza a la Confederación Argentina.<o:p></o:p></span></u></i></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><br /></p>
<p align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;"><span lang="ES-AR">Por: Lic. Jorge Eduardo
Padula Perkins.<span style="font-size: 14pt;"><o:p></o:p></span></span></p>
<p align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;"><span lang="ES-AR" style="font-size: 14pt; mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><o:p> </o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES-AR">“Prèparòns-nous,
chers amis du voyage,<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES-AR">Le
jour du dèpart est enfin arrivé.<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES-AR">Disons
adieu aux amis du village ;<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES-AR">Pour
I Amèrique il faut nous embarquer.”<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES-AR"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoBodyText"><span lang="ES-AR">De este modo, en 1857 el campesino Jean
Rudaz cantaba al momento de abandonar su pueblo de Vex en el cantón suizo de
Valais. Preparémonos compañeros de aventura –decía en la lengua francesa propia
del bajo Valais- el día de partir finalmente ha llegado. Digamos adiós a
nuestra querida comuna; rumbo a América saldremos embarcados<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn1" name="_ednref1" style="mso-endnote-id: edn1;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[1]</span></span><!--[endif]--></span></span></a><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoBodyText">Es que América, y en particular la Confederación
Argentina, ofrecía para entonces una perspectiva amplia de esperanzas, de vida
digna para el agricultor, en tierras fértiles y en un país abierto a “todos los
hombres del mundo” (como reza la Constitución Nacional) que quisieran habitar
su suelo.</p>
<p class="MsoBodyText">Desde 1848 habían comenzado los problemas
en Suiza, sin que el Valais fuese excepción, cuando una ley prohibió a los
nacionales servir a países o reinos extranjeros, debido a lo cual gran cantidad
de mercenarios se vieron impelidos a regresar a sus pueblos, sin trabajo ni
recursos.</p>
<p class="MsoBodyText">Hacia 1850 la miseria se sentía en el
cantón debido a ese exceso de población y la falta de tierras, a los que se
sumaron inundaciones del río Ródano y frecuentes incendios masivos en sus casas
de maderas alineadas al margen de calles estrechas que facilitaban la expansión
de las llamas.</p>
<p class="MsoBodyText">Es así como salen del Valais los carros
que transportan a las primeras familias que dejan sus pueblos en busca de la
promesa americana. Hombres, mujeres y niños junto a baúles, cajas, bultos y
herramientas, marchan hacia el puerto francés de Havre. Son todo lo que llevan,
llevan todo lo que tienen. Pertenencias y esperanzas se hamacan al compás de la
larga travesía.</p>
<p class="MsoBodyText">Las advertencias, aunque contundentes,
habían tenido menos fuerza que la ilusión de una vida mejor. Dramáticas
alegorías había publicado la prensa local, que no eran suficientes para frenar
el impulso emigrador. Así por ejemplo el “Courrier du Valais” del 6 de
septiembre de 1855 había señalado que “Si hay en la vida humana una circunstancia
solemne es aquella en que el hombre, deseoso de un porvenir mejor, deja los
lugares que lo vieron nacer para ir bajo un cielo extraño, en busca de bienes
que cree no poder encontrar en su patria”, a lo que se agregaban descarnadas
descripciones tales como la de una madre que “cerrando contra su pecho a su
reción nacido, le pregunta al fiel compañero de sus hazañas no si ellos mismos
sino sus hijos, serán felices en la tierra extraña”<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn2" name="_ednref2" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[2]</span></span></span></a></p>
<p class="MsoBodyText">Salieron los Dupraz, los Addy, los Rudaz,
los Favre, los Micheloud, los Bonzon, los Thenisch...y muchos otros<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn3" name="_ednref3" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[3]</span></span></span></a>,
persiguiendo la esperanza de hallar un lugar en donde ejercer su oficio de
agricultores sin las limitaciones de una naturaleza estéril.</p>
<p class="MsoBodyText">Pero esos hombres y mujeres de la tierra
debían enfrentar al mar...”Por algún tiempo no veremos ya la tierra” anticipaba
la canción de Rudaz, arriesgando inclusive la posibilidad de tener que
enfrentarse a tempestades, pero, católicos como eran, confiaban en que Dios
dictaría su destino: “Car Dieu lui-même dictera notre sort” y en el poder de
una humilde oración.</p>
<p class="MsoBodyText">Ochenta días a bordo de un barco a velas
duraría la travesía. Ochenta días y ochenta noches en que las plegarias eran el
único consuelo ante el hacinamiento de tantos grupos familiares en lugares
oscuros, húmeros y nauseabundos, en donde los alimentos se agotaban y el agua
se descomponía. Trescientas cincuenta y una personas del cantón de Valais
(algunos de la Alta Saboya y pocos de Piamonte) atravesaban el mar soportando
hasta lo insoportable en busca de un mundo mejor.</p><p class="MsoBodyText"><span lang="ES-AR">Llegados al puerto de Buenos Aires, los
inmigrantes se encontraron con una nueva y desagradable sorpresa, dado que el
contrato de colonización para la formación de centros agrícolas en la provincia
de Corrientes en virtud del cual habían viajado estaba vencido.</span></p><p class="MsoBodyText">Fue entonces cuando Carlos Beck, uno de
los socios de la empresa europea Beck, Herzog y Compañía, dedicada a la
emigración e involucrada en la firma de aquel contrato, decidió actuar en tanto
su empresa había puesto en juego ante el gobierno suizo una fianza en resguardo
de sus súbditos. Se dirigió para ello al presidente Justo José de Urquiza, y
obtuvo su autorización para una instalación colonial en tierras de la provincia
de Entre Ríos, mediante el otorgamiento de 20 cuadras de terreno a cada
familia, dinero para establecerse y empezar a trabajar y alimentos por un año<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn4" name="_ednref4" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[4]</span></span></span></a></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg1PsNL-DXg5L0N9SNNnj5jcU27j2S5dhCwBgZ-IkI3aBsSrMsvkZZtf6lOwwS7b_4nEPMB9AMqUrtaWUNN2JRpOWjd4tC5UL6mPrhPesgtrLMeA0oKH0ae3IxooeLIIOUHaZKlWkM3F0k/s1745/P%25C3%25A1ginas+84+85.png" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" data-original-height="1139" data-original-width="1745" height="131" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg1PsNL-DXg5L0N9SNNnj5jcU27j2S5dhCwBgZ-IkI3aBsSrMsvkZZtf6lOwwS7b_4nEPMB9AMqUrtaWUNN2JRpOWjd4tC5UL6mPrhPesgtrLMeA0oKH0ae3IxooeLIIOUHaZKlWkM3F0k/w200-h131/P%25C3%25A1ginas+84+85.png" width="200" /></a></div><p></p>
<p class="MsoBodyText">El destino inicial de los colonos, que a
todo esto esperaban en el puerto de Buenos Aires, serían los campos de Ibicuy.
Comenzaba de este modo el segundo tramo del viaje de aquellos inmigrantes,
valesanos en su neta mayoría, hacia el destino en el que habían puesto todas
sus esperanzas. “Por qué llorar y alimentar la tristeza, cuando todo lo nuestro
debemos abandonar?. El mismo Dios nos ha hecho la promesa de reencontrarnos en
la Santa Ciudad” seguirían cantando para entonces los sufridos valesanos al
retomar la marcha.</p>
<p class="MsoBodyText">A principios de junio de 1857 los colonos
desembarcaban en Ibicuy, al sur del departamento de Gualeguay. Pero una
creciente del Paraná demostraría pronto que no era ese el lugar más propicio
para el asentamiento agrícola. Por orden del general Urquiza, el agrimensor
francés Carlos Sourigues, encargado de la delimitación colonial, dispuso
entonces el traslado de los colonos a la Calera de Espiro, al norte de Concepción
del Uruguay.</p>
<p class="MsoBodyText">La goleta “Rey David” y el patacho
“Facio” recibieron entonces a aquellos peregrinos y los trasladaron por el río
Uruguay, a cargo del suizo Carlos Marty, representante de Beck y Herzog, para
arribar a la Calera de Espiro el 1 de julio. El consumo durante la travesía fue
de cerca de 370 kilos de galletas y la carne de dos vacunos.</p>
<p class="MsoBodyText">“Cuéntase –dice Schobinger- que el
primero en saltar a tierra fue un componente de las varias familias Delaloye
que integraban la expedición”<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn5" name="_ednref5" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[5]</span></span></span></a></p>
<p class="MsoBodyText">Sostiene Macchi al respecto que “Para el
28 de junio hallábanse navegando rumbo al punto prefijado, el núcleo de
inmigrantes que jugaría un rol de importancia en el movimiento colonizador de
Entre Ríos. En esa fecha y a bordo de la goleta “Rey David” su patrón Miguel Palma
extiende un recibo por provisión de galleta a los inmigrantes”<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn6" name="_ednref6" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[6]</span></span></span></a></p>
<p class="MsoBodyText">Posteriormente los equipajes e
implementos agrícolas, que habían quedado al cuidado de 14 colonos, fueron
trasladados en los lanchones “Niño Prudente”, “San José”, “La Julia” y otros.</p>
<p class="MsoBodyText">Los colonos se asentaron entonces en
cercanías de la costa, en casas improvisadas hasta el momento de la
delimitación definitiva de los terrenos que les serían asignados. El agrimensor
Sourigues dice en una carta remitida a Urquiza con fecha 2 de julio de 1857 que
“los colonos llegaron ayer a este punto” y que “están todos en tierra y se
ocupan de hacer sus ranchitos para los primeros días”<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn7" name="_ednref7" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[7]</span></span></span></a></p>
<p class="MsoBodyText">Mayores detalles ofrece Peyret, quien
señala en relación con el asentamiento que “unos ganaron el galpón donde se depositaba
la cal; otros se introdujeron en el horno...improvisaron abrigos debajo de los
árboles...formaron carpas con sábanas, amontonando baúles y cajones..”<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn8" name="_ednref8" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[8]</span></span></span></a></p>
<p class="MsoBodyText">De este modo, en comunión obligada con la
naturaleza, los colonos pasaban sus primeros días en las costas del río
Uruguay, donde se halla actualmente la ciudad de Colón. Allí, siguiendo a
Peyret, “la caza era abundante en la selva y en el campo donde los avestruces y
los venados pastoreaban fraternalmente con las vacas y las yeguas. Los
carpinchos y las nutrias pululaban en los arroyos; los patos en las lagunas;
las perdices en los pajonales; bandadas de palomas y cotorras oscurecían el
cielo, sin contar los tordos, los teruteros, los flamencos, las bandurrias y un
sinnúmero de otras aves; de manera que los colonos, todos buenos tiradores,
tenían como divertirse y añadir manjares suculentos a la ración de carne que se
les distribuíra”<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn9" name="_ednref9" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[9]</span></span></span></a></p>
<p class="MsoBodyText">No obstante, un movimiento más les
esperaba, ya que, dadas las dificultades que la ribera presentaba para la
actividad agrícola por sus características pedregosas, los lotes comenzaron a
entregarse desde una legua de la costa hacia el oeste y luego hacia el norte,
hasta el arroyo Perucho Verna.</p>
<p class="MsoBodyText">Para el 3 de agosto las tareas de
deslinde y amojonamiento de los lotes, que seguirían hasta fines de ese mes, ya
ofrecían resultados concretos en tanto que las primeras familias comenzaban a
tomar posesión de sus terrenos. El agrimensor Sourigues dejó la zona a fines de
agosto de 1857, tras haber delimitado 160 parcelas, aunque no todas serían
ocupadas en un primer momento.</p>
<p class="MsoBodyText">Comenzaba entonces la tarea de la
construcción, para lo cual era utilizada la piedra y la cal abundante en la
región.</p>
<p class="MsoBodyText">Por otra parte, durante el transcurso de
aquel mes de julio arribaron al lugar otros contingentes originarios en su gran
mayoría del Valais. “Llegaron –asevera Macchi- por lo menos dos expediciones
más, una compuesta de 85 personas, el día 15, y la otra de 83, el 17”<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn10" name="_ednref10" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[10]</span></span></span></a> . De
ese modo el número de personas asentadas durante julio de 1857 en la región
superó ligeramente las quinientas, grupo al que puede considerarse globalmente
como fundador de la colonia, en tanto se completó cuando todavía los primeros
inmigrantes arribados al lugar se hallaban provisoriamente alojados en la costa
del río Uruguay y el agrimensor Sourigues avanzaba en su tarea de delimitación
de los terrenos.</p>
<p class="MsoBodyText">Allí estaban entonces los inmigrantes,
con los pies sobre la tierra soñada. En su gran mayoría suizos del Valais, de
habla francesa, en un 90% católicos, eran los fundadores de la colonia San
José. Los que entonaran al partir las estrofas de la canción de Rudaz, los que
la seguían cantureando en suelo entrerriano, como un himno de esperanza y sin
imaginar siquiera que, generación tras generación, llegaría hasta nuestros días:
“Nous partirons avec bonne espèrancè / Que Dieu là-bas nous préserve du
malheur” (partiremos portando la buena esperanza / de que Dios nos preserve de
los sinsabores).</p>
<p class="MsoBodyText">Cada familia firmaba un contrato, cuyo
texto se presentaba en castellano y en francés, y según el cual recibiría de
Urquiza 16 cuadras de terreno, cien pesos que serían entregados a la
administración y empleados por ella para comprar por cuenta de la familia y de
un mutuo convenio objetos de primera necesidad, así como semillas, cuatro bueyes
de labranza, dos caballos, dos vacas lecheras con su cría, madera y leña y la
manutención de la familia durante un año desde su llegada a la colonia, a razón
de diez libras de carne y tres libras de fariña por día para cinco personas
adultas. Como contrapartida, quedaba establecido el plazo de cuatro años para
el reembolso del capital y los intereses correspondientes a los citados rubros.</p>
<p class="MsoBodyText">Por otra parte, los colonos tenían la
obligación de permanecer en la tierra y trabajarla hasta la cancelación de la deuda
y aun después, su venta quedaba condicionada a la predisposición del comprador
a continuar desarrollando las tareas de agricultor en ella.</p>
<p class="MsoBodyText">Quedaban de ese modo plantadas las
semillas de la colonia San José: Aquellos hombres, mujeres y niños que a través
del tiempo y las generaciones habrían de trocarse en raíces profundas y frutos
saludables, intrínsecamente dotados de añoranza por su tierra madre y siempre
renovadas esperanzas en el germen americano.</p>
<p class="MsoBodyText">La administración, en un principio a
cargo del mismo Sourigues, pasó a fines de 1857 a manos de su compatriota Alejo
Peyret, quien había arribado al país cinco años antes, en tanto que los
inmigrantes velaban por los intereses colectivos mediante el Concejo Municipal.
El mismo estaba compuesto por cinco miembros, elegidos por sus pares de entre
los colonos, con la capacidad de formular sus puntos de vista y objeciones a la
administración y de presentar proyectos destinados al bien común.</p>
<p class="MsoBodyText"><span lang="ES-AR"><o:p>N</o:p></span>o faltó el caso en el que la remembranza
y el dolor del desarraigo resultaran insoportables, pero la mayoría enfrentó
estoicamente el destino elegido.</p>
<p class="MsoBodyText">No bastó entonces que la langosta y la
sequía arruinasen la primera cosecha de maíz para doblegarlos; no fue
suficiente que el administrador tuviese que pedir al presidente Urquiza una
extensión de la manutención familiar de los agricultores, debido a esa cosecha
malograda a tan solo un año de su asentamiento, para quebrar su moral.</p>
<p class="MsoBodyText">Seguían trabajando en el maíz, el trigo,
la papa, el algodón, el maní, el tabaco y, finalmente, en los árboles frutales;
y sumaron maquinaria a su férrea voluntad y el incentivo financiero y moral del
general Urquiza.</p>
<p class="MsoBodyText">Con el devenir de los meses y de los años
la colonia iba prosperando. Tanto es así que algunos de sus habitantes no se
contentaban con manifestar su entusiasmo en las cartas que enviaban a sus
familiares o amigos en Suiza, sino que los inducían a trasladarse al lugar.
Estos incentivos, sumados al accionar de las agencias de emigración y del
presbítero Lorenzo Cot, que en 1859 viajaba por orden de Urquiza a Suiza para
activar la inmigración, y se encontraba inclusive con las autoridades del
cantón del Valais, favorecieron el ingreso de nuevos grupos de emigrados
suizos, en especial valesanos, al país y a San José en particular.</p>
<p class="MsoBodyText">“Avant de partir dens le nouveau monde, /
Buvons ensamble quelques verres de bon vin”, seguirían cantando los vecinos que
años antes habían escuchado a Rudaz a la hora de la partida: Antes de partir
hacia el nuevo mundo, que el vino llene nuestros vasos vacíos.</p>
<p class="MsoBodyText">A fines de 1859 un grupo de valesanos
partió de su tierra acompañando al presbítero Cot. “La primera expedición salió
de Burdeos el 20 de septiembre; la componían 28 familias suizas, 3 saboyanas y
3 alemanas; en total, 179 personas. Llegaron el 8 de diciembre a San José”<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn11" name="_ednref11" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[11]</span></span></span></a>.
Otros grupos que llegaron a completar 1500 individuos eran de origen saboyano y
piamonteses de apellido francés.</p>
<p class="MsoBodyText">Entre junio de 1860 y octubre de 1861
siguieron ocho olas migratorias considerables<a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_edn12" name="_ednref12" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-font-size: 10.0pt; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[12]</span></span></span></a>.</p>
<p class="MsoBodyText">En abril de 1861 comenzó a funcionar la
escuela, cuya construcción estuvo a cargo de los mismos colonos. Más tarde se
crearía la comisaría y el juzgado de paz (1862) y finalmente la municipalidad,
por decreto del 11 de agosto de 1863.</p>
<p class="MsoBodyText">Para entonces y como seis años atrás,
aunque con la seguridad de un establecimiento organizado y un lugar que ya se
comenzaba a conocer, los valesanos repetirían y enseñarían a sus hijos aquellos
versos finales de la canción de Rudaz que hablaban de partir a la aurora y de
brindar con el vaso pleno de vino sin dejar caer lágrimas y vivando a los
americanos:</p>
<p align="center" class="MsoBodyText" style="text-align: center;"><span lang="ES-AR"><o:p> </o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoBodyText" style="text-align: center;"><span lang="ES-AR">“Tenons-nous
prêts à partir à l’aurore,<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoBodyText" style="text-align: center;"><span lang="ES-AR">Chantons
le verre tout plein de bon vin;<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoBodyText" style="text-align: center;"><span lang="ES-AR">Nous
I’avons dit, rèpètons-le encore:<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoBodyText" style="text-align: center;"><span lang="ES-AR">Point
de chagrin, vive les Amèricains!”<o:p></o:p></span></p>
<div style="mso-element: endnote-list;"><!--[if !supportEndnotes]--><br clear="all" /><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVOTAg7Ag2-x3eMMw4n_FoHoTJii_it1NQCmkaU0QP4-xnpQlxYuYs1YKYHF6nAHlEftGl5SSZ2O_hI4V19WmHIIw0zFtkwYetkWOn8JrHzpjdvG8XmMwrOqxj3Zf0q98Hx6MT4j7OJ-o/s500/Todo+es+Historia+n%25C3%25BAmero+316+noviembre+1993+tapa.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="375" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVOTAg7Ag2-x3eMMw4n_FoHoTJii_it1NQCmkaU0QP4-xnpQlxYuYs1YKYHF6nAHlEftGl5SSZ2O_hI4V19WmHIIw0zFtkwYetkWOn8JrHzpjdvG8XmMwrOqxj3Zf0q98Hx6MT4j7OJ-o/w150-h200/Todo+es+Historia+n%25C3%25BAmero+316+noviembre+1993+tapa.jpg" width="150" /></a></div><div style="mso-element: endnote-list;"><br /></div><div style="mso-element: endnote-list;">
<!--[endif]-->
<div id="edn1" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref1" name="_edn1" style="mso-endnote-id: edn1;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[1]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Carron, Alexandre y Chistophe, Nos cousins D’Amerique, Histoire de émigration
valaisanne au XIX siécie, tomo I, Editions Monographic S.A., Sierre, Suisse,
1990, p.95.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn2" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref2" name="_edn2" style="mso-endnote-id: edn2;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[2]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Ibid., p.19.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn3" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref3" name="_edn3" style="mso-endnote-id: edn3;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[3]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Schobinger, Juan, Inmigración y colonización suizas en la República Argentina
en el siglo XIX, Instituto de Cultura Suizo-Argentino, publicación N° 1, Buenos
Aires, 1957, p.103.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn4" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref4" name="_edn4" style="mso-endnote-id: edn4;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[4]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Sobre este punto existen versiones encontradas. Una de ellas referida por
Schobinger (ob.cit.) afirma que “tras una primera entrevista fracasada con
Urquiza, obtuvo por consejo de Castellanos”, “la mediación del doctor Benjamín
Victorica, yerno del general” y que el caudillo, “hasta entonces reacio a dejar
invadir su provincia por los gringos, supo comprender que estaba en juego el
prestigio del país y el suyo propio”. La otra, sostenida por Macchi (Urquiza
colonizador) desde su apologética visión de Urquiza, asegura que no se ha
encontrado en el archivo del Palacio San José ninguna referencia sobre la
negativa inicial del presidente da la fundación de la colonia. Lo cierto es que
Back obtuvo el apoyo necesario.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn5" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref5" name="_edn5" style="mso-endnote-id: edn5;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[5]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Ibid., p.101.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn6" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref6" name="_edn6" style="mso-endnote-id: edn6;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[6]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Macchi, Manuel E., Urquiza colonizador. La Colonia San José. Fundación de la
ciudad de Colón, Comisión Nacional de Museos y Monumentos Históricos, Palacio
San José, Museo y Monumento Nacional “Justo José de Urquiza”, serie III, N° 3,
Buenos Aires, 1949, p.47.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn7" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref7" name="_edn7" style="mso-endnote-id: edn7;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[7]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Ibid., p.48.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn8" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref8" name="_edn8" style="mso-endnote-id: edn8;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[8]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Peyret, Alejo, Una visita a las colonias argentinas, Tomo I, Buenos Aires,
1889, p.10.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn9" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref9" name="_edn9" style="mso-endnote-id: edn9;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[9]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Ibid., p.10.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn10" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref10" name="_edn10" style="mso-endnote-id: edn10;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[10]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Macchi, Manuel E., Ibid., p.52.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn11" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref11" name="_edn11" style="mso-endnote-id: edn11;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[11]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
Schobinger, Juan, Ibid., p.107.<o:p></o:p></span></p>
</div>
<div id="edn12" style="mso-element: endnote;">
<p class="MsoEndnoteText"><a href="file:///C:/Users/alicia/Desktop/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana/Los%20valesanos%20tras%20la%20esperanza%20americana.doc#_ednref12" name="_edn12" style="mso-endnote-id: edn12;" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span style="mso-special-character: footnote;"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoEndnoteReference"><span face=""Arial","sans-serif"" lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[12]</span></span><!--[endif]--></span></span></span></a><span lang="ES-AR">
En uno de estos contingentes inmigraban varias familias del alto Valais,
protestantes de habla alemana, que constituirían una minoría en la colonia San
José.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoEndnoteText"><span lang="ES-AR">-----------------------------------------------------</span></p><p class="MsoEndnoteText">* Publicado en la revista “Todo es
Historia”, Nº 316 (páginas 82 a 85), Buenos Aires, noviembre de 1993.</p>
<p class="MsoEndnoteText"><span lang="ES-AR"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoEndnoteText"><span lang="ES-AR">* Publicado en portal “Apellidos
Italianos. Genealogía Italiana en Español…y más”, agosto de 2021. </span>En línea <a href="http://apellidositalianos.com.ar/los-valesanos-tras-la-esperanza-americana.html">http://apellidositalianos.com.ar/los-valesanos-tras-la-esperanza-americana.html</a>
(Consulta: 18-09-2021)</p>
<p class="MsoEndnoteText"><span lang="ES-AR"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span lang="ES-AR"><span style="mso-spacerun: yes;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiH8UkS9HPlyA-dIo9q8MWYotU4N5VZoQTEa4t6DdNeKeePX7XjYE3nMwKRCBJ4h4HFIBOq1tnXVy9-EJeZrCrH0uQlrFCMq5Q2P6AbWqWZfL1j4dQ4iIH-SKyWabnVMEKyN39jZIE0M0s/s1023/Los+valesanos+en+APELLIDOS+ITALIANOS.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="357" data-original-width="1023" height="112" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiH8UkS9HPlyA-dIo9q8MWYotU4N5VZoQTEa4t6DdNeKeePX7XjYE3nMwKRCBJ4h4HFIBOq1tnXVy9-EJeZrCrH0uQlrFCMq5Q2P6AbWqWZfL1j4dQ4iIH-SKyWabnVMEKyN39jZIE0M0s/w320-h112/Los+valesanos+en+APELLIDOS+ITALIANOS.png" width="320" /></a></span></span></div><span lang="ES-AR"><span style="mso-spacerun: yes;"><br /></span><o:p></o:p></span><p></p>
</div>
</div>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-19247436780963923642016-11-22T16:02:00.000-08:002016-11-22T16:02:20.048-08:00Periodismo, historia y "Humanidades Digitales"<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="font-family: Courier New, Courier, monospace;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjU6mo8_FHaDEtVr4pyakEDMVaVwlm526r_9n7HXkzZT4gqR1zp2zsfYsdkoaYv_HU1yDOIp5PLK-bScib0CqXJriPfUJQV-OqhB0-FsOK2M8QCfp9nMUG0jq5QsyFkWHtthpG15zkKbTE/s1600/Imagen+y+parte+de+texto+de+Vergilius+Vaticanus.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="147" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjU6mo8_FHaDEtVr4pyakEDMVaVwlm526r_9n7HXkzZT4gqR1zp2zsfYsdkoaYv_HU1yDOIp5PLK-bScib0CqXJriPfUJQV-OqhB0-FsOK2M8QCfp9nMUG0jq5QsyFkWHtthpG15zkKbTE/s200/Imagen+y+parte+de+texto+de+Vergilius+Vaticanus.png" width="200" /></a><span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="font-size: x-large;"> E</span>n la edición de octubre de
2016 de la revista “Ensayos Académicos” se ha publicado el artículo
“Humanidades digitales al alcance de todos” (páginas 105-111).</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"> Con asiento en la praxis, pero también con el sostén de referencias teóricas, se presenta a
las humanidades digitales como “<i>la libre asociación entre todo tipo de
contenidos humanísticos y los recursos de variada índole que ofrece, y promete
en el futuro inmediato, el desarrollo de
las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones”.</i></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"> “Son parte viva y práctica
–asevera Jorge Padula Perkins- del proceso de desarrollo de la sociedad, que nos involucra
pasiva o activamente, en mayor o menor medida, de uno u otro modo, con o sin
consciencia de ello”.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"> Las claras relaciones entre el periodismo, su historia y la historia en general con los recursos digitales, todo dentro del amplio concepto de Humanidades Digitales, hace adecuado traer a este espacio la publicación original y su transcripción, que aquí se presenta.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><a href="https://issuu.com/institutosuperiordrpedrogoyena/docs/ensayos_acad__micos_2016/104" target="_blank">Acceder a la publicación original</a></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Transcripción del texto completo </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">“Humanidades
digitales” al alcance de todos.<o:p></o:p></span></span></b></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></b></div>
<div align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Jorge
E. Padula Perkins<o:p></o:p></span></span></b></div>
<div align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">En todos los tiempos, las
actividades humanas se han apropiado de las tecnologías disponibles, de las
herramientas de cualquier tipo susceptibles de ofrecer aplicaciones que
facilitaran, mejoraran o contribuyeran al conocimiento, la indagación y la
difusión de la materia en cuestión, cualquiera que ella fuere.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">La información y las
comunicaciones han recibido con beneplácito y asimilado con fruición los
desarrollos informáticos y el surgimiento de Internet, desde sus primeros pasos
hasta la actualidad en renovación constante.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Así “lo digital” (como referencia abreviada a la representación de
información de modo binario, como base del funcionamiento de las computadoras y
también a los sistemas de transmisión de datos mediante circuitos y señales) se
ha puesto en primer plano en los más diversos órdenes de la actividad humana,
teórica y práctica, casi sin exclusiones.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">En el mundo digital se
desenvuelve el comercio, la operatoria bancaria, el periodismo, las artes, la
historia, la filosofía, el turismo, la medicina, el derecho, la política. La
cultura en todas sus facetas. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">En ese marco de referencia y
en un sentido amplio encuentran su espacio en la escena académica e
intelectual, las “Humanidades digitales”, una denominación que, tomando como
base la tradicional acepción de humanidades como el “conjunto de disciplinas
literarias, artísticas, filosóficas e históricas”, la asocia a las
posibilidades de interacción, comunicación, divulgación, investigación y
estudio que ofrecen las nuevas tecnologías.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">A partir de ese sencillo
vínculo entre las humanidades y lo digital, expertos provenientes de diversas
disciplinas pujan por proponer expresiones que lo definan. En tal sentido, la revista española ArtyHum ha
editado, a fines del 2015, un monográfico de 113 páginas titulado “La realidad
de las Humanidades Digitales en España y América Latina” en el que reconocidos
estudiosos ofrecen valiosas descripciones y definiciones sobre el tema.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">A mi entender, la era
digital es a nuestros días lo que la invención de la imprenta a la sociedad del
Siglo XIX, que bien pudo acuñar la expresión “Humanidades Impresas”. Ello desde
una perspectiva de incidencia psicosocial y más allá de los cambios de
paradigmas simbólicos y de las lecturas no lineales que, entre otros elementos,
caracterizan a nuestra contemporaneidad en materia de comunicaciones.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">En este contexto, y como asevera
Fainholc (2004), no hay que perder de vista que “la construcción del
conocimiento –y la creatividad, me permito agregar- es tarea de las personas y
no de los aparatos” ya que se ponen en juego “los conocimientos que posee el
sujeto, sus experiencias previas, su selectividad referida al contenido
lógico-simbólico y a lo tecnológico de los programas informáticos de que se
trate y que posibilitan el establecimiento de links, animaciones, interacción
conectiva a otras direcciones de Internet, etc., a lo cual habrá que sumar lo
socioemocional-idiosincrático de cada quien, la pertenencia a un grupo cultural,
etc.” (ídem.).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Como alguna vez ha escrito
Piscitelli (2013) “Quizás lo que mejor defina a las humanidades digitales no
sean tanto las tecnologías a las que recurre (innumerables y volátiles), ni los
métodos (que provienen de los campos consagrados más diversos), sino cierto
`encuentro´ alegre y juguetón con la representación digital en si misma”<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Interpretada la cuestión
como una simple asociación entre contenidos y recursos tecnológicos (tal y como
históricamente ha sucedido), me permito proponer a las “Humanidades Digitales”
como <i>la libre asociación entre todo tipo
de contenidos humanísticos y los recursos de variada índole que ofrece, y
promete en el futuro inmediato, el
desarrollo de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones.</i><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><i><br /></i></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">No obstante la simplicidad
que entonces implica hablar de “Humanidades Digitales”, los ámbitos académicos
proponen análisis, congresos y seminarios, cátedras específicas y hasta titulaciones
de posgrado para la materia.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Lejos de ese abordaje, esta
nota intenta patentizar la cercanía de cualquiera de nosotros, poeta, cantante,
compositor, escritor, autor, artista plástico, historiador, filósofo,
sociólogo, psicólogo o jurista (sin pretender agotar la nómina) tiene o puede
tener con las “Humanidades Digitales” en tanto utilice la herramienta
informática y vehiculice sus creaciones a través de Internet. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Y en tanto su presencia en
la Web se incrementa y solidifica, también el usuario o consumidor, receptor no
especializado (quizá pasivo, tal vez interactivo) se vincula de manera
indubitable, consciente o inconsciente, con las “Humanidades Digitales”.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi4QABfjKEGjsGYj9oXEHx1T9KaS1pqtsIAUtt0lzhA6Dy2fEzU8kpbGNlXoVSPiL5EpHVJfVobwzHRg9On2U3jGw9JRtdjteoGnDnGodE2jxAMM8HsokhK4g1BiEW1AQQ4eBdr1PEUAJI/s1600/Manifeste+des+Digital+Humanities.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi4QABfjKEGjsGYj9oXEHx1T9KaS1pqtsIAUtt0lzhA6Dy2fEzU8kpbGNlXoVSPiL5EpHVJfVobwzHRg9On2U3jGw9JRtdjteoGnDnGodE2jxAMM8HsokhK4g1BiEW1AQQ4eBdr1PEUAJI/s200/Manifeste+des+Digital+Humanities.jpg" width="130" /></a><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Resulta paradójico el modo
tradicional a través del cual “actores u observadores de las digital humanities
(Humanidades Digitales)” reunidos en París con motivo de un taller denominado
THATCamp, en los días 18 y 19 de mayo de 2010, buscan su espacio y sentido
emitiendo un denominado “Manifeste des Digital humanities” (Manifiesto por unas
Humanidades Digitales). Esto es, una exposición escrita sobre las motivaciones
(Contexto, Definición, Situación, Orientaciones), que culmina un llamado de
profundo contenido expresivo y simbólico: Rejoignez-nous ! (¡Únete a nosotros!).
Esto es, al más puro y clásico estilo de los manifiestos políticos, artísticos
y sociológicos de los Siglos XIX y XX.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">La bibliografía y otras
fuentes que nos provee precisamente la tecnología a través de la búsqueda en
Internet muestra, por un lado la unicidad de criterio en cuanto a lo antes
referido respecto de las “Humanidades Digitales” y por otra parte, la
especificidad que las mismas adoptan en relación con las distintas áreas del
saber, el estudio, la investigación, el conocimiento y la creación.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">De hecho son realidades y
usos muy diferentes los que se enmarcan en la asociación entre las nuevas tecnologías
o “lo digital” y las múltiples ramas de las humanidades.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Algunas
manifestaciones de las “Humanidades Digitales” en la web.<o:p></o:p></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Publicaciones de envergadura
como “Letralia. Tierra de letras”, revista literaria de los escritores
hispanoamericanos en Internet, en línea desde el año 1996 (desarrollada desde
Cagua, Aragua, Venezuela, que con un paréntesis técnico entre el 2000 y el 2003
continúa editándose hasta nuestros días); “Ensayos Académicos” publicación
anual del Instituto Superior Pedro Goyena de Bahía Blanca, Argentina, nacida y
editada durante más de diez años en papel y finalmente consolidada en línea a
partir del 2014 o “ArtyHum”, revista digital de artes y humanidades producida
mensualmente en Vigo, Pontevedra, España, desde el 2014, pueden citarse (cada
una en su categoría y condición) como ejemplos de la calidad profesional de las
publicaciones que pueden encontrarse en Internet. Son aportes y modelos del
ejercicio diferenciado y específico de las “Humanidades Digitales”.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">En otras áreas, archivistas,
historiadores y bibliotecarios, por ejemplo, destacan las posibilidades de
digitalización de incunables y documentos originales para hacerlos visibles y
circulantes, en principio dentro de los ámbitos académicos y finalmente
accesibles a la sociedad toda. Por citar solo un ejemplo, el manuscrito
conocido como "Vergilius Vaticanus" (año 400), con fragmentos de la
obra del poeta romano Virgilio (nacido en el año 70 a.C.) ha sido digitalizado
y está disponible en línea de manera libre y gratuita.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Los artistas plásticos ya
disponen de plataformas a través de las cuales exhibir reproducciones
fotográficas y vender los originales de sus pinturas y esculturas.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Museos, edificios y sitios
históricos pueden ser “recorridos” en paseos virtuales tridimensionales de
impactante calidad visual desde las computadoras personales de cualquier
individuo conectado a Internet.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">La popular red social de
videos Youtube ofrece innumerables posibilidades de acceso a realizaciones
audiovisuales de variado contenido y calidad (cine, video, música, tutoriales,
documentales, etc.), de carácter profesional o amateur.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">El desarrollo de blogs
personales también constituye un abanico de información, creatividad,
imaginación, arte, política, filosofía, historia, literatura, etc. que con
variado grado de profesionalismo, arte o maestría, son socializados a través de
Internet. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Inclusive la red Facebook,
ampliamente conocida y difundida, hace de cada usuario un productor cultural
que comunica ideas y pensamientos, posiciones políticas o filosóficas,
criterios estéticos, lenguas, usos y costumbres, etc. propios o ajenos.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdyVRDGgZKWQEU3ZGJrPtvJOc4DgVdzSma8e54lckCa-A1rKa6t78YfwketiD_4M5NL6_Gg5ZN-GmDFE-CQXB77fO4iZV40vV8DM-xAjFbDwEOw3OZ1GAmU8rlnRJukpO6yaA61W2KAc4/s1600/Imagen+de+una+visita+a+la+Casa+de+Canarias+en+Second+Life.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="118" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdyVRDGgZKWQEU3ZGJrPtvJOc4DgVdzSma8e54lckCa-A1rKa6t78YfwketiD_4M5NL6_Gg5ZN-GmDFE-CQXB77fO4iZV40vV8DM-xAjFbDwEOw3OZ1GAmU8rlnRJukpO6yaA61W2KAc4/s200/Imagen+de+una+visita+a+la+Casa+de+Canarias+en+Second+Life.png" width="200" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Second Life (segunda vida)
es un interesante ejemplo de combinación de juego con contenidos culturales. Se
trata de un mundo virtual tridimensional. Para los entendidos en la materia,
más específicamente un “metaverso” (un universo abstracto, digital y paralelo)
en donde, previa inscripción y mediante la utilización de un “avatar” (protagonista
virtual personalizado) se pueden ejecutar acciones semejantes a las de la vida
real.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Pero, más allá de sus
capacidades lúdicas, este producto de Linden Lab en línea desde el año 2003,
admite y ha recibido propuestas culturales de diversa índole, que van desde
recitales de música hasta un museo virtual como es la Casa de Canarias en
Second Life (que no solo participa del “metaverso” sino también reproduce
alguna acciones a través de videos disponibles en su blog). La Casa de Canarias
en Second Life es un espacio abierto a todas aquellas personas interesadas en
el archipiélago y su cultura. Un punto de referencia canario en esta sociedad
virtual, en donde tienen cabida tertulias, presentaciones de libros,
exposiciones, revistas de actualidad y otras manifestaciones culturales
referidas a las Islas Canarias.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Más allá de sus fallas de
seguridad (ha sufrido, por ejemplo, modificaciones de carácter difamatorio o
agresivo en biografías de personajes políticos) y sus características
intrínsecas de apertura y producción colectiva sin restricciones (cualquier
usuario puede incluir información no sujeta a revisión, salvo la de otros
usufructuarios que pudieran detectar errores con posterioridad) que reducen
notablemente la credibilidad de sus contenidos, la enciclopedia virtual
“Wikipedia” es un modelo de tarea colaborativa en línea. Esto es así en tanto
se trata, como se dijo, de un compendio de información provista e ingresada al
sistema por contribuyentes individuales de todo el mundo. Mostrada como una
enciclopedia de contenido libre, tiene una presencia destacada en Internet y
ubicación privilegiada en los resultados de las búsquedas. Se desarrolla en
varios idiomas y alberga infinidad de entradas y enlaces internos y externos
sobre las temáticas más variadas, al igual que biografías de personas con
actuación (destacada o ignota) en las artes, las letras, la política, el cine,
la medicina, la filosofía, la sociología, el teatro, etc.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Condiciones
de accesibilidad a las “Humanidades Digitales”.<o:p></o:p></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Siguiendo el planteo de Tedesco
(2005) sobre condiciones básicas de educabilidad en un marco de equidad social
(que supone como mínimo un <i>desarrollo
cognitivo</i> asentado en una sana
estimulación afectiva, buena alimentación y condiciones sanitarias adecuadas y
una <i>socialización primaria </i>que
incluye rudimentos de un marco básico que permita a los niños insertarse en la
escuela primaria), no se puede eludir el hecho de que, para que exista un
vínculo amigable y significativo entre las personas (en forma individual o
colectiva) y las “Humanidades Digitales”, deben darse tales condiciones de
accesibilidad y otras más específicas. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Al respecto señalaré algunas
y dejaré otras a la libre imaginación del lector o a la especificidad del uso o
interés que en materias o casos específicos pudieran patentizarse: Comprensión
de textos, dominio del vocabulario, internalización del “aprender a aprender”,
hábitos de estudio e investigación, habilidades para el ordenamiento y la
estructuración lógica de conceptos, cultura general, sensibilidad estética,
habilidades para el uso de herramientas informáticas, capacidad para la
asimilación y comprensión de propuestas diferentes (Padula Perkins, 2008).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Parafraseando a Tedesco
(ídem) y a un interrogante propio, dejaré pendiente la respuesta a esta pregunta:
¿Cuánta equidad social es necesaria para el aprovechamiento exitoso de las
“Humanidades Digitales”?<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Como puede notarse (dadas
ciertas condiciones básicas), de las “Humanidades Digitales” son protagonistas,
usuarios, desarrolladores y beneficiarios, tanto quienes actúan en ámbitos
académicos, como quienes están ajenos a ellos. La comunicación se ha tornado
multidireccional y todas las personas tienen la posibilidad de ser no solo
receptores sino también emisores.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">En ese contexto, se presenta
el desafío de tener que distinguir y seleccionar entre la riqueza y la pobreza
de contenidos. El reto personal de valoración de las fuentes y cotejo de
información en el caso de estudiosos o investigadores. La posibilidad de enfrentarse a expresiones
artísticas desconocidas y tener que valorarlas por si mismas, sin los contextos
físicos o informativos que tradicionalmente las rodeaban y/o precedían. De ser,
como el “oyente emotivo” de la clasificación en la que Theodor Adorno ubicaba a
los oyentes de la música: Desinformado y por lo tanto abierto a valorar a
través de su propia emoción (Monjeau, 2008).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Aquí aparece la importancia
del bagaje de conocimientos con el cual los grupos sociales y los individuos se
enfrentan a lo que las “Humanidades Digitales” les ofrecen. De esa capacidad se
desprende el grado de reconocimiento, beneficio y asimilación cultural que
pueda ponerse en acción en la búsqueda y aprovecharse ante los hallazgos. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Si bien Internet revierte en
gran medida “el monopolio de hechos de los medios de producción y difusión a
gran escala de la información” que preocupara a Bourdieu (2007), acentúa la
importancia de las condiciones de producción que generen el acceso al
conocimiento, si se pretende que “cada vez más gente reúna las condiciones
necesarias para apropiarse de lo universal” (ídem), dado que “democratizar y
afianzar la sociedad del conocimiento no implica solo el acceso a las
tecnologías”, como advierte Fainholc (2004), sino también “comprenderlas,
apropiarlas crítica y reflexivamente y otorgarles un sentido personal y
sociocomunitario” (ídem.).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Debe entenderse también que
el vínculo entre las “Humanidades Digitales” y las personas y grupos requiere
de un deseo, gusto o necesidad (explícito o implícito) de parte de éstos. Ya
que es a partir de una realidad conocida y reconocida, desde donde se estimula
la identificación de los actores como sujetos participantes de la cultura y
pueden ponerse en acto “mecanismos de empatía y motivación tendentes a
incentivar su participación en vivencias culturales novedosas que los enfrenten
con situaciones hasta entonces ocultas en la negación o en la ignorancia”
(Padula Perkins, 2015).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">“Humanidades
Digitales” en una experiencia personal.<o:p></o:p></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Como autor de letras de
canciones, he podido hacer un abordaje empírico sobre algunos aspectos de las
“Humanidades Digitales” que, en base de un artículo publicado al respecto, voy
brevemente a comentar (Padula Perkins, 2016).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">El desarrollo tecnológico
del que se ha dado cuenta precedentemente fue ofreciendo, en distintas y
distantes etapas, herramientas para la mediatización del vínculo creativo entre
el autor y el compositor. En la actualidad las nuevas tecnologías permiten
superar tiempos y distancias con facilidad. Autores y compositores que no se
conocen personalmente, que viven a miles de kilómetros de distancia o que aun
estando relativamente cercanos no pueden hacer coincidir sus tiempos
disponibles para concretar encuentros personales, hallan en estas tecnologías
(archivos de audio, programas para escritura de partituras, correo electrónico,
Skype, Facebook, Youtube, etc.) a mediadores amigables y sumamente prácticos a
la hora de adentrarse en el proceso de producción artística.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">En relación con los intérpretes,
también las tecnologías cumplen un rol importante ya que en muchos casos los
compositores graban pistas que, siempre a la distancia, envían a los cantantes
para que graben sobre ellas su voz (e
inclusive algún otro instrumento). Obviamente, también puede vehiculizarse con
facilidad la partitura escrita o cualquier otro tipo de notación musical.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Las posibilidades de
comunicación entre autor y/o compositor e intérpretes tendrán formas semejantes
a las ya mencionadas, amén de la libertad de la que estos últimos deben gozar
para formular su arte desde una perspectiva personal y también creativa.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">En cuanto a la protección
del derecho de autor, más allá de la vigencia y funciones legales y operativas
de las sociedades de autores y compositores que en cada país nos representan,
Internet ofrece modernas formas de protección de los derechos morales. A modo
de ejemplo valga mencionar sitios como Safe Creative, Creative Commons o
Músicas Registradas. Con distintas características y formas de funcionamiento,
este tipo de espacios resulta apto para la protección de los derechos básicos,
aunque no así para los económicos, que son materia exclusiva de las sociedades
de autores y compositores que no solamente resguardan derechos sino también
actúan como entidades recaudadoras.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Finalmente y dentro del
contexto de las piezas musicales, cabe la mención de las amplias posibilidades
de difusión de obras que Internet ofrece. Espacios tales como Youtube (video),
Reverbnation (audio) son paradigmáticos entre muchos otros aptos para la
difusión de material audiovisual y de sonido. Secundariamente, las piezas
alojadas en esos sitios pueden luego ser compartidas y reproducidas (mediante
enlace o inserción) en blogs, medios periodísticos y redes sociales como
Facebook (que también puede alojar videos de manera directa), Twitter o Google
+, entre otras.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Otra alternativa para la
difusión de composiciones musicales es la de la generación de códigos QR, del
inglés Quick Response (código de respuesta rápida), que es un módulo para almacenar
información en una matriz de puntos o en un código de barras bidimensional.
Ello permite la lectura (y consecuente acceso directo) a través de teléfonos
celulares. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Como puede advertirse a
través de esta experiencia personal, en el campo de las “Humanidades
Digitales”, la creación de autores y compositores de música y su socialización
a través de los intérpretes (como así también de la difusión de letras y
partituras) forma parte de una realidad cotidiana y fácilmente apreciable en
las redes sociales.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">No está demás decir que las
canciones, la música popular, es emergente y transporte de culturas en sus más
diversas manifestaciones, que van desde la significatividad del género musical
(o su ruptura, creación o recreación), hasta los contenidos emocionales,
sociales, históricos, psicológicos, geográficos y de otro tipo que estuvieran
tácita o explícitamente incluidos en las letras.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Comentario
final pero no de cierre.<o:p></o:p></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Como se ha podido advertir,
el de las “Humanidades Digitales” es un mundo cercano, a la vez académico y
popular, tanto como lo son las humanidades (que remiten de uno u otro modo a
nuestra propia condición de persona) y “lo digital” (presente en el cotidiano
quehacer de millones de ciudadanos del mundo).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Las “Humanidades Digitales”
son parte viva y práctica del proceso de desarrollo de la sociedad, que nos
involucra pasiva o activamente, en mayor o menor medida, de uno u otro modo,
con o sin consciencia de ello.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Las “Humanidades Digitales”
no son una oscura materia de estudio destinada a élites específicamente
formadas e informadas al respecto. Son expresiones, diversas y en constante cambio, de la riqueza
de la filosofía, del arte, de la historia, de las letras y de otras
manifestaciones del pensamiento y de la
creatividad humana puestos en acto y
disponibles de manera cada vez más accesible para todos.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">“Humanidades Digitales” al
alcance de todos. Un camino a recorrer desde lo individual y colectivo en la
sociedad del conocimiento.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiTt1x2fYDnnl6Bb5-uiVAIzcotah2P1nlOdKjdqsLgjmom7LkPkt7pJJd9sTZs-HAj7YLlFdR4_BBvUfGO-xFDIro98r2qiVHvkf0M7aBcz3MMmwjyw_HXqGqa4Ak5B-vWv7P-r-4shv0/s1600/Ensayos+Acad%25C3%25A9micos+ocubre+2016.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiTt1x2fYDnnl6Bb5-uiVAIzcotah2P1nlOdKjdqsLgjmom7LkPkt7pJJd9sTZs-HAj7YLlFdR4_BBvUfGO-xFDIro98r2qiVHvkf0M7aBcz3MMmwjyw_HXqGqa4Ak5B-vWv7P-r-4shv0/s200/Ensayos+Acad%25C3%25A9micos+ocubre+2016.png" width="155" /></a></span></div>
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><o:p></o:p></span><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Bibliografía
y fuentes:<o:p></o:p></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal">
<b><span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Boudieu, Pierre. Sobre la televisión, Anagrama,
Barcelona, España, 2007.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Fainholc, Beatriz. Lectura crítica en Internet – Análisis
y utilización de recursos tecnológicos en educación, Homo Sapiens, Rosario, Argentina,
2004.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Monjeau, Federico.En: Términos críticos de la sociología
de la cultura. Entrada “Sociología de la música”, Paidós, Buenos Aires, Argentina,
2008.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Padula Perkins, Jorge Eduardo . Una introducción a la
educación a distancia (nueva edición aumentada y actualizada), Fondo de Cultura
Económica, Buenos Aires, Argentina, 2008.Fondo de Cultura Económica.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Padula Perkins, Jorge Eduardo . Aproximaciones a la
gestión cultural, TREA, Gijón, España, 2015.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Padula Perkins, Jorge Eduardo. Las TIC como mediadoras de
la relación creativa entre autor y compositor de canciones: una mirada
descriptiva y empírica. Revista Letralia. Tierra de letras. En línea . </span><a href="http://letralia.com/articulos-y-reportajes/2016/07/28/las-tic-como-mediadoras-de-la-relacion-creativa-entre-autor-y-compositor-de-canciones-una-mirada-descriptiva-y-empirica/"><span style="line-height: 115%;">http://letralia.com/articulos-y-reportajes/2016/07/28/las-tic-como-mediadoras-de-la-relacion-creativa-entre-autor-y-compositor-de-canciones-una-mirada-descriptiva-y-empirica/</span></a><span style="line-height: 115%;">
(Consulta: 28-07-2016)<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Piscitelli, Alejandro. ¿Cómo definir a las Humanidades
Digitales? ¿O no definirlas? Cátedra Datos. En línea. </span><a href="http://catedradatos.com.ar/2013/09/como-definir-a-las-humanidades-digitales-o-no-definirlas/"><span style="line-height: 115%;">http://catedradatos.com.ar/2013/09/como-definir-a-las-humanidades-digitales-o-no-definirlas/</span></a><span style="line-height: 115%;"> (Consulta: 22-07-2016) <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Tedesco, Juan Carlos. Educar en la sociedad del
conocimiento, Fondo de Cultura Económica, Buenos Aires, 2005.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Enciclopedia Básica Danae, Danae, España, 1973 – voz:
Humanidades<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Argentina Virtual </span><a href="http://argentinavirtual.educ.ar/localhost/index.html"><span style="line-height: 115%;">http://argentinavirtual.educ.ar/localhost/index.html</span></a><span style="line-height: 115%;">
(Consulta: 22-07-2016)<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">“Manifeste des Digital humanities” (2010). En línea. THATCamp
</span><a href="http://tcp.hypotheses.org/487"><span style="line-height: 115%;">http://tcp.hypotheses.org/487</span></a><span style="line-height: 115%;">
(Consulta: 22-07-2016)<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">“La realidad de las Humanidades Digitales en España y
América Latina” (2015). </span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Monográfico Nº 1. Revista ArtyHum, Vigo, ArtyHum. En
línea. </span><a href="https://artyhum.com/descargas/monograficos/MONOGR%C3%81FICO%20HD.pdf"><span style="line-height: 115%;">https://artyhum.com/descargas/monograficos/MONOGR%C3%81FICO%20HD.pdf</span></a><span style="line-height: 115%;">
(Consulta: 03-04-2016)<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Definición </span><a href="http://definicion.de/digital/"><span style="line-height: 115%;">http://definicion.de/digital/</span></a><span style="line-height: 115%;"> . En línea (Consulta: 22-07-2016)<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Museos del mundo. Blog SMConectados </span><a href="http://blog.smconectados.com/2015/05/19/15-museos-virtuales-que-puedes-visitar-sin-salir-de-clase/"><span style="line-height: 115%;">http://blog.smconectados.com/2015/05/19/15-museos-virtuales-que-puedes-visitar-sin-salir-de-clase/</span></a><span style="line-height: 115%;"> (Consulta: 22-07-2016)<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Portal Clásico </span><a href="http://portalclasico.com/el-manuscrito-mas-antiguo-de-virgilio-ya-esta-digitalizado"><span style="line-height: 115%;">http://portalclasico.com/el-manuscrito-mas-antiguo-de-virgilio-ya-esta-digitalizado</span></a><span style="line-height: 115%;"> .
En línea (Consulta 26-07-2016)<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Biblioteca Apostólica Vaticana. </span><a href="http://digi.vatlib.it/view/MSS_Vat.lat.3225"><span style="line-height: 115%;">http://digi.vatlib.it/view/MSS_Vat.lat.3225</span></a><span style="line-height: 115%;"> En línea (Consulta: 26-07-2016)<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Artelista </span><span style="line-height: 115%;"><a href="http://www.artelista.com/">http://www.artelista.com/</a></span><span style="line-height: 115%;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">El Artista Online </span><span style="line-height: 115%;"><a href="http://www.elartistaonline.com/index.php">http://www.elartistaonline.com/index.php</a></span><span style="line-height: 115%;"> <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Revista “Letralia. Tierra de letras” (Cagua, Aragua,
Venezuela) </span><span style="line-height: 115%;"><a href="http://letralia.com/">http://letralia.com/</a></span><span style="line-height: 115%;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Revista “Ensayos Académicos” (Bahia Blanca, Buenos Aires,
Argentina) </span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;"><a href="http://www.institutogoyena.com.ar/revista-academica/">http://www.institutogoyena.com.ar/revista-academica/</a></span><span style="line-height: 115%;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Revista “ArtyHum” (Vigo, Pontevedra, España) </span><span style="line-height: 115%;"><a href="https://www.artyhum.com/">https://www.artyhum.com/</a></span><span class="MsoHyperlink"><span style="line-height: 115%;"><o:p></o:p></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Second Life </span><span style="line-height: 115%;"><a href="http://www.lindenlab.com/about">http://www.lindenlab.com/about</a></span><span style="line-height: 115%;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Casa de Canarias Virtual </span><span style="line-height: 115%;"><a href="http://casadecanariasvirtual.blogspot.com.ar/">http://casadecanariasvirtual.blogspot.com.ar/</a></span><span style="line-height: 115%;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="line-height: 115%;">Wikipedia </span><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Wikipedia:Portada"><span style="line-height: 115%;">https://es.wikipedia.org/wiki/Wikipedia:Portada</span></a><span style="line-height: 115%;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">*************</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><a href="https://issuu.com/institutosuperiordrpedrogoyena/docs/ensayos_acad__micos_2016/104" target="_blank"><br /></a></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="color: #990000; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><a href="https://issuu.com/institutosuperiordrpedrogoyena/docs/ensayos_acad__micos_2016/104" target="_blank">Publicación original en "Ensayos Académicos"</a></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="color: #990000;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="color: #990000;">**********</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-69836161616833665292015-09-04T15:12:00.000-07:002015-09-04T15:12:37.272-07:00Desde la historia, una ventana a la gestión cultural.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="font-family: Times, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjiLO4sQVafaeE_gMnhczpDGQcAC9H-TLcBSW4hzGpzPXy4ci4b2wwfTCFfNl2iG7nmT-wzVC1GxUzdNjrpzMBQRBSRObWgGRn5TLj4sKj94LUzN1zLoN4lgk5ASV3vDEb4JT90EwRBob8/s1600/Aproximaciones_a_la_gesti%25C3%25B3n_cultural.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjiLO4sQVafaeE_gMnhczpDGQcAC9H-TLcBSW4hzGpzPXy4ci4b2wwfTCFfNl2iG7nmT-wzVC1GxUzdNjrpzMBQRBSRObWgGRn5TLj4sKj94LUzN1zLoN4lgk5ASV3vDEb4JT90EwRBob8/s320/Aproximaciones_a_la_gesti%25C3%25B3n_cultural.jpg" width="232" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="font-family: Times, Times New Roman, serif;">Entre las ciencias sociales, la historia es una de
las más relacionadas con la generación de producciones destinadas a su
exposición pública. Desde la presentación de un libro hasta un museo en su plenitud (pasando por expresiones
teatrales, musicales, cinematográficas y de diversa índole, con enfoques
históricos), requieren de organización, administración, producción y/o gestión de alguna naturaleza y medida.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="font-family: Times, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="font-family: Times, Times New Roman, serif;">Es por ello que, si bien “Periodismo de ayer” es un
blog manifiestamente destinado a la difusión de ensayos y artículos
relacionados con periodistas y medios gráficos del pasado, cabe hacerse eco de
la reciente publicación del libro “Aproximaciones a la gestión cultural”, obra
del periodista Jorge Eduardo Padula Perkins, autor y desarrollador de los
contenidos de este blog.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="font-family: Times, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="font-family: Times, Times New Roman, serif;">Gestión y política, intelectuales, gestores y
militantes, economía, derecho, contracultura, gestión de lo alternativo, la
cultura no demandada, son algunas de las cuestiones sobre las cuales el autor
propone reflexión y análisis.</span></span></div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgKH_W7D8Ms9qPHxb4Tb0f5ZAqT73wfjvhF9dOxdvT3v7DzvV-XznCnxyZNPnma_m0znxIJMLnX-MqV6Q7lkaNo_o0iAxWsFOaeDfUwwkxOw96BcDPmRQN24wBXg1uIJd-xmR7gzDRVQf4/s1600/Isologo+TREA.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgKH_W7D8Ms9qPHxb4Tb0f5ZAqT73wfjvhF9dOxdvT3v7DzvV-XznCnxyZNPnma_m0znxIJMLnX-MqV6Q7lkaNo_o0iAxWsFOaeDfUwwkxOw96BcDPmRQN24wBXg1uIJd-xmR7gzDRVQf4/s1600/Isologo+TREA.png" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="font-family: Times, Times New Roman, serif;">Publicada por la editorial asturiana TREA (Gijón,
España), esta obra es un trabajo introductorio y provocador que describe y
caracteriza a su objeto de análisis al tiempo que lo pone en tela de juicio sin
pudores profesionales.</span><span style="font-family: Times New Roman, serif;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="font-family: Times, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="font-family: Times, Times New Roman, serif;"><a href="http://www.trea.es/books/aproximaciones-a-la-gestion-cultural" target="_blank">Más información sobre "Aproximaciones a la gestión cultural"</a></span></span><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-9102311187048626342014-09-29T19:14:00.000-07:002014-09-29T20:17:27.795-07:00En el 55º aniversario de la Biblioteca Popular Pedro Goyena...<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #660000; font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: large;"><u>...se publica una nota sobre la obra de aquel periodista católico.</u></span></div>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEigj-hoy_WTs1ueSkomYYe2GzpmocFe2SGAEE3sZzWWCwEmIaMRGWrg2ssAjYg-lyHP0P_XT69m96WhMyU6IUd33AFbQmH5qyo-IuI74NHyWqUJYDaWE_L3IR27B2w-TkYdHuUJPqjduoI/s1600/perspectiva+sur.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEigj-hoy_WTs1ueSkomYYe2GzpmocFe2SGAEE3sZzWWCwEmIaMRGWrg2ssAjYg-lyHP0P_XT69m96WhMyU6IUd33AFbQmH5qyo-IuI74NHyWqUJYDaWE_L3IR27B2w-TkYdHuUJPqjduoI/s1600/perspectiva+sur.png" height="200" width="200" /></a></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">El diario local <a href="http://www.perspectivasur.com/2/nota_1.php?noticia_id=40857" target="_blank">"Perspectiva Sur"</a>, en su edición del lunes 29 de septiembre de 2014 ofrece a sus lectores el artículo titulado "Pedro Goyena y la prensa católica de su época", que lleva la firma del periodista Jorge E. Padula Perkins.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Lo hace en relación directa con el 55º aniversario de la creación de la "Biblioteca Popular Pedro Goyena" de la ciudad de Quilmes (de la cual Padula Perkins es socio honorario).</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Entre otras consideraciones, la nota (que puede leerse completa <a href="http://periodismodeayer.blogspot.com.ar/2010/12/pedro-goyena-y-la-prensa-catolica-de-su.html" target="_blank">en este mismo blog</a>) dice: </span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: #fff3db; color: #29303b; font-family: Georgia, 'Times New Roman', sans-serif; font-size: 13px; text-align: justify;"><i>Groussac lo describe como de “una fisonomía simpática, risueña a la par que pensativa: ojos pequeños, vivísimos, que vibraban por entre la orla negra de las pobladas pestañas una mirada penetrante; boca abultada de orador elocuente o decidor festivo; barba de misionero joven que afinaba un tanto el pálido perfil” y lo caracteriza por su “cordialidad expansiva, su alegre franqueza y su inalterable buen humor, su rápida asimilación intelectual y ese coger al vuelo el pensamiento ajeno a medio elaborar, con una presteza casi adivinatoria”.</i></span></div>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhS3S6yzAggiWvuwF42YakyTe88lr0M2rwETrWWSSKJH327NnPg9QNc7heMYqdeBH0qSj1sf8tdkVoz4iuuEsGeOPUFiGRhok3KxUuJrNGpqVMbOUhSHIPQC3n0lepBL71oJ7MhGEGOoNU/s1600/Goyena+de+la+biblio+en+perspectiva.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em; text-align: justify;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhS3S6yzAggiWvuwF42YakyTe88lr0M2rwETrWWSSKJH327NnPg9QNc7heMYqdeBH0qSj1sf8tdkVoz4iuuEsGeOPUFiGRhok3KxUuJrNGpqVMbOUhSHIPQC3n0lepBL71oJ7MhGEGOoNU/s1600/Goyena+de+la+biblio+en+perspectiva.jpg" height="200" width="167" /></a><span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif; text-align: justify;">De esta manera "Perspectiva Sur" ha querido no solo destacar la noble tarea de educación y divulgación de la cultura y el saber que, durante más de medio siglo ha venido desarrollando esta biblioteca popular, sino también algunas de las características éticas e intelectuales del periodista, escritor y político cuyo nombre lleva con orgullo.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif; text-align: justify;"><br /></span>
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif; text-align: justify;">Al margen de su cosmovisión, con la que puede coincidirse o no, lo que destaca a Pedro Goyena es la calidad de su labor con la pluma y su honestidad intelectual. Así lo sintetiza de algún modo el final del artículo cuando afirma:</span><br />
<div style="text-align: center;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="background-color: #fff3db; color: #29303b; font-family: Georgia, 'Times New Roman', sans-serif; font-size: 13px;">Goyena murió económicamente pobre, en 1892 en el barrio de Flores, donde había vivido. Más se equivocó Paul Groussac, cuando a poco tiempo de aquella desaparición física pensaba que las jóvenes generaciones lo olvidarían. En el siglo XXI la figura de Pedro Goyena tiene su lugar en la historia de las ideas, razón por la cual no ha sido total su muerte y puede coronarse su existencia con la frase del poeta Horacio que Groussac estimara inalcanzable: Non ovnis moriar.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-35464390507761246242012-11-17T10:53:00.000-08:002012-11-17T11:21:13.204-08:00La botadura de la Fragata Libertad. Antes y después de la noticia.<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;">Por Jorge Eduardo Padula Perkins<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR">“En una
lucida ceremonia que presidió el presidente provisional, general Pedro Eugenio
Aramburu, se procedió esta mañana a la botadura del velero – escuela “Libertad”
de <st1:personname productid="la Marina" w:st="on">la Marina</st1:personname>
de Guerra.”, reza el primer párrafo de la noticia publicada el miércoles 30 de
mayo de 1956 por el diario “El Litoral” de Santa Fe (Año XXXVIII – Nº 11.986).<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiFyA63vSUBeNxvTEmo86UA6c28N3pltnzOuEpHsqdd_V9LMWcGYe7p5yG3wJGHE9l30FBQyHZhnDV5kHGEnfYr9uXmYtY4gRKAtDRi8w9LAp2zWOUcLhIp2Wdi0pppMuPUrOH38nLY7ZI/s1600/24659-1-3-2-1.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em; text-align: justify;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiFyA63vSUBeNxvTEmo86UA6c28N3pltnzOuEpHsqdd_V9LMWcGYe7p5yG3wJGHE9l30FBQyHZhnDV5kHGEnfYr9uXmYtY4gRKAtDRi8w9LAp2zWOUcLhIp2Wdi0pppMuPUrOH38nLY7ZI/s1600/24659-1-3-2-1.jpg" /></a><span lang="ES-AR"> </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR">Se trataba
de un tradicional periódico de ocho páginas, con redacción y administración en
la calle San Martín 2651 de la mencionada ciudad, en la provincia argentina homónima,
fundado en 1918.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR">En su
primera plana de la fecha citada, y en destacada ubicación, en el espacio
superior izquierdo, por donde se comienza la lectura, la
edición del penúltimo día de mayo de 1956, titulaba “FUÉ BOTADA <st1:personname productid="LA FRAGATA" w:st="on">LA FRAGATA</st1:personname> ‘LIBERTAD’”.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR">En base a
un cable atribuido a la agencia UP, con origen en Río Santiago (Buenos Aires),
el medio daba cuenta de que “El presidente de <st1:personname productid="la Nacin" w:st="on">la Nación</st1:personname> llegó minutos antes
de las 10 en compañía del ministro de Marina y fue recibido por el
contralmirante Isaac Rojas y autoridades nacionales y provinciales. A su
llegada fue saludado con una salva de artillería de 21 cañonazos.” <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR">“Luego –continúa
el texto periodístico- …se trasladó al palco principal instalado en el extremo
posterior de la grada que rodea el casco del velero, ejecutándose en ese
momento el Himno Nacional. Luego el contralmirante Teodoro Hartung pronunció
breves palabras, tras lo cual la esposa del presidente de <st1:personname productid="la Repblica" w:st="on">la República Sra. Sara Herrera</st1:personname> …madrina de la
botadura, procedió al bautismo de la nave.”<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR">Por decreto Nº 7.922, del 27 de abril de 1956, se le impuso el nombre de "Libertad" a la embarcación destinada a ser buque-escuela de la Marina.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<div style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR">La
construcción de la misma se había iniciado unos años antes en AFNE (Astilleros
y Fábricas Navales del Estado), empresa estatal fundada por Decreto Nº 10.627
del Poder Ejecutivo, en junio de 1953, con sede en Río Santiago. </span><br />
<span lang="ES-AR"><br /></span>
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9ZsH6Sv-2TLw7Xw3befbZUq2NnuocO07pMzeOE-2trDs-2KDCkTAnAMjpAmVcY-M2y7co_F750JqPcFQOtfB0hV4l5fP5IzZQcYVQKaR0DARA6w6yg06SbajUZKOy5-o-FRah0ZoBVdE/s1600/peron+fragata.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9ZsH6Sv-2TLw7Xw3befbZUq2NnuocO07pMzeOE-2trDs-2KDCkTAnAMjpAmVcY-M2y7co_F750JqPcFQOtfB0hV4l5fP5IzZQcYVQKaR0DARA6w6yg06SbajUZKOy5-o-FRah0ZoBVdE/s320/peron+fragata.jpg" width="320" /></a><span lang="ES-AR">Más precisamente, los trabajos comenzaron el 11 de diciembre de 1953, durante la segunda presidencia de Juan Domingo Perón, quien colocó en la ocasión el primer remache del que sería el buque escuela de la entonces Marina de Guerra argentina. (una fotografía cuyo origen no ha podido ser determinado con claridad, se atribuye a ese momento y muestra a Perón, martillo en mano y rodeado de algunos uniformados que se perciben como marinos).</span><br />
<span lang="ES-AR"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
Paradójicamente,
al sucesor presidencial de Perón tras el golpe de estado que produjo su
derrocamiento en 1955, también se le atribuiría un gesto inaugural semejante.
De ese modo lo asevera la nota de El Litoral: “Después de esta ceremonia el
general Aramburu colocó el primer remache de una embarcación fluvial que se
construirá en esta misma grada por encargo del Ministerio de Transportes.”</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR">“Finalizado
este acto –continúa relatando el artículo periodístico- el jefe de los
astilleros entregó al general Aramburu un artístico martillo con su
correspondiente cofre.”, y concluye informando que “Posteriormente el general
Aramburu, el contralmirante Rojas, el interventor de la provincia de Buenos
Aires contralmirante Hartung y demás autoridades que asistieron a la ceremonia,
se dirigieron a <st1:personname productid="la Casa" w:st="on">la Casa</st1:personname>
de Gobierno donde fue servido un almuerzo”.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuIdRik5iY6pKkS1bgCrSnKOFetRe-uxjFaVPnZPYun3D_SOhNJzHwmR4BVlkWwDXRjWtt_TzA-GYqVMrk3uJrfEWR9i-peoa7qH3g7bGa-zRanZpbW7tSUKpHGM5ATeXxF-ItcZ_5sfw/s1600/medalla-frali-paulinox2.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuIdRik5iY6pKkS1bgCrSnKOFetRe-uxjFaVPnZPYun3D_SOhNJzHwmR4BVlkWwDXRjWtt_TzA-GYqVMrk3uJrfEWR9i-peoa7qH3g7bGa-zRanZpbW7tSUKpHGM5ATeXxF-ItcZ_5sfw/s200/medalla-frali-paulinox2.jpg" width="176" /></a><span lang="ES-AR">Para 1961,
estando todavía la nave en construcción, fue designado comandante de la misma
el Capitán de Fragata Atilio Porreti, conocedor, entre otras cosas, de la
navegación a vela y llamado a tener un rol activo en esta última face de
preparación del buque y selección y capacitación de sus tripulantes, puestos a
prueba al año siguiente en que se produjo la primera zarpada. Tras sortear con
holgura no solo la navegación sino un bautismo de mar enfrentando una
tempestad, la fragata regresó a Río Santiago el 10 de noviembre de 1962 y justo
un mes más tarde zarpó rumbo a <st1:personname productid="la Base Naval" w:st="on"><st1:personname productid="la Base" w:st="on">la Base</st1:personname> Naval</st1:personname>
de Puerto Belgrano, en donde recibió el pabellón nacional y comenzaron los
preparativos para el primer viaje de instrucción que partió en mayo de 1963.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR">Había
transcurrido una década desde aquel embrionario año 1953 en que comenzara su
historia.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<b><span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;">Fuentes:<o:p></o:p></span></b></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><a href="http://periodicomartinfierro.blogspot.com.ar/2012/10/la-fragata-peronista.html">http://periodicomartinfierro.blogspot.com.ar/2012/10/la-fragata-peronista.html</a>
</span><span style="font-size: 11.0pt;">[Consulta: 27-OCT-2012]<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><a href="http://www.santafe.gov.ar/hemerotecadigital/diario/24659/">http://www.santafe.gov.ar/hemerotecadigital/diario/24659/</a>
</span><span style="font-size: 11.0pt;">[Consulta: 27-OCT-2012]</span><span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><a href="http://www.histarmar.com.ar/Armada%20Argentina/ArmadaHoy/LIbertad-Diseno.htm">http://www.histarmar.com.ar/Armada%20Argentina/ArmadaHoy/LIbertad-Diseno.htm</a>
</span><span style="font-size: 11.0pt;">[Consulta: 27-OCT-2012]</span><span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><a href="http://www.laprensa.com.ar/397910-La-Fragata-Libertad-un-simbolo-con-historia.note.aspx">http://www.laprensa.com.ar/397910-La-Fragata-Libertad-un-simbolo-con-historia.note.aspx</a>
</span><span style="font-size: 11.0pt;">[Consulta: 27-OCT-2012]</span><span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><a href="http://www.eltribuno.info/salta/Note.aspx?Note=214540">http://www.eltribuno.info/salta/Note.aspx?Note=214540</a>
</span><span style="font-size: 11.0pt;">[Consulta: 04-NOV-2012]</span><span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><a href="http://www.astillero.gba.gov.ar/">http://www.astillero.gba.gov.ar/</a>
</span><span style="font-size: 11.0pt;">[Consulta: 04-NOV-2012]<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><a href="http://xxijhe.fahce.unlp.edu.ar/programa/descargables/russo">http://xxijhe.fahce.unlp.edu.ar/programa/descargables/russo</a>
</span><span style="font-size: 11.0pt;">[Consulta: 04-NOV-2012]</span><span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><a href="http://www.ceid.edu.ar/serie/2010/ceid_serie_dt_12_llairo_siepe_argentina_la_flota_mercante_del_estado.pdf">http://www.ceid.edu.ar/serie/2010/ceid_serie_dt_12_llairo_siepe_argentina_la_flota_mercante_del_estado.pdf</a>
</span><span style="font-size: 11.0pt;">[Consulta: 04-NOV-2012]<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><a href="http://www.cibernautica.com.ar/fragatalibertad/historia.htm">http://www.cibernautica.com.ar/fragatalibertad/historia.htm</a> </span><span style="font-size: 11.0pt;">[Consulta:
04-NOV-2012]</span><span lang="ES-AR" style="font-size: 11.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-40876558414403724002011-10-09T14:04:00.001-07:002017-11-10T14:32:59.219-08:00El periodista José Hernández<span style="color: black;"><span style="font-size: 85%;"><em><span style="font-size: 100%;"></span></em></span></span><br />
<span style="color: black;"><span style="font-size: 85%;"><em><span style="font-size: 130%;">Si bien este trabajo ha sido ya publicado en el blog, se ofrece ahora en esta nueva presentación de libro on line, accesible para lectura, descarga e impresión.</span></em></span></span><br />
<span style="color: black;"><span style="font-size: 17.68px;"><i><div style="text-align: center;">
<div style="margin: 8px 0px 4px;">
<a href="http://www.calameo.com/books/000936362a50497c1df5b" target="_blank">El periodista José Hernández</a></div>
<iframe allowfullscreen="" allowtransparency="" frameborder="0" height="194" scrolling="no" src="//v.calameo.com/?bkcode=000936362a50497c1df5b" style="margin: 0 auto;" width="300"></iframe><div style="margin: 4px 0px 8px;">
<a href="http://www.calameo.com/">Publish at Calameo</a></div>
</div>
</i></span></span>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-11586985915354349202011-03-28T17:06:00.000-07:002011-03-28T17:34:40.884-07:00“Cuando se enciende una cámara, se apaga el autoritarismo”. Trazos biográficos sobre Luis Clur.<div align="justify">por Jorge Eduardo Padula Perkins </div><br /><div align="justify"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZw4Ts5fJXxqEtuisP2_zfzlSp1_UMwhniiFPtEMEx9VySVO_l4aV1ZxuVJp-u3-J8LKCC43rAoiMo-FjhYAhpyRtWl7-7xWF4HmmdnY1_kaQeZXS6ceIJ9nWZXzO78_5teXZHKoMlKXY/s1600/foto+clur.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5589290373820002418" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 200px; CURSOR: hand; HEIGHT: 113px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZw4Ts5fJXxqEtuisP2_zfzlSp1_UMwhniiFPtEMEx9VySVO_l4aV1ZxuVJp-u3-J8LKCC43rAoiMo-FjhYAhpyRtWl7-7xWF4HmmdnY1_kaQeZXS6ceIJ9nWZXzO78_5teXZHKoMlKXY/s200/foto+clur.jpg" border="0" /></a> Muchos lo recordarán por sus últimas alocuciones, prolongadas, contundentes, ineludibles, en las reiteradas ocasiones en que ha subido al escenario con todo su equipo de Telenoche (canal 13) para recibir el premio Martín Fierro.</div><br /><div align="justify">Algunos sabrán del rol fundacional que le cupo en el Reporter Esso, en la revista Siete Días o en la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA).</div><br /><div align="justify">Pocos tal vez, tengan la imagen del Luis Clur adolescente, del chico de 14 años sumergido en el trajín de la ya desaparecida agencia ANDI, en la que hizo sus primeros pasos en la profesión que habría de transitar por casi siete décadas.</div><br /><div align="justify"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhFjP3EAtEMXMJvqio1wZs9_QDqiu8xjCjo7FdMAEDY0wnCzxQ1gqktUFR7GgQRz1wgJOSX15TE9i2gpLWFeQGJSVdI7DeOVn6FHaEsvNQWKbvxAH9ilB7G12LoSBxSyP_7RXGwyjz6kic/s1600/revista+siete+dias.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5589290931732218098" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 101px; CURSOR: hand; HEIGHT: 133px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhFjP3EAtEMXMJvqio1wZs9_QDqiu8xjCjo7FdMAEDY0wnCzxQ1gqktUFR7GgQRz1wgJOSX15TE9i2gpLWFeQGJSVdI7DeOVn6FHaEsvNQWKbvxAH9ilB7G12LoSBxSyP_7RXGwyjz6kic/s200/revista+siete+dias.jpg" border="0" /></a> “Me hice en las redacciones –diría en alguna ocasión- el periodismo es lo único que hice en mi vida. No conozco otra actividad”.</div><br /><div align="justify">Autodidacta, lector incansable y precoz alumno de la escuela del quehacer frente a la máquina de escribir, nació el 2 de agosto de 1922.</div><br /><div align="justify">En el florecer de su actividad, en los años ´30, habría de tener, entre otras responsabilidades, las de informar sobre los infaustos suicidios de Leopoldo Lugones y de Lisandro de la Torre.</div><br /><div align="justify">Ya en 1945, Luis Clur sería uno de los fundadores de la Agencia Telenoticiosa Americana, origen de Télam, cuya denominación original se debía al carácter de servicio de notas por corresponsalía en distintos países del continente.</div><br /><div align="justify">Nacida el 14 de abril de 1945, la agencia de capitales privados y estatales comenzó a funcionar en 25 de mayo 140 de la ciudad de Buenos Aires bajo la dirección de Gerónimo Jutronich y a cargo de una decena de periodistas, algunos de los cuales, como en el caso de Clur, provenían del plantel de la agencia ANDI.</div><br /><div align="justify">El 17 de octubre de ese mismo año, le tocaría a Luis Clur, ser quien cubriera para ANDI el multitudinario movimiento social que reclamaba la liberación de Juan Domingo Perón, preso en la isla Martín García.</div><br /><div align="justify">Al año siguiente, 1946, Clur pasa a integrar el staff de la agencia United Press International (UPI). Actúa en ella como periodista acreditado en Casa de Gobierno y Cancillería, y su vinculación al entonces titular de relaciones exteriores, Jerónimo Remorino, le permitió tener la confirmación de la muerte de Eva Duarte de Perón con anticipación al anuncio oficial y, por lo tanto, la primicia informativa del 26 de julio de 1952 con una anticipación de dos horas en relación con los otros medios. </div><br /><div align="justify">Al respecto, otras fuentes ponen la primicia en el hallazgo de la información en un cesto de papeles ubicado en una dependencia de la Casa Rosada. De uno u otro modo, el caso es que la primicia para UPI la consigue Clur, quien, hacia 1996, sostenía que la muerte de Eva no había sido a las 20.25 como ha quedado registrado, sino a las seis de la tarde, hora en que la United Press International ya tenía la primicia, cuando “la gente todavía estaba rezando por ella frente a la residencia presidencial”.</div><br /><div align="justify">Ese mismo año, Luis Clur ingresó al diario Clarín con carácter de redactor. Años más tarde alcanzaría en ese medio el cargo de secretario general de redacción. </div><br /><div align="justify">Con la conducción de Moisés Schebor Jacoby y Luis Clur, la redacción de Clarín amalgama, hacia 1957 a periodistas consagrados, muchos de ellos provenientes del diario Crítica y a elementos jóvenes como lo eran por entonces Esteban Peicovich, Roberto Cossa o Rodolfo Rabanal.</div><br /><div align="justify">Durante su extensa y prolífica carrera periodística, Clur tuvo ocasión de hacer importantes reportajes a personalidades tales como Ernesto “Che” Guevara, Juan Domingo Perón y John Fitzgerald Kennedy, este último realizado poco tiempo antes de su trágica muerte.</div><br /><div align="justify">En 1962, Luis Clur firma con otros periodistas como Francisco Rizzuto, Virgilio Albanese, Alberto Gainza Paz y Roberto Romero, la que resultaría el acta fundacional de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), que proponía entre sus objetivos la afirmación de la tradición espiritual del periodismo argentino, el seguimiento de normas éticas, la defensa de la libertad de expresión, el desarrollo técnico y cultural de la prensa y la vinculación estrecha entre todos los hombres de prensa de la República.</div><br /><div align="justify">Ese mismo año, Luis Clur era distinguido con el premio KRAFT al periodismo y en el siguiente obtenía una beca otorgada por la American Press Institute, en la Universidad de Columbia.</div><br /><div align="justify">Mil novecientos sesenta y tres habría de ser un año clave en la carrera profesional de Luis Clur: Dejando la secretaría general de Clarín, ingresa de pleno en la televisión.</div><br /><div align="justify">El 11 de marzo de ese año, a las 23 horas, se emite el primer noticiero de la televisión privada que marca una tendencia estética en el género: El Reporter Esso.</div><br /><div align="justify">Con información provista principalmente por la United Press International, agencia por la que Clur había transitado con éxito, el auspicio empresarial de la petrolera que le daba su nombre y la participación de la agencia de publicidad McCann Ericson, se trataba de un informativo de quince minutos de duración conducido por Armando Repetto, un correcto y circunspecto estudiante de medicina que se había dedicado a la locución.</div><br /><div align="justify">Para su puesta en el aire, al mando de Luis Clur trabajaba un equipo de treinta personas, entre periodistas, camarógrafos y técnicos, que en un principio utilizaba cámaras mudas con la voz en off del conductor y posteriormente incorporaría sonido directo y la proyección de imágenes en movimiento por detrás de aquel.</div><br /><div align="justify">Ganándose un espacio en un ambiente dominado por la prensa gráfica y radial, El Reporter Esso obtendría en poco tiempo un alto grado de credibilidad y reconocimiento, tanto del público como del propio medio periodístico, lo que sin duda era mérito de la capacidad y la audacia que Clur ponía en el proyecto.</div><br /><div align="justify">Por este programa, Clur se hace acreedor, en 1965, de un premio otorgado por el semanario Esquiú.</div><br /><div align="justify"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEia-WUP2s-Mu3bQ0kIx2hepMKBHsDxZX2nI2N6BZIuVjnccRwI_YV5_0JAxpJuwkL0Lpy8QN0-JD8WAkOUnZnxHRK79NPgFfJggBNQS8EqEQjYHJtqcQvYXa2cS4bBxgxrP4SJ_lAZbcuI/s1600/Luis+Clur+en+Konex.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5589290527719692194" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 200px; CURSOR: hand; HEIGHT: 136px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEia-WUP2s-Mu3bQ0kIx2hepMKBHsDxZX2nI2N6BZIuVjnccRwI_YV5_0JAxpJuwkL0Lpy8QN0-JD8WAkOUnZnxHRK79NPgFfJggBNQS8EqEQjYHJtqcQvYXa2cS4bBxgxrP4SJ_lAZbcuI/s200/Luis+Clur+en+Konex.jpg" border="0" /></a> A lo largo de su vida profesional habría de recibir también los premios Bunge y Born y de la Liga de Madres de Familia por la labor periodística, reiterados reconocimientos del Circulo de la Prensa, Diploma al Mérito en Dirección Periodística de la Fundación Konex en 1987, Premio Konex de Platino a la Producción periodística audiovisual diez años más tarde y 18 premios Martín Fierro por su responsabilidad en las áreas informativas de los canales 11 y 13.</div><br /><div align="justify">Entre sus múltiples actividades fue también miembro de la Real Academia de Periodismo, responsable del área de noticias de Canal 11 de televisión y fundador de la revista Siete Días, de Editorial Abril (que hasta entonces se distribuía como suplemento del diario La Razón de los martes), aparecida en los quioscos el 16 de mayo de 1967.</div><br /><div align="justify"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6uMAvUPqVDScmW3leVD4TObQxn7G7i4GORGR4qMXSWqO9R2V5W708H8FCvuxYjk7DHXt0L_cmv4Yguz5K14EkB-_WEaPzQ_6xTD-Md5iGVrYSIGdTZgoVSmClE__eTB2R1szKkvZRPkI/s1600/la+opinion.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5589290630002213778" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 134px; CURSOR: hand; HEIGHT: 102px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6uMAvUPqVDScmW3leVD4TObQxn7G7i4GORGR4qMXSWqO9R2V5W708H8FCvuxYjk7DHXt0L_cmv4Yguz5K14EkB-_WEaPzQ_6xTD-Md5iGVrYSIGdTZgoVSmClE__eTB2R1szKkvZRPkI/s200/la+opinion.jpg" border="0" /></a> En 1973 ingresó como jefe de redacción del diario La Opinión, donde se desempeñó hasta 1978. De su paso por este medio Clur recordaría el clima de inseguridad, varios atentados sufridos en la redacción del barrio de Barracas y una huida de la ciudad junto a Jacobo Timerman y otros compañeros en ocasión de haber sido advertidos de que un comando allanaría la sede del diario.</div><br /><div align="justify">Caracterizado por la presencia del juicio y el análisis de los periodistas mediante un tratamiento profundo de los temas abordados, el diario, un tabloide sin fotografías, se convertiría en blanco de las miradas desconfiadas del gobierno de facto iniciado en 1976. Su director propietario fue expulsado del país y la empresa puesta al mando de una intervención militar, que, según lo relatara el propio Luis Clur en 1996, llegó a pedirle la renuncia con un arma sobre el escritorio, hecho que habría sido oportunamente denunciado tanto ante la justicia como ante otros medios de prensa.</div><br /><div align="justify"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyrq2NwKKzG6RJk3HyCABaz16BT6YBpDpPPKI3Qx06dbZacBzacX7roinMUgrAYJLNZGvj8zpxqzwpyr8Nv2WDvSnKuBL9GsOkh0WMs0x4s7Vjnwimo-reMl6p08kxwKH6OCtJwgMnX2U/s1600/diario+La+Tarde.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5589290790819021218" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 144px; CURSOR: hand; HEIGHT: 200px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyrq2NwKKzG6RJk3HyCABaz16BT6YBpDpPPKI3Qx06dbZacBzacX7roinMUgrAYJLNZGvj8zpxqzwpyr8Nv2WDvSnKuBL9GsOkh0WMs0x4s7Vjnwimo-reMl6p08kxwKH6OCtJwgMnX2U/s200/diario+La+Tarde.jpg" border="0" /></a> Según algunas fuentes, Clur habría participado activamente en la redacción del diario La Tarde, que bajo la dirección de Héctor Timerman, comenzó a publicarse en Buenos Aires en marzo de 1976, como instrumento periodístico de apoyo al gobierno militar.</div><br /><div align="justify">Posteriormente ingresó en el diario La Nación, en donde dirigió la entonces sección de Noticias Locales y Gran Buenos Aires y la de Cables del Exterior.</div><br /><div align="justify">En los años ochenta, tras un corto paso por el área de noticias de canal 9, Luis Clur se vinculó con Telenoche, el informativo de canal 13 que pasaría a ser uno de sus productos más destacados y le significaría la obtención de diez de los dieciocho premios recibidos de parte de APTRA.</div><br /><div align="justify">En 1991 fue públicamente acusado por la periodista Liliana López Foresi como responsable de la censura impuesta a un programa televisivo que por entonces ella conducía, en el cual, en virtud de una especie de acuerdo de “no agresión” entre el entonces presidente Carlos Menem y el Grupo Clarín, le fue vedado emitir opinión.</div><br /><div align="justify">Paradójicamente, en mayo de 1996 y en su condición de director de Telenoche, respondía a acusaciones de Carlos Menem que sindicaban como “vendepatrias” a los responsables de una nota que mostraba con crudeza inusitada parte de la realidad social: “Nosotros sólo hablamos con la imagen”.</div><br /><div align="justify">"Cuando se enciende una cámara, se apaga el autoritarismo”, supo aseverar Clur, con agudeza profesional y claridad anticipatoria, en los albores de un proceso globalizador que ubica a la comunicación social en el rol de inobjetable fiscal, capaz de poner en jaque, por acción o reacción, a individuos, grupos o regímenes de cualquier especie que avasallen los derechos humanos o la libertad.</div><br /><div align="justify">En junio del año 2004, cuando se aprestaba al cierre de la última edición de su existencia, no es difícil imaginar a Luis Clur generando, en lo profundo de su mente, y a pesar de estar retirado de la actividad y enfermo, nuevas formas de gestionar la comunicación periodística: Un objetivo constante de su vida.</div><br /><div align="justify">Con aciertos, contradicciones y errores, su extensa trayectoria en los medios de comunicación, torna a Luis Clur en un actor que amerita ser considerado en el contexto de la historia del periodismo.</div><br /><div align="justify"><span style="font-size:85%;"><strong>Bibliografía y fuentes:</strong></span></div><span style="font-size:85%;"><strong></strong><br /><div align="justify">- Hermida, L. M. y Satas, V. (1999): TV manía. Programas inolvidables de la televisión argentina. Sudamericana. Buenos Aires.</div><br /><div align="justify">- Ulanovsky, Carlos (1997): Paren las rotativas. Una historia de grandes diarios, revistas y periodistas argentinos. Espasa. Buenos Aires.</div><br /><div align="justify">- Ulanovsky, C; Itkin, S. y Sirvén, P. (1999): Estamos en el aire. Una historia de la televisión en la Argentina. Planeta. Buenos Aires.</div><br /><div align="justify">- Diario La Nación, Buenos Aires, 14 de mayo de 1996 / 13 de junio de 2004.</div><br /><div align="justify">- Diario Página 12, Buenos Aires,14 de mayo de 1996.</div><br /><div align="justify">- Diario Crónica, Buenos Aires, 13 de junio de 2004.</div><br /><div align="justify"></span><a href="http://old.clarin.com/diario/2004/06/13/laciudad/h-05401.htm"><span style="font-size:85%;">http://old.clarin.com/diario/2004/06/13/laciudad/h-05401.htm</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 29-06-04</span></div><span style="font-size:85%;"><br /><div align="justify"></span><a href="http://www.elamante.com/nota/0/0579.shtml"><span style="font-size:85%;">http://www.elamante.com/nota/0/0579.shtml</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 29-06-04</span></div><span style="font-size:85%;"><br /><div align="justify"></span><a href="http://www.lanacion.com.ar/"><span style="font-size:85%;">http://www.lanacion.com.ar/</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 29-06-04</span></div><span style="font-size:85%;"><br /><div align="justify"></span><a href="http://www.fundacionkonex.org/premios/curriculum.asp?ID=930&ano=1997"><span style="font-size:85%;">http://www.fundacionkonex.org/premios/curriculum.asp?ID=930&ano=1997</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 29-06-04</span></div><span style="font-size:85%;"><br /><div align="justify"></span><a href="http://www.ediciononline.com/diario/notas.php?idx=29038"><span style="font-size:85%;">http://www.ediciononline.com/diario/notas.php?idx=29038</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 29-06-04</span></div><span style="font-size:85%;"><br /><div align="justify"></span><a href="http://www.adepa.org.ar/Historia/historia.asp"><span style="font-size:85%;">http://www.adepa.org.ar/Historia/historia.asp</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 30-06-04</span></div><span style="font-size:85%;"><br /><div align="justify"></span><a href="http://www.magicasruinas.com.ar/revdesto013b.htm"><span style="font-size:85%;">http://www.magicasruinas.com.ar/revdesto013b.htm</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 30-06-04</span></div><span style="font-size:85%;"><br /><div align="justify"></span><a href="http://www.telam.com.ar/index_historia.asp"><span style="font-size:85%;">http://www.telam.com.ar/index_historia.asp</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 30-06-04</span></div><span style="font-size:85%;"><br /><div align="justify"></span><a href="http://www.lapoliticaonline.com/noticias/val/64441/clarin-le-recuerda-a-timerman-que-dirigio-un-diario-procesista.html"><span style="font-size:85%;">http://www.lapoliticaonline.com/noticias/val/64441/clarin-le-recuerda-a-timerman-que-dirigio-un-diario-procesista.html</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 28-03-11</span></div><span style="font-size:85%;"><br /><div align="justify"></span><a href="http://www.lapoliticaonline.com/noticias/val/64441/clarin-le-recuerda-a-timerman-que-dirigio-un-diario-procesista.html"><span style="font-size:85%;">http://www.lapoliticaonline.com/noticias/val/64441/clarin-le-recuerda-a-timerman-que-dirigio-un-diario-procesista.html</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 28-03-11</span></div><span style="font-size:85%;"><br /><div align="justify"></span><a href="http://www.pagina12.com.ar/1999/99-12/99-12-19/pag30.htm"><span style="font-size:85%;">http://www.pagina12.com.ar/1999/99-12/99-12-19/pag30.htm</span></a><span style="font-size:85%;"> Consulta: 28-03-11</span></div><br /><div align="justify"><span style="font-size:85%;"></span></div><br /><div><br /><div><br /><div><br /><div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhDMv7Isrt4ndF8jrkGD1CmKJcwMC7xgVjRdpjmfYS2WZaCvZGlNfTdrJpwSq54Pl9k1ymAV9py_sqaJ5zhhS0FsO_euP9K3YtQZLUQhZ5WUYANXQCZFW_XRiIJg0KpnDZxDfFUdWXpdwA/s1600/foto+clur.jpg"></a></div></div></div></div>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-83132629401661607592010-12-01T16:03:00.000-08:002010-12-03T03:40:27.062-08:00Pedro Goyena y la prensa católica de su época.<div align="justify">Por Jorge Eduardo Padula Perkins<br /><br />“Perdonémosle los libros que no escribió para el futuro, porque de escribirlos hubiese conversado menos con sus contemporáneos. Para él no existía interlocutor mediocre; todo joven era una imagen del poeta Virgilio; caían a manos llenas sobre su mente los lirios de su palabra…”, ha expresado Ángel de Estrada (h) al referirse a Pedro Goyena.<br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhPslkI1s-dkPIe5qOntKDs1loYodk9LwwIr8cnEmNCVAYwSfCwPWZVBRYVT3ygSDZvo6N5klig-vc4mW8YpVmB-b5G9ve8wCB6vnbzcaWscSEXiikGji4IFBhDQJSraNjUaEGpNb6-J10/s1600/Pedro+Goyena.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5545870053151963810" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 134px; CURSOR: hand; HEIGHT: 151px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhPslkI1s-dkPIe5qOntKDs1loYodk9LwwIr8cnEmNCVAYwSfCwPWZVBRYVT3ygSDZvo6N5klig-vc4mW8YpVmB-b5G9ve8wCB6vnbzcaWscSEXiikGji4IFBhDQJSraNjUaEGpNb6-J10/s320/Pedro+Goyena.jpg" border="0" /></a><br />La oratoria y la prosa escrita de Goyena, han sido ricas con tanta claridad como han marchado, como alguna vez aseverara el diario “El Nacional” de Buenos Aires, indubitablemente orientadas por su fe.<br /><br />Integrante activo de la trascendente “Generación del ‘80”, estaba, dentro del abanico ideológico que la caracterizaba, claramente enrolado en el subgrupo de la militancia católica que exacerbaría su elocuencia en la resistencia al liberalismo en general y en particular en temas clave como las leyes de matrimonio civil y educación laica que se percibían como amenazas a la hegemonía del catolicismo en la sociedad argentina de entonces.<br /><br />Groussac lo describe como de “una fisonomía simpática, risueña a la par que pensativa: ojos pequeños, vivísimos, que vibraban por entre la orla negra de las pobladas pestañas una mirada penetrante; boca abultada de orador elocuente o decidor festivo; barba de misionero joven que afinaba un tanto el pálido perfil” y lo caracteriza por su “cordialidad expansiva, su alegre franqueza y su inalterable buen humor, su rápida asimilación intelectual y ese coger al vuelo el pensamiento ajeno a medio elaborar, con una presteza casi adivinatoria”.<br /><br />Algunas fuentes ubican a Pedro Goyena colaborando con el diario “La Prensa” y el periódico “El parlamento”. Todas coinciden en aseverar su participación en “Nación Argentina” y “El Nacional”.<br /><br />Pero sin duda alguna, la labor encarada en la “Revista Argentina” y el periódico “La Unión” se ha correspondido con el período más prolífico de su actividad en los medios.<br /><br />Hijo de Pedro Regalado Goyena y Emilia del Río Pedriel, este hombre que se constituiría en una pluma al servicio de la causa católica, nacía el 24 de julio de 1843 en Buenos Aires. Cursó los estudios primarios en la escuela particular de Juan Andrés de la Peña e hizo los de nivel secundario en el Departamento Preparatorio de la ciudad.<br /><br />Estudiante de leyes, no había terminado aun su carrera cuando, en mérito a su capacidad, fue designado profesor de filosofía en el Colegio Nacional de Buenos Aires. A partir de esa incursión en la docencia, sería más tarde profesor de Derecho Romano de la Universidad de Buenos Aires.<br /><br /><strong>La política.<br /></strong><br />En su actividad política fue diputado provincial en dos ocasiones (1865-1867, 1870-1872), miembro de la Convención Constituyente de 1870, senador (1877-1878) y diputado nacional en tres períodos (1873-1874, 1880-1884, 1886-1890). También tuvo los cargos de director del Banco de la Provincia de Buenos Aires y Defensor de Pobres.<br /><br />En 1884 fue uno de los fundadores de la Unión Católica, partido político surgido de un congreso que el catolicismo realizara en Buenos Aires en agosto y septiembre de aquel año, en el que participara también José Manuel Estrada. La Democracia Cristiana incluye en su historia a esta agrupación y a sus integrantes.<br /><br />Singularmente, Pedro Goyena es también un referente fundacional de otro partido, la Unión Cívica de la Juventud, originada en un mitin del 13 de abril de 1890 que albergó a líderes de distintas tendencias opuestas al régimen de Miguel Juárez Celman, tales como Goyena y José Manuel Estrada, Barroetaveña, Del Valle, Bernardo de Irigoyen, Juan B. Justo, Lisandro de la Torre y el para entonces ex presidente de la República Bartolomé Mitre. La Unión Cívica Radical, también cuenta por lo tanto, en su raíz histórica, con la figura de Pedro Goyena.<br /><br /><strong>Periodismo y letras.</strong><br /><br />Volviendo a la fecunda pluma de Goyena es dable destacar que no se limitó a la argumentación política, sino que lo mostró como hábil crítico literario, ensayista y biógrafo. Al respecto uno de sus trabajos más conocidos es el “Estudio sobre Félix Frías”.<br /><br />“Nuestros hombres de letras han tenido y tienen más admiradores que lectores; y mientras el público en vez de estudiar las obras de los autores nacionales, se limite a recordarles con cierta estimación no propenderá entre nosotros la literatura”, ha afirmado en un texto que, si bien versa sobre José Manuel Estrada, se proyecta, como puede apreciarse claramente, sobre la totalidad del entorno sociocultural.<br /><br />“Algo más que un respeto poco concienzudo buscan los que se dedican a la carrera literaria. Necesitan vivir, y por lo mismo encontrar en la producción intelectual lo que llaman los economistas un beneficio”, asevera con contundencia en la misma ocasión, a propósito de que los escritores contemporáneos, dice “no hallan honra ni provecho; porque no es honra uno que otro elogio de la prensa, desacreditado a causa de la prodigalidad con que se le concede; y en cuanto a provecho, basta decir que el general Mitre tuvo que vender su libro sobre Belgrano, por la cantidad de quince mil pesos, honorario frecuente de cualquier abogado en un asunto común”.<br /><br />“El Nacional”, fundado el primero de mayo de l852 bajo la dirección de Dalmacio Vélez Sarsfield, fue una de las publicaciones que difundió sus escritos. Era un periódico de gran tamaño en cuyos talleres trabajaron hombres que luego dejarían huella en la historia de la prensa, tales como Eudoro Carrasco y Ovidio Lagos, quienes más tarde fundarían el diario “La Capital” de Rosario.<br /><br />El 15 de septiembre de 1862 apareció por primera vez el diario “Nación Argentina” popularmente conocido como “La Nación Argentina”, cuyo redactor en jefe era José María Gutiérrez, quien se había desempeñado como secretario militar de Mitre durante la campaña de Pavón.<br />Habría de colaborar Goyena en esta publicación destinada, según su propia presentación, “a robustecer el vínculo de la nacionalidad argentina propendiendo a que no se malogren los sacrificios de medio siglo, ni la oportunidad suprema de afianzar las instituciones, la paz y la prosperidad de la República”, en la que también se difundirían temas históricos y literarios.<br /><br /><strong>La “Revista Argentina”.<br /></strong><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhOekMbSyZ5gyO5I1XxM9D7e8u4GW5wjCrK0-eU9pRhVCzMjtnlQyvJhDLPWXr7RoDUhP0DWA21v77-gsnw8VSPD-tLSmFJ2qSlOSFEzehVFZL-QkSxeba9dcBXuZON2ULqZJ5uXiTpdLc/s1600/revista+argentina.png"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5545870699665730466" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 131px; CURSOR: hand; HEIGHT: 196px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhOekMbSyZ5gyO5I1XxM9D7e8u4GW5wjCrK0-eU9pRhVCzMjtnlQyvJhDLPWXr7RoDUhP0DWA21v77-gsnw8VSPD-tLSmFJ2qSlOSFEzehVFZL-QkSxeba9dcBXuZON2ULqZJ5uXiTpdLc/s320/revista+argentina.png" border="0" /></a><br />“Instaurare omnia in Christo”, el mandato de San Pablo de abarcar al mundo y a las cosas con el espíritu de Jesús, fue el lema de la “Revista Argentina”, que en 1868 vio la luz por primera vez, dirigida por José Manuel Estrada con la estrecha colaboración de Pedro Goyena, y cuya primer etapa de existencia se prolongó hasta 1872. Más tarde volvería a aparecer en el período 1880-1882.<br /><br />Si bien se trataba de una publicación manifiestamente confesional, estaría abierta a plumas de muy diversos pensamientos que trataron allí, con altura académica y lingüística, cuestiones de política, economía, historia, ciencias, educación, filosofía, arte y literatura, por caso, Aristóbulo del Valle, David Lewis, Eduardo Wilde, Lucio Mansilla, Carlos Guido, Miguel y Pedro Goyena.<br /><br />De hecho, la prensa católica no limitaba su existencia a la disputa ideológica con el liberalismo, sino cumplía otros roles comunicacionales y culturales en un contexto social que reclamaba y hacía uso de tales publicaciones. Servía para difundir valores literarios y artísticos, mediaba en la convocatoria a los festejos, informaba sobre la creación de nuevas parroquias, el nombramiento de sacerdotes y otras decisiones del gobierno eclesiástico y constituía un canal de comunicación entre los feligreses y las estructuras de autoridad religiosa.<br /><br />En 1869, la “Revista Argentina” publicaba una profusa crítica sobre Ricardo Gutiérrez construida por Pedro Goyena, quien, entre otras cosas dice que “la poesía de Gutiérrez es, en realidad, como un cielo cubierto de nubles sombrías, donde brillan a veces los fulgores de una esperanza que se extingue rápidamente, haciendo todavía más oscura la región que iluminó”.<br /><br /><strong>“La Unión”.<br /></strong><br />Junto con Emilio Lamarca, José Manuel Estrada, Navarro Viola y Tristán Achával Rodríguez, Goyena pone en marcha, el 1 de agosto de 1882, el periódico “La Unión”, con la intención de competir no solo doctrinariamente, sino en la captación de lectores.<br /><br />“Este diario de propósitos pacíficos como su título lo indica, será tal vez un diario de combate. Su nombre es un llamamiento, una divisa y un programa” señalaba una de sus columnas editoriales, y agregaba que “el grupo de ciudadanos que ha fundado este diario, no tiene ambiciones ni rencores; no pretenden gobernar ni estorbar al gobierno; respeta la ley y las autoridades creadas por la ley, como representantes según el orden de derecho, de la autoridad excelsa en que tienen origen los poderes legítimos”. Asimismo, acentuaba su condición católica y señalaba su posición contraria a los avances del liberalismo. En ese sentido no eludiría los debates con otras publicaciones de entonces, como el “Sud América” que dirigía su amigo personal y oponente ideológico Paul Groussac.<br /><br />No era extraña la presencia de un periódico confesional, dado que en esos tiempos se daba un florecimiento claro de la prensa católica, en especial en Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, que acompañaba la expansión económica y territorial y a las grandes masas inmigratorias que poblaban tales regiones. “La América del Sud”, “La Voz de la Iglesia” y “El Pueblo” eran, junto a “La Unión”, medios de cierta envergadura asociados ideológica y dogmáticamente al catolicismo. Paralelamente, los pueblos del interior veían también nacer periódicos locales vinculados a las parroquias.<br /><br />Amén de las dotadas plumas de sus realizadores, “La Unión” contaba con un entramado de colaboradores, que suplía de alguna manera la falta de corresponsales profesionales. Al respecto el mismo diario señalaba, con elocuente ironía, que tales contribuyentes podían distribuirse en tres categorías, a saber “el colaborador anónimo, murmurador, maledicente….que tiene siempre una denuncia en el bolsillo; el colaborador noticioso, cronista por carambola…; el colaborador solemne, con grandes aires de literato…”.<br /><br />En cuanto a su distribución, se hacía por suscripción, contando con un promedio de 1.500 adherentes. Esa aceptación le permitió funcionar con imprenta propia, en el mismo predio donde tenían su estudio Goyena y Nevares.<br /><br />Como los otros medios católicos, “La Unión” no tenía dependencia directa del episcopado, razón por la cual hacía también, como se dijo, las veces de mediador entre la feligresía y las autoridades del clero. “Va a hacer un año que Suipacha se halla desprovista de cura titular”, indica una nota aparecida en sus páginas el 25 de septiembre de 1886, agregando que “muchas familias que no quieren tener sus hijos sin bautizar se costean hasta Mercedes”, apostrofando : “No pidamos después a los pueblos de la campaña que cumplan con los deberes religiosos si faltan quienes deben darles el ejemplo”.<br /><br />Goyena murió económicamente pobre, en 1892 en el barrio de Flores, donde había vivido. Más se equivocó Paul Groussac, cuando a poco tiempo de aquella desaparición física pensaba que las jóvenes generaciones lo olvidarían. En el siglo XXI la figura de Pedro Goyena tiene su lugar en la historia de las ideas, razón por la cual no ha sido total su muerte y puede coronarse su existencia con la frase del poeta Horacio que Groussac estimara inalcanzable: Non ovnis moriar.<br /><br /><strong>Bibliografía y fuentes:<br /></strong><br />- Bruno, Cayetano (1988): Creo en la vida eterna. El ocaso cristiano de los próceres 1. Didascalia. Rosario.<br />- De Marco, Miguel Ángel (2006): Historia del periodismo argentino: desde los orígenes hasta el centenario de Mayo. EDUCA. Buenos Aires.<br />- Espósito Fabio (2003): Lectores y lecturas en el Ochenta. En Orbis Tertius, 2002-2003, VIII (9). En línea: http://www.orbistertius.unlp.edu.ar/numeros/orbis-tertius-9/articulos/02-esposito.pdf [Consulta: 23-AGO-2010]<br />- Groussac, Paul (1980): Los que pasaban. Selección. Colección Capítulo. CEAL. Buenos Aires.<br />- Miranda, Lidia (2006): La prensa católica y sus lectores en la Argentina , 1880-1920. En “Tiempos de América”, Nº 13, pp. 59-71. En línea: www.raco.cat/index.php/TiemposAmerica/article/viewFile/105682/163944 [Consulta: 23-AGO-2010]<br />- Prieto, Adolfo (1980): Historia de la literatura argentina. Tomo I. CEAL. Buenos Aires.<br />- Ravina, Aurora –Directora general- (sin fecha): Historia de la literatura argentina. Fascículo 21, La literatura de la generación del ’80 V. Colegio Nacional de Buenos Aires, Página 12. Buenos Aires.<br />- Sarlo, Beatriz (1980): Historia de la literatura argentina. Tomo I. CEAL. Buenos Aires.<br />- http://es.wikisource.org/wiki/Siluetas_parlamentarias:_09 [Consulta: 20-AGO-2010]<br />- http://www.nuevadc.com.ar/contenido/HistoriaMain.asp [Consulta: 20-AGO-2010]<br />- www.elciudadanoweb.com/?p=72093 [Consulta: 20-AGO-2010]<br />- http://sanantonio.freeservers.com/Escuela/InstPGoyena.htm [Consulta: 20-AGO-2010]<br />- http://es.wikipedia.org/wiki/Pedro_Goyena [Consulta: 20-AGO-2010]<br />- http://www.buenosaires.gov.ar/areas/ciudad/historico/calendario/destacado.php?menu_id=23203&ide=87 [Consulta: 24-AGO-2010]<br />- http://es.wikipedia.org/wiki/Unicato [Consulta: 24-AGO-2010]<br />- http://es.wikipedia.org/wiki/Uni%C3%B3n_C%C3%ADvica_Radical [Consulta: 24-AGO-2010]<br />- http://es.wikisource.org/wiki/Non_omnis_moriar [Consulta: 25-AGO-2010] </div><div align="justify"></div><div align="justify"></div><div align="center">-------------------------------------------------------------------------</div><div align="justify"></div><div align="center"><em>* Trabajo originalmente publicado en la revista "Ensayos Académicos" del Instituto Superior Pedro Goyena de la ciudad de Bahia Blanca, Buenos Aires, Argentina, Año X, número 1, noviembre de 2010.</em></div><div align="center"><em></em></div><div align="center"><em>-----------------------------------------------------------------------------</em></div>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-19967156230435161652010-04-15T20:25:00.000-07:002010-09-05T16:07:46.394-07:00“El Quijote y La Palabra ” (un video de Pablo Banegas)<div align="justify"><span style="font-size:78%;"></span></div><div align="justify"><span style="font-size:78%;"></span></div><div align="justify"><span style="font-size:78%;">Por Jorge Eduardo Padula Perkins</span><br /><br />El periódico " La Palabra " de San Pedro, producto del intelecto y de las manos laboriosas de don José B. Arcuri, fue un faro que iluminó a las juventudes que encontraron en ese papel rústico y el amplio corazón del componedor de tipografías y de sueños, un espacio para publicar sus escritos.<br /><br />En el momento en el que se editó “Cuando el ‘loco’ Arcuri tenía ‘ La Palabra ’” </div><div align="justify">(<a href="http://periodismodeayer.blogspot.com/2009/09/cuando-el-loco-arcuri-tenia-la-palabra.html" target="_blank">http://periodismodeayer.blogspot.com/2009/09/cuando-el-loco-arcuri-tenia-la-palabra.html</a> ), se lo hizo con un claro sentido de reconocimiento por la noble tarea con la que José Bechara Arcuri hizo de su vida un apostolado periodístico.<br /><br />El transcurso del tiempo constituyó a ese humilde escrito en un espacio de encuentro de personas que, desde uno u otro ángulo, se sumaron a la intencionalidad original y aportan a la memoria histórica en torno de don José Arcuri y el periódico “ La Palabra ”.<br /><br />En ese contexto hemos tenido el honor de recibir la adhesión de dos de los sobrinos nietos del “loco” Arcuri, Leandro José y Gabriela Bechara Arcuri, y de la fotógrafa y guía de turismo Matilde Carreras, quien aportó la imagen del busto que acompaña al post.<br /><br />Ahora, gracias al desinteresado aporte de Pablo Banegas, sumamos a este homenaje un valioso trabajo fílmico documental, a través del cual se rescatan para la memoria local, pero también de la humanidad, imágenes de un hombre preñado de ideales y consecuente con ellos en su vida cotidiana.<br /><br />Este es un documento histórico y cultural de valor inestimable que debería ser difundido y protegido como patrimonio de la ciudad de San Pedro, en tanto rescata imágenes inéditas de quien fuera el director y propietario del periódico “ La Palabra ”.<br /><br />Se trata de una realización de su coterráneo, el escritor y guionista Pablo Alfredo Banegas. Un trabajo producido originalmente en Super 8 fílmico en el año 1983, cuando Banegas tenía 15 años y cursaba sus estudios secundarios al tiempo que se deslumbraba, simultáneamente, con la magia del cine y de la imprenta. </div><div align="justify"></div><div align="justify"></div><div align="justify"></div><div align="justify"><br />En las imágenes se puede apreciar, entre otras cosas, el frente del edificio en donde funcionaba " La Palabra " (Oliveira Cézar 41), parte de la maquinaria de la antigua imprenta en pleno trabajo, y una muestra de la noble labor cotidiana de José Bechara Arcuri en ese, su ámbito de vida y de sueños.<br /><br /></div><div align="justify"></div><div align="justify"></div><div align="justify"></div><div align="justify"></div><div align="justify"></div><div align="left"><object style="WIDTH: 327px; HEIGHT: 322px" height="322" width="327"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/jSz0RAzFSnk&hl=en_US&fs=1&"><param name="allowFullScreen" value="true"><param name="allowscriptaccess" value="always"><embed src="http://www.youtube.com/v/jSz0RAzFSnk&hl=en_US&fs=1&" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="480" height="385"></embed></object></div>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com11tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-83757708432622009982010-02-01T15:41:00.000-08:002010-02-01T16:24:30.260-08:00El “diarito” Prensa Barrial<span style="font-size:85%;"></span><br /><span style="font-size:85%;"></span><br /><div align="justify"><span style="font-size:85%;">por Jorge Eduardo Padula Perkins</span><br /><br /><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjOx015G1J_nUVqsmUFlFRDwGZpDyzl_UPng2zBpQ_Tbl_0gHhw2ptj71GvNUkpRPgHiusfChMyI4qfzdMwCWgeax5DxkcBfyUjbyAcVns9432FOfaACBYt3I5Gu3OKcMeUS4y9HJmiwAU/s1600-h/prensa+barrial.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5433427106736997650" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 148px; CURSOR: hand; HEIGHT: 200px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjOx015G1J_nUVqsmUFlFRDwGZpDyzl_UPng2zBpQ_Tbl_0gHhw2ptj71GvNUkpRPgHiusfChMyI4qfzdMwCWgeax5DxkcBfyUjbyAcVns9432FOfaACBYt3I5Gu3OKcMeUS4y9HJmiwAU/s200/prensa+barrial.jpg" border="0" /></a>Los vecinos residentes en el radio comprendido entre Avenida La Plata, 12 de Octubre, Andrés Baranda y República del Líbano de Quilmes Oeste, se encontraron un día de octubre de 1991 con la singular, novedosa y simpática presencia de un pequeño periódico zonal de distribución gratuita: Prensa Barrial.<br /><br />No existían por entonces emprendimientos de esa índole, es decir una publicación local de carácter periodístico profesional, sin precio de tapa y sin fines de lucro.<br /><br />Dirigida por Marta Alicia Armella y con Jorge Padula Perkins como redactor, la publicación se definió a si misma de manera inequívoca como “periódico zonal independiente de interés vecinal”, ofreciéndose en el accesible tamaño de 16,5 por 21,5 centímetros en ediciones que variaron entre las 8 y las 12 páginas.<br /><br />A partir de entonces habría de distribuirse, durante dos años consecutivos, a través de los comercios anunciantes y personalmente o por correo en las instituciones públicas y privadas de su área de influencia, incluyendo la biblioteca municipal Sarmiento y la Biblioteca Nacional de Argentina. </div><div align="justify"><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgRBfSOTYvTWAb1GmOcAOaOxlOa-ay88zYzVsFytKDZ1BxER2SABohogChuY39fcWyRsd3UlY6kMtMwXi-FpSdiU6jN2TWyjIXMf9dl1WIBZYGRYqL10yTEFNVOObC8sqPaop9etT17C4Y/s1600-h/Prensa+barrial+a%C3%B1o+1+numero+11.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5433434210382958978" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 154px; CURSOR: hand; HEIGHT: 200px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgRBfSOTYvTWAb1GmOcAOaOxlOa-ay88zYzVsFytKDZ1BxER2SABohogChuY39fcWyRsd3UlY6kMtMwXi-FpSdiU6jN2TWyjIXMf9dl1WIBZYGRYqL10yTEFNVOObC8sqPaop9etT17C4Y/s200/Prensa+barrial+a%C3%B1o+1+numero+11.jpg" border="0" /></a>El espíritu con el que el periódico veía la luz era claramente señalado en la nota editorial del número uno que, bajo el título de “Periodismo local” señalaba que “ en sus comienzos, el periodismo era básicamente regional. Nacía, actuaba y servía en el seno de una comunidad” pero con posterioridad debió satisfacer mayores sectores de públicos con un criterio de mercado, lo que motivó que los grandes medios, nacionales pero también comunales, fueron dejando de lado la información zonal, razón por la cual Prensa Barrial surge “para ser el medio de comunicación de su zona de influencia, una porción concreta de nuestra ciudad, con sus realidades, sus actividades y su necesidad de comunicación. Para que cada vecino sepa qué está sucediendo en su entorno inmediato, qué le ofrecen sus conciudadanos de unas cuantas cuadras a la redonda en materia profesional, social, cultural y de servicios, y qué propuestas hay para el desarrollo colectivo. En definitiva, un medio que, dentro del marco ético de la profesión periodística, actuará como órgano independiente al servicio del interés vecinal”.<br /><br />De este modo, desde el primer día y a lo largo de sus dos años de vida, Prensa Barrial se constituyó fácticamente en el medio de comunicación de los clubes, sociedades de fomento, centros de jubilados, cooperadoras escolares, bibliotecas populares, museos y los vecinos en forma individual y colectiva. </div><div align="justify"><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDt5vfkSVzT0nAjkWpRuajWL98_ZJJBsVYSWICyeKRcQLicmoE4wjn2UWKBQ1-jl7FxVig9drm-dZ_RtTQJbWn6Z0VsdkwKjZeIVRWgm1Y7iQVn31xXygxtX0JtLwMAjBFxE95ukgmcVA/s1600-h/Prensa+barial+a%C3%B1o+1+numero+3.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5433425986013860386" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 152px; CURSOR: hand; HEIGHT: 200px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDt5vfkSVzT0nAjkWpRuajWL98_ZJJBsVYSWICyeKRcQLicmoE4wjn2UWKBQ1-jl7FxVig9drm-dZ_RtTQJbWn6Z0VsdkwKjZeIVRWgm1Y7iQVn31xXygxtX0JtLwMAjBFxE95ukgmcVA/s200/Prensa+barial+a%C3%B1o+1+numero+3.jpg" border="0" /></a> “Dos años” fue el título de la nota editorial del número aniversario de octubre de 1993, en la que se sintetizaba de algún modo la inserción y la labor de Prensa Barrial en su contexto.<br /><br />“A lo largo de dos años de ejercicio ininterrumpido de periodismo zonal independiente ha quedado acabadamente demostrada la necesidad misma de la existencia de nuestro medio”, afirmaba y continuaba aseverando que “no lo decimos nosotros. Lo demuestra el flujo permanente de información que hacen llegar a Prensa Barrial las distintas instituciones locales para su publicación, indicador indubitable de cómo el periódico sirve para canalizar las necesidades de comunicación de esas organizaciones barriales” que encuentran siempre en este medio “un espacio mediante el cual efectivizar sus convocatorias destinadas al bien común”.<br /><br />Asimismo se aseguraba que “por otra parte son muchos los vecinos que de la lectura de este medio han hecho un hábito, al descubrir que, aun en el marco de su sencillez, constituye una fuente irremplazable de información estrictamente barrial” y que “son varios también los que inclusive han sugerido temas de interés comunitario para su tratamiento en estas páginas”. </div><div align="justify"><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ6V2WhBZmuy34caMPX-CCQXxhesfDVyFE4k4N9rAEAWr7j07-d18CfkZhOaR4Aep6AKkZItDA380OKtvVsbEXsx-yVTOdnNcb8QDdGFWeFUto_88kNrhsOTlXeFc98F3Zqv9bFWWIpao/s1600-h/Prensa+barrial+a%C3%B1o+2+numero+13.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5433426413833172754" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 152px; CURSOR: hand; HEIGHT: 200px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ6V2WhBZmuy34caMPX-CCQXxhesfDVyFE4k4N9rAEAWr7j07-d18CfkZhOaR4Aep6AKkZItDA380OKtvVsbEXsx-yVTOdnNcb8QDdGFWeFUto_88kNrhsOTlXeFc98F3Zqv9bFWWIpao/s200/Prensa+barrial+a%C3%B1o+2+numero+13.jpg" border="0" /></a> Prensa Barrial, se dice finalmente, es a dos años de su nacimiento “como un vecino más; conocido y reconocido medio de comunicación comprometido éticamente y desde su autonomía con la comunidad que, a través de la participación permanente, le da vida”.<br /><br />No obstante el lugar alcanzado y el entusiasmo puesto de manifiesto por sus realizadores, las circunstancias no permitieron la continuidad del proyecto.<br /><br />“Prensa Barrial pasará a ser historia. La última edición” fue el título de su postrer editorial, en noviembre de 1993 que señalaba puntualmente: “Con estas líneas y tras dos años ininterrumpidos de servicio a la comunicación vecinal, nos despedimos de nuestra humilde pequeña labor con la misma dignidad y honor con que lo haríamos de la más grande empresa. Lo hacemos seguros de haber cumplido nuestro propósito, el de hacer periodismo profesional al servicio de la comunidad local, siempre en un marco de referencia ética y con responsabilidad y transparencia. Nos hemos comprometido moralmente al servicio del barrio, sus instituciones y sus habitantes sin ceder nuestra independencia editorial y sin posicionamientos políticos, ideológicos o dogmáticos de ninguna índole, y hemos recibido a cambio y sin proponérnoslo muchas muestras de reconocimiento y afecto que al tiempo que nos halagaron sirvieron de estímulo para continuar transitando el camino andado”. </div><div align="justify"><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgV1gdrJHYetbPnLojdV5KDx1un3CyV5E_3-LZ6v_iezwpFdSf9bzH-YAcCL9Vj_azQ22dllD0A61YDv_qp5dsUcaGRJYbr7JCHhJNFd-F1JwFZs1TK57JWjeJiWA8b1529N8J4AjqJins/s1600-h/Prensa+barrial+a%C3%B1o+3+numero+26.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5433426723041599506" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 154px; CURSOR: hand; HEIGHT: 200px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgV1gdrJHYetbPnLojdV5KDx1un3CyV5E_3-LZ6v_iezwpFdSf9bzH-YAcCL9Vj_azQ22dllD0A61YDv_qp5dsUcaGRJYbr7JCHhJNFd-F1JwFZs1TK57JWjeJiWA8b1529N8J4AjqJins/s200/Prensa+barrial+a%C3%B1o+3+numero+26.jpg" border="0" /></a> Finalmente se afirmaba que “hoy confluyen en las vidas de quienes forjamos este medio, circunstancias de diversa índole que nos obligan a tomar esta decisión, producto de una evaluación concienzuda de la realidad. Nos despedimos entonces con el dolor de tener que cerrar un ciclo importante para la vida de nuestra comunidad vecinal, pero con el orgullo de haberlo constituido”.<br /><br />Escrito a máquina, ilustrado y diseñado a pura imaginación y voluntad, distribuido a pie y a costa del tiempo personal de quienes lo hacían, pero portador inefable del sentir de la gente, el “diarito”, como algunos lo apodaban, se ganó un lugar en la historia y el alma del barrio.</div>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-49155377555611522192010-01-02T15:42:00.000-08:002010-01-02T16:19:04.262-08:00La educación a distancia en la publicidad de los medios gráficos de antaño.(Jorge Eduardo Padula Perkins)<br /><br />La educación a distancia no es el moderno producto de la aplicación didáctica de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones.<br /><br />Lejos de las computadoras, los CD Rom y la Internet, sus antecedentes más remotos nos conducen a la Gaceta de Boston, en 1728, en donde un anuncio ofrecía material auto instructivo para el aprendizaje de mecanografía que incluía la posibilidad de consultas por correo.<br /><br />Básicamente se trata de una modalidad pedagógica concebida para funcionar en condiciones de separación física y temporal entre el docente y el alumno, razón por la cual dispone de mecanismos de interacción a través de diferentes medios de comunicación.<br /><br />Para ello se trabaja con materiales de estudio especialmente diseñados, instrucciones claras sobre los procesos a seguir y la atención personalizada mediante tutorías.<br /><br />En la memoria popular argentina, los orígenes de la educación a distancia en la Argentina se encuentran en la oferta de cursos comerciales a través de las revistas, en especial de historietas.<br /><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8q7FbFhrZn67Z5Mj411f6qtnhzwrjkFR17QtqFEEoCK-MmJSuokwgHGU8c3Vb_QO2kY2vL5aLE8X4fxAFdyUV1mRUahECanW49nEQI7nGNxdj95xbVKdQ39dyHtBIPVEadJEms8AHI10/s1600-h/Patoruzu+1940.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5422298269735295586" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 143px; CURSOR: hand; HEIGHT: 92px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8q7FbFhrZn67Z5Mj411f6qtnhzwrjkFR17QtqFEEoCK-MmJSuokwgHGU8c3Vb_QO2kY2vL5aLE8X4fxAFdyUV1mRUahECanW49nEQI7nGNxdj95xbVKdQ39dyHtBIPVEadJEms8AHI10/s200/Patoruzu+1940.jpg" border="0" /></a>Resulta curioso revisar algunos de esos contenidos.<br /><br />"Todos admiran a los que saben triunfar. Mándenos hoy mismo el cupón adjunto y recibirá GRATIS el valioso libro 'Hacia delante', que le enseñará cómo también usted puede progresar estudiando por correo y en su propia casa, en sus horas libres y sin dejar sus ocupaciones actuales", rezaba un aviso de 1940, de la Universidad Popular Sudamericana, dirigida por el Ing. B Marguillán, con domicilio en Rivadavia 2465 de Buenos Aires.<br /><br />Lo ilustraba la llamativa imagen del dibujo de un hombre admirado por tres empleadas y la leyenda "Un jefe de 20 años".<br /><br />De la publicación en una revista de humor e historietas como Patoruzú y esta particular leyenda, se desprende que la oferta estaba dirigida a un público joven y ambicioso, interesado en el progreso económico y social.<br /><br />Tenedor de libros, empleado de comercio, mecanografía, secretariado, mecánico agrícola, avicultura, corte y confección, dibujo artístico, química industrial, motores a explosión, procuración y martillero público, eran entre otras las variadas orientaciones ofrecidas para tal fin.<br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg6YOEM7BhuxyeiMXGH_OqLMFSeFumZ7fRXUhCUeLzYSt8Oh4rVQavuudNaPhWXu3K-k3htzFEcjdrw_SUqFr_aAGWZf3rVOr2PhJoEyCUu4MLoCKst93fB8LTrDQrxtPaom3WioTkTlis/s1600-h/RADIO+INSTITUTO.bmp"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5422295190806911474" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 170px; CURSOR: hand; HEIGHT: 320px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg6YOEM7BhuxyeiMXGH_OqLMFSeFumZ7fRXUhCUeLzYSt8Oh4rVQavuudNaPhWXu3K-k3htzFEcjdrw_SUqFr_aAGWZf3rVOr2PhJoEyCUu4MLoCKst93fB8LTrDQrxtPaom3WioTkTlis/s320/RADIO+INSTITUTO.bmp" border="0" /></a><br />Asimismo, a cada alumno inscripto se le obsequiaría un libro (Diccionario Enciclopédico Castellano ó La farmacia en casa) y "el lujoso 'Carnet del Estudiante'".<br /><br />Ese mismo año, Escuelas Sudamericanas, cuyo director era Patricio C. Ryan, "Bachiller y Contador" ofrecía cursos de sastre, radio, autos, modista, dibujante o construcción.<br /><br />Sin signos de modestia señalaba el aviso que "las Escuelas por correo más importantes", fundadas en 1915, funcionaban en Av. Montes de Oca 695 de Buenos Aires, en el "Palacio propiedad de estas Escuelas".<br /><br />En otro orden de cosas se aseveraba que "Regalamos las lecciones, papeles, sobres, carnet y útiles".<br /><br />Durante años, la educación a distancia siguió siendo mayormente conocida a través de este tipo de tentadoras y llamativas ofertas.<br /><br />Mientras tanto el peronismo creaba la Universidad Obrera Nacional (UON), destinada a promover la capacitación y jerarquización de los obreros en el marco de un fuerte proceso industrializador. Organizada mediante facultades regionales en distintos puntos de país, trocaría, en 1959, en la Universidad Tecnológica Nacional, hoy también dotada de cursos no presenciales.<br /><br /><div></div><div>Un ejemplar de la ya citada revista de historietas, esta vez del año 1956, abunda en espacios de publicidad dedicados a estudios por correspondencia que muestran la continuidad de éstos a través del tiempo.</div><div><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjr67ia1ujWBkWc7e7mGn8L1vDpANj2CNSwd1t3DTGx2MZ1Uf49xUXzMqgkPyxhy3W8svqFR9rw3iJbScWBhFvQL-R26SQsYbFhfwnHQ2HQxmNYVzqg80qSAdXx0wGP9Yzar-Uxc4a1uyE/s1600-h/SANDY+DOS.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5422297878273110994" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 152px; CURSOR: hand; HEIGHT: 200px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjr67ia1ujWBkWc7e7mGn8L1vDpANj2CNSwd1t3DTGx2MZ1Uf49xUXzMqgkPyxhy3W8svqFR9rw3iJbScWBhFvQL-R26SQsYbFhfwnHQ2HQxmNYVzqg80qSAdXx0wGP9Yzar-Uxc4a1uyE/s200/SANDY+DOS.jpg" border="0" /></a></div><div>"GRATIS su propio taller en 10 días...y ganará $ 5000 por mes COMODAMENTE EN SU HOGAR!" aseguraba la 1° Escuela Suiza de Relojería, que no vacilaba en afirmar que "Su porvenir está en los cursos brillantes y acelerados" que de su oferta formativa "en clases personales o por correspondencia y que le permitirá, en muy poco tiempo, convertirse en un experto" Técnico Relojero Cronometrista. Asimismo prometía que "con el equipo de herramientas que la Escuela administra GRATIS a sus alumnos desde las primeras lecciones" el estudiante "podrá instalar SU PROPIO TALLER".</div><div><br />"Con un poquito de estudio....y este bisturí, yo me aseguré el futuro..." asevera un simpático personaje dibujado que, sonriente y con chaqueta de profesional, muestra en su mano izquierda el reluciente instrumento quirúrgico. "Un PEDICURO -agrega el aviso del Instituto de Enseñanza Profesional LYFAR- además de ser socialmente considerado, tiene su futuro asegurado...y si viera usted qué fácil y en que poco tiempo puede DIPLOMARSE, con nuestro método teórico-práctico, en clase o por correo".Como si eso fuera poco, "a todo diplomado de n/cursos por correspondencia REGALAMOS 100 tarjetas profesionales...", remata.</div><div><br />Asociación Radio Instituto ofrecía, también en 1956, gratis para sus cursos personales o por correspondencia, "TODO EL MATERIAL PARA ARMAR 26 RECEPTORES DISTINTOS", como un amplificador audiofrecuente, un pequeño transmisor de radio, dos osciladores para calibración y aseguraba que "TODOS LOS MATERIALES y las VALIOSAS LECCIONES ENVIADAS quedan de PROPIEDAD del alumno".</div><div><br />El Primer Instituto Fotográfico Argentino Sandy, de Sarmiento al 200, invitaba a estudiar en "sus horas libres" mediante "nuestro fácil y moderno Curso en CLASE o por CORRESPONDENCIA" que capacitaba en poco tiempo e incluía "máquina, rollos, papel y drogas completamente gratis..."</div><div><br />La denominada Asociación de Profesores y Maestros del colegio "LA CULTURA" ofrecía por su parte Bachillerato o Perito Mercantil "abreviado en 2-3 años" en clase o por correspondencia.</div><div><br />Mientras en algunos ámbitos se estaban produciendo experiencias no comerciales de carácter puntual, a nivel popular la capacitación no presencial seguía vinculada a propuestas rentadas, dirigidas a públicos con ambiciones de progreso rápido, en su mayoría sin escolarización de nivel medio que le permitiese incursionar en estudios terciarios.</div><div><br />Asimismo, parte de la oferta de este tipo apuntaba a satisfacer demandas de formación en disciplinas inexistentes en la educación formal. En este sentido, ya en 1972 la Primera Escuela Argentina de Detectives, de Diagonal Norte al 800 publicaba una pieza publicitaria proponiendo al lector que "Sea un aliado de la JUSTCIA y de la VERDAD", capacitándose para "esta apasionante y provechosa actividad" mediante "nuestros cursos por correo" con los cuales "usted aprende en casa, sin problemas de horario...", en base a lecciones "redactadas en forma clara, sencilla y directa".</div><div><br />En tal sentido ofrecía tutorías asegurando que "Nuestro Cuerpo de Profesores vigila el desarrollo de sus estudios y aprendizaje, allanándole cualquier dificultad". </div><div><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTSVoVceDtaU-FxFvqmTiAd-od8UUwC_1JQNFjcfiTmn9w_m3G5-P8yXubJD02oNWpQllUOTTiIXVhei439BmINTxyWhTtA9SVquyPK-QoXjJ7drwPeyAVrhcJ-GBHQUiQisZ-H6GMOTI/s1600-h/otro+patoruzu.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5422298069709815042" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 124px; CURSOR: hand; HEIGHT: 77px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTSVoVceDtaU-FxFvqmTiAd-od8UUwC_1JQNFjcfiTmn9w_m3G5-P8yXubJD02oNWpQllUOTTiIXVhei439BmINTxyWhTtA9SVquyPK-QoXjJ7drwPeyAVrhcJ-GBHQUiQisZ-H6GMOTI/s200/otro+patoruzu.jpg" border="0" /></a> Con la perspectiva del tiempo transcurrido, podemos hoy mirar con curiosidad y simpatía la publicidad que, desde la educación por correo, convocaba a un futuro próximo colmado de realizaciones profesionales y personales. </div><div><br /><br />Fuente: Padula Perkins, Jorge Eduardo (2008): Una introducción a la educación a distancia (Nueva edición aumentada y actualizada), Fondo de Cultura Económica, Buenos Aires.<br /><br />Ver: <a href="http://www.fce.com.ar/ar/libros/detalles.aspx?IDL=2937">http://www.fce.com.ar/ar/libros/detalles.aspx?IDL=2937</a></div>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-15428934888758317742009-11-29T14:27:00.000-08:002009-11-30T12:31:54.209-08:00Selecciones Escolares: La revista infantil del ayer con la que se formaron muchos de los adultos de hoy.<div align="justify"><span style="font-family:georgia;"><span style="font-size:85%;"><em></em></span></span></div><div align="justify"><span style="font-family:georgia;"><span style="font-size:85%;"><em></em></span></span></div><div align="justify"><span style="font-family:georgia;"><span style="font-size:85%;"><em></em></span></span></div><div align="justify"><span style="font-family:georgia;"><span style="font-size:85%;"><em></em></span></span></div><div align="justify"><span style="font-family:georgia;"><span style="font-size:85%;"><em>(por Jorge Eduardo Padula Perkins)</em></span></span></div><div align="justify"><span style="font-family:georgia;"><span style="font-size:85%;"></span><br /></span><span style="font-size:85%;"><em><strong>En agosto de 1959 comenzó a editarse una revista infantil que estaría llamada a constituirse en un hito en la historia de las publicaciones de su tipo: Selecciones Escolares. Producto de la editorial Codex, líder en el mercado editorial de entonces, tuvo por manifiesto objetivo ser material de distracción, cultura general y apoyo escolar. Un recorrido por sus contenidos permitirá recrear no solo a esta revista sino a toda una época.</strong></em></span><br /><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh0_G-OP8qoRegDeXMS9mcfMMgz5V5fLp0lNNQf2J10JTcP02kE65-YkDPq3o8RSoWddWv-kkNpDuIqRtwhoWXL_tNsu7EZ26Fe7STQoyZV2lhsfOxmWzFWzqWFGeREQmkdvFduqz8BuqE/s1600/TAPA.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5409656548017103618" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 213px; CURSOR: hand; HEIGHT: 320px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh0_G-OP8qoRegDeXMS9mcfMMgz5V5fLp0lNNQf2J10JTcP02kE65-YkDPq3o8RSoWddWv-kkNpDuIqRtwhoWXL_tNsu7EZ26Fe7STQoyZV2lhsfOxmWzFWzqWFGeREQmkdvFduqz8BuqE/s320/TAPA.jpg" border="0" /></a>Corría el mes de agosto de 1959. Arturo Frondizi ejercía la Presidencia de la Nación desde al año anterior, cuando había sido elegido en comicios teñidos por la proscripción del peronismo y en “El show de Gesa”, programa televisivo conducido por Juan Carlos Thorry, hacía gala de su velocidad discursiva un joven Tato Bores destinado a ser durante muchos años el paradigma del humor político.<br /><br />Es en ese entonces cuando apareció en Buenos Aires la revista infantil Selecciones Escolares, producto de editorial Codex que ocuparía un lugar de importancia en la vida cotidiana de los pequeños de la época.<br /><br />Si bien desde su nombre mismo mostraba la abierta intención de constituirse en material de apoyo a la tarea docente, logró amalgamar tal función con atractivas formas de entretenimiento en un todo ameno, accesible y acogedor que le permitió tener considerable influencia en aquellos chicos nacidos a fines de la década del ’40 y durante la del ’50.<br /><br />Amen de su contenido, tenía como característica distintiva el atractivo y cómodo formato de 13 centímetros de ancho por 19 de alto con el que se diferenciaba del material existente hasta ese momento.<br /><br /><strong>La editorial. Educación y socialización.</strong><br /><br />La editorial Codex se dedicaba, desde el año 1944, a la impresión y publicación de enciclopedias, textos escolares, diccionarios, revistas y obras bibliográficas de diferente tipo.<br /><br />Fue una de las empresas más importantes en su género y estableció compañías asociadas o controladas en varios países de América y en España, aunque luego acabaría siendo puesta en venta por licitación pública internacional en 1978, tras pasar por la quiebra y la absorción por parte del Estado.<br /><br />Selecciones Escolares, al igual que muchos otros de sus productos, se orientaba a contribuir a la formación, tanto en el marco de la educación formal, mediante el apoyo a los contenidos curriculares de la escuela, como a la no formal, a través de temas y valores considerados de importancia social.<br /><br />Así, además de material de apoyo escolar, la revista ofrecía información sobre la realidad social, científica y tecnológica que contribuía a engrosar los conocimientos de los niños en un orden más amplio que el de las aulas. En este sentido pueden citarse notas de difusión tales como “Nuevos inventos para los niños”, que señala las ventajas de un novedoso sistema de diapositivas ; “La conquista más grande del siglo” referida a la fusión que transforma el hidrógeno en helio y el posible aprovechamiento pacífico de la energía atómica o “El bisturí en el corazón” que versa sobre los adelantos de la cirugía cardiovascular.<br /><br />Asimismo el contenido de la publicación es claro en cuanto al interés por hacer un aporte socializador que incluyese referencias a pautas de comportamiento, normas y valores, tales como el respeto y amor a los padres, el ser útil a la sociedad, la defensa del bien y la verdad, la consideración para con los animales, la unión familiar o el honrar a los prohombres, que surgen de modelos explícitos o implícitos a través de notas y comentarios.<br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjPoEnhjB1LYyyX_mEB9jvDAzkh9TnQHtGoSZxVAeKt4jCF0HOQGQFrcu4jGlbK8wmhcn4oN_RVEtzakj0R9P_gqVZ5Uno3FYS5ypVRgqDLVc8ijYNsMuEdRkpJ1IXDmW54-Yqcua98d4M/s1600/STAFF-PRESENTACION.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5409658137680237346" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 210px; CURSOR: hand; HEIGHT: 320px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjPoEnhjB1LYyyX_mEB9jvDAzkh9TnQHtGoSZxVAeKt4jCF0HOQGQFrcu4jGlbK8wmhcn4oN_RVEtzakj0R9P_gqVZ5Uno3FYS5ypVRgqDLVc8ijYNsMuEdRkpJ1IXDmW54-Yqcua98d4M/s320/STAFF-PRESENTACION.jpg" border="0" /></a><br />Dirigida por Nicolás Juan Gibelli, se presenta a si misma como “Revista mensual de divulgación y actualidades para la juventud” y su primera tirada comercial alcanzó los 120.000 ejemplares de 80 páginas.<br /><br />El lenguaje utilizado es el propio de una prosa castellana pura. Por ejemplo : “¡Eh, tú, muchacho, ponte a trabajar !” o “Ahora haced la prueba de enrollarlo...”, como así “...como vosotros llegáis a abrir cajones”.<br /><br />Las ilustraciones de tapa son dibujos Cozzi Athos y consisten en niños en escenas de humor o de contenido ejemplarizante. En septiembre de 1959 por ejemplo, la tapa se ilustra con una nena y un nene que, en las márgenes de una laguna, observan asombrados a un linyera que lee un libro. Rubrica la escena la leyenda “Nunca es tarde”.<br /><br /><strong>Evolución en los primeros meses.</strong><br /><br />En el número 2, de septiembre de 1959, un recuadro titulado “Advertencia a nuestros lectores” señala que “La apoteótica acogida dispensada a nuestro primer número hizo que la tirada del mismo fuera insuficiente y dio motivo a que una inmensa cantidad de interesados en la revista no pudieran obtenerla. A ellos, les pedimos disculpas. Para que no se repita un hecho tan lamentable triplicamos en este número la tirada del anterior. Pero para esto debimos recurrir a las existencias del único papel obtenible en plaza, que se adapta a nuestras necesidades. Por esta causa, una parte de esta edición está impresa con un papel diferente, circunstancia que trataremos de evitar en lo futuro”.<br /><br />En octubre de 1959, número tres, la revista da a conocer tres noticias que son señales de su evolución :<br />a) La próxima aparición de las “Tapas-libros” de material plástico para coleccionar 12 números de la revista.<br />b) La entrega gratuita con dichas tapas de la reimpresión del número cero que había circulado en forma no comercial y solamente entre docentes.<br />c) La reimpresión del número uno.<br /><br />Posteriormente la revista modificaría su periodicidad, pero en términos generales se mantendría estable en el mercado y conservaría sus principales características distintivas hasta el número 92, de febrero de 1964. Dirigido siempre por Gibelli ese ejemplar anuncia la finalización de las ediciones en el formato de 13 por 19 centímetros y la periodicidad mensual (a la que había vuelto para entonces). A partir del 23 de marzo de ese año habría de comenzar a editarse en nuevo formato de 24,5 por 31 centímetros y tener aparición semanal los días lunes.<br /><br /><strong>Un homenaje al director.</strong><br /><br />La página 21 del número 6, bajo el título “Muchas Gracias”, está dedicada a destacar los principales detalles de un acto llevado a cabo el 30 de noviembre de 1959 en el Plaza Hotel. En la oportunidad el Círculo de la Prensa de Buenos Aires organizó una cena de camaradería en honor al director de Selecciones Escolares, Nicolás Juan Gibelli, con motivo de la entrega de 800.000 ejemplares de la revista.<br /><br />El comentario indica que a dicho acto adhirieron la Asociación Argentina de Editores de Revistas, la Federación Argentina de Propaganda, la Confederación de Profesores y Maestros Católicos de la República Argentina, el Círculo de la Prensa Escolar, la Cámara de Industriales Gráficos de la Argentina, la Sociedad de Distribuidores de Diarios, Revistas y Afines y el Sindicato de Vendedores de Diarios, Revistas y Afines.<br /><br />Asimismo se destaca la asistencia del Subsecretario de Educación en representación del ministro del área y “numerosas personalidades de las embajadas extranjeras, de órganos periodísticos nacionales y del exterior, del magisterio y la industria gráfica”.<br /><br />También se transcriben las palabras pronunciadas en la ocasión por el señor Gibelli, que agradeció los conceptos vertidos por quienes le precedieron en el uso de la palabra “en nombre del Directorio de la Editorial Codex” y en el suyo propio. En el final de la exposición, el disertante afirmaba que “a esos maestros, a los padres de familia, al periodismo sano y a nuestros hijos pertenece Selecciones Escolares, cuya dirección se propone interpretar sus anhelos, sus inquietudes, sus angustias y sus ideas en pro de una nueva generación de argentinos cada vez más dignos, cada vez más cultos, cada vez más nobles”.<br /><br /><strong>Secciones fijas.</strong><br /><br />La mayor parte del contenido de la revista estaba constituido por secciones fijas de las cuales vamos a hacer una reseña.<br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2tO3XzFL9DdqDlpYakTrmwlruXxTevxGS29k5ZHgZ0SEJxqQw5D_oO8SZDZ409Ojfu54lHkp7SS-Gokm8PpLcDvYSbV7QHiBfMSAi7tY4ZggX3kVfZhDqYN7qlF_-tFX9i7GboZgdwpk/s1600/SELEMATCH.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5409658871900686802" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 210px; CURSOR: hand; HEIGHT: 320px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2tO3XzFL9DdqDlpYakTrmwlruXxTevxGS29k5ZHgZ0SEJxqQw5D_oO8SZDZ409Ojfu54lHkp7SS-Gokm8PpLcDvYSbV7QHiBfMSAi7tY4ZggX3kVfZhDqYN7qlF_-tFX9i7GboZgdwpk/s320/SELEMATCH.jpg" border="0" /></a><br /><em>“Selematch”</em> era un entretenimiento didáctico-visual, según el cual en una edición de la revista se publicaba un dibujo o fotografía que los lectores debían reconocer. De este modo podían participar en un sorteo de un diccionario del fondo editorial Codex entre todas las respuestas correctas. La solución era publicada en la edición siguiente, mientras que los ganadores eran notificados en forma directa. Personalidades, edificios y lugares históricos, zonas geográficas o turísticas, eran por lo general objeto de este juego. A modo de ejemplo puede citarse que en el número 4 se publicó una fotografía del Museo de la Universidad de La Plata, y en el número 12 el Palomar de Caseros y Justo José de Urquiza.<br /><br /><em>“Celebraciones del mes”</em> que luego pasó a denominarse <em>“Efemérides del mes”</em> fue una sección dedicada a resumir e ilustrar los hechos y significados de las conmemoraciones adoptadas por el calendario escolar, clásico material de apoyo a la tarea docente.<br />En el número cuatro, por ejemplo, se recuerda la fundación de la ciudad de La Plata, dada el 19 de ese mes, en el año 1882 : “Veintiún años después del Pacto de San José de Flores -dice en página 11- bajo la presidencia del doctor Nicolás Avellaneda y como consecuencia de haber sido cedida la ciudad de Buenos Aires -año 1880- a la Confederación para que en ella se instalaran definitivamente las autoridades nacionales, el gobernador de la provincia homónima, doctor Dardo Rocha, se vio en la necesidad de instalar su gobierno dentro de los límites de dicho Estado...”<br /><br />Distintas <em>historietas</em>, generalmente en una extensión de cuatro páginas y de carácter continuado, eran parte de la propuesta de esparcimiento de la revista. En tal sentido, entre otras, pueden citarse “El capitán del SAMARAG”, “Los tigres del Ganges”, “Hombres de la montaña”, “Morfeo” y “Santos Leiva”. Esta última, si bien orientada a la continuidad, presentaba en cada número capítulos unitarios. Se trataba de un jovencito gaucho, trompa de órdenes del Ejército durante la época de la conquista del desierto que, concentrando todas las virtudes humanas, conformaba el paradigma del criollo.<br /><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh_zo5_NoNIq8lSUXVnmK4Ly0yNurrkn9f2eyuEm0guZ7wVykLPRffBAot7COOf0z9RcGnOCzffP4BmOTIXdX8DdIG7M71OdmD-ro2OFvQHHfh7Vw1e6uWiR7xrI88n0YfxF_MFIigiThU/s1600/BARBABLANCA.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5409659821678566466" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 213px; CURSOR: hand; HEIGHT: 307px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh_zo5_NoNIq8lSUXVnmK4Ly0yNurrkn9f2eyuEm0guZ7wVykLPRffBAot7COOf0z9RcGnOCzffP4BmOTIXdX8DdIG7M71OdmD-ro2OFvQHHfh7Vw1e6uWiR7xrI88n0YfxF_MFIigiThU/s320/BARBABLANCA.jpg" border="0" /></a><em>“...Aquí está Barbablanca”</em> se denominó a la sección de cartas de lectores de Selecciones Escolares. Barbablanca era un anciano estereotipado al estilo de los viejos duendes de los cuentos de hadas, que ilustraba siempre las páginas destinadas a esta función, luciendo sus largas barbas, zapatos largos y puntiagudos y su sombrero de gnomo. Las cartas recibidas, muchas de ellas con consultas sobre temas de interés escolar, no solamente eran publicadas, sino también respondidas por el sabio y bondadoso Barbablanca, siempre atento a ofrecer una lección, tanto de conocimientos, cuanto de moral y buenas costumbres. Aparecían preguntas tales como ¿Quién fue el iniciador de la apicultura ?, ¿Qué es el relieve ?, ¿Quién inventó el teléfono ?, o interrogantes como “Deseo saber si existen todavía las hadas...” ; este último respondido por el anciano de la siguiente y romántica forma : “En los corazones de todos los niños buenos siempre hay un lugar para las hadas. Muchas veces esa hada es la misma mamá, y no pocas veces la maestra. Todas las personas que nos hacen un bien son un poco hadas...”.<br /><br /><em>“Para enseñar a leer al hermanito</em>” tenía una doble intencionalidad. Por un lado ofrecer una atractiva forma de práctica de lectura y escritura, según los conceptos pedagógicos de la época, para niños de primer grado inferior o próximos a ingresar a la escuela. Por otra parte, promover, como se sugería desde su nominación, la participación de los niños más grandes en la educación de sus hermanos, por lo menos a través de esta amena modalidad.<br /><br />Rubricada con la advertencia de que “La enseñanza de la lectura y la escritura es una tarea de amor...”, esta sección se presenta en abril de 1960 con la sugerencia de una serie de ejercicios previos.<br /><br />“Invitarán al hermanito a dibujar lo que desee. Esto se llama dibujo libre y no hace falta corregirlo...”, dice. En las páginas siguientes se inician los ejercicios de aprendizaje. Un duendecito señala con un puntero el ala de un ave. Aparece la palabra “ala” en letra cursiva y tipo imprenta, al igual que las vocales y las sílabas. Algunas de ellas en línea punteada para escribir por encima de las marcas y practicar el dibujo de las letras. Este es el método con el que, en ediciones sucesivas, se desarrolla la enseñanza.<br /><br /><em>“¿Lo sabías ?”</em> era la clásica sección de curiosidades y difusión de conocimientos dispersos, como por ejemplo lo agudo del olfato del buitre, la ciudad con mayor cantidad de árboles, la planta más venenosa, el origen de la muralla china, la ostra más grande vista en el mundo, etc.. A modo de ejemplo, en el número 92, se dice en esta sección : “Conservando antiguas tradiciones, los blancos de Sudáfrica suelen asar en grandes fogatas enormes salchichas que resultan muy apetitosas”.<br /><br />En el número 2 se había afirmado que “La hiedra es una planta que cubre las paredes de algunas casas, tiene las hojas dispuestas como las tejas de los techos y en los días de lluvia impide que se mojen las paredes”.<br /><br /><em>“¡Cuidado con la ortografía !”</em> conformaba un espacio dedicado a contribuir a la fijación de usos ortográficos de las distintas letras a través de una doble página versificada e ilustrada.<br /><br />“De las astutas serpientes/sibilantes, sibilinas,/tiene la señora “S”/la silueta distinguida”, dice en el número 19.<br /><br />En junio de 1960, flanqueadas por ilustraciones tales como un cubo, una bicicleta y una bandera, entre otras, los versos se refieren al uso correcto de la letra “b” : “Estos seis verbos que ahora/en seguida te diré :/beber, deber y caber,/haber, saber y sorber,/en todas sus inflexiones/mantienen siempre la ‘b’”.<br /><br />Distintos <em>crucigramas didácticos</em> aparecían publicados en Selecciones Escolares. En ellos se amalgamaba el entretenimiento y el conocimiento porque los ha habido sobre montañas, países, ciudades, personalidades, etc.. Por ejemplo, en coincidencia con el Día Universal del Ahorro, se publicó un “Ahorrograma con acróstico” . En el número 13, aparece el crucigrama “Descubridores y colonizadores”.<br /><br />Una página denominada<em> “Humorismo”</em> incluía de tres a cinco cuadros independientes de chistes gráficos. En el numero 4 se ve, en uno de los cuadros, a tres tigres relamiéndose, rodeados de objetos de uso humano. Uno de ellos dice : “-¡Es cierto, en seguida uno se siente mucho mejor después de la visita de un buen veterinario... !-“.<br /><br />Los entretenimientos, actividades didácticas y manualidades han sido varios, pero en la forma en que mejor aparecen representados es en las instrucciones y moldes para la realización de elementos de factoría propia, fuere un muñeco, títeres, escenario para títeres, perchero o un proyector.<br /><br />En todos los casos se ofrecía una lista precisa de los materiales necesarios y los pasos a seguir para la construcción, claramente ilustrados.<br /><br /><em>“Crónica de animales” e “Historias verídicas de animales”</em> desarrollaban anécdotas protagonizadas por irracionales, tales como una perra que crió a un cachorro de tejón, un pescador que pescó un pez con anteojos (que había extraviado un colega suyo), dos monitas que llevaron la cola de la novia en una boda. Tal el caso de “La pequeña Josefina Trentín de 5 años, de Pozo Hondo (Santiago del Estero)” que “estaba jugando en una cueva abandonada, cuando fue sorprendida y sepultada por un derrumbe. Por suerte la acompañaba su perro que corrió a su casa y ladrando logró atraer algunas mujeres hasta el lugar. Así la pequeña Josefina pudo ser salvada”.<br /><br /><em>“¡Cuidado !¡Peligro !”</em> era un anecdotario que tenía como principal objetivo el advertir a los pequeños lectores respecto de distinta clase de riesgos a los que se podrían enfrentar en la vida cotidiana. Así, por ejemplo un relato sobre un juego con simuladas espadas, termina señalando el peligro de jugar con objetos punzantes.<br /><br />“Vosotros en verano bebéis ininterrumpidamente y de cualquier lado : de fuentes, arroyos, bombas...siempre y cuando sea un líquido semejante al agua. Pero hacerlo es muy arriesgado, dado que el agua puede estar infectada, contaminada, sucia, y entonces...vienen los dolores. No bebáis jamás agua de la que no estéis seguros que no está corrompida. ¡Jamás !”, se afirma en el número 10.<br /><br />Con la denominación de <em>“Yapeyú...Hip...Hip...¡Ra !”</em> se desarrolló la larga historia en capítulos unitarios de un grupo de chicos de barrio que forman un equipo de fútbol que, con el tiempo llega a jugar en primera división. Los estereotipados personajes como el gordo “Pandeleche”, goloso y comilón ; el negrito “Fanschico”, bailarín, travieso y juguetón ; el pelirrojo “Llamarada”, arquero del equipo o, entre otros, “El Tarta”, puntero izquierdo tartamudo pero veloz en el juego, daban vida a historias ejemplarizantes y siempre dotadas de ternura...<br /><br />“El 17 de agosto, después del homenaje al general Don José de San Martín, en el mismo patio escolar, alumnos de sexto grado resuelven formar un club de fútbol. Fueron muchos los nombres propuestos, pero cuando Capicúa sugirió Yapeyú, estuvimos todos de acuerdo...” dice la primera parte de esta historia, aparecida en el número 6, de enero de 1960.<br /><br /><em>“Enciclopedia de los animales”</em> era la recopilación de información sobre características, formas, colores, costumbres y habitat de diferentes animales. Aparecían generalmente agrupados por especies e ilustrados con fotografías.<br /><br />“El dingo es un perro selvático parecido al lobo (comenta en noviembre de 1959 el número 4 de la revista). Es muy feroz y ataca a cualquier animal, aun al canguro grande y veloz. Los europeos hacen la guerra a estos destructores de rebaños, tanto que hoy quedan pocos ejemplares. Los indígenas, en cambio, han tratado de domesticarlo para convertirlo en ayudante de caza...”.<br /><br /><em>“Jugando con las plantas”</em> sugería a los lectores la realización de “juegos” que eran en realidad experimentos demostrativos de la biología vegetal, tales como orientación hacia el sol, penetración de las raíces en superficies duras, transpiración, fotosíntesis, etc.<br /><br /></div><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5409660834960338882" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 206px; CURSOR: hand; HEIGHT: 320px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiReiZqv1xGWdt_yQMRZJ_HKh9qbIseUe4-XcegaKZcxPTohWv4anOTFGiBi1A7G6c3AIiE5M-aPQB0eQ3ng7BMYQVAJVLRQQPF-m5QSWZs22gzXRR-JpYyawulxJFpVQw8qwNXUGYtI48/s320/JUGANDO+PLANTAS.jpg" border="0" /> <p align="justify">En diciembre de 1959 por ejemplo, se señala con referencia a una experiencia, que “En cuanto la plantita tenga unos diez centímetros de altura, comenzará a comportarse de una manera que es típica de las plantas trepadoras : la parte superior del germen se doblará y empezará a moverse lentamente en sentido circular. Observad con atención el tallo de vuestra plantita de campanillas y os daréis cuenta de que cada media hora su extremo apuntará en una dirección distinta...”.<br /><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj5x9yI3YYRaE3lNY4bkZXtUXzDrnR-MvbsCP4ABq082BgJg5pZOUFUpTD4ZXpa-OOEBrV0V7Rx6xlffr4Zl_2RmOSWNIPBScghxc6fwd2wqOvuI7iosBhSPPYzhnTe0EEkjAQ0_CbeUFE/s1600/TIO+FILATELISTA.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5409661206486392290" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 210px; CURSOR: hand; HEIGHT: 320px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj5x9yI3YYRaE3lNY4bkZXtUXzDrnR-MvbsCP4ABq082BgJg5pZOUFUpTD4ZXpa-OOEBrV0V7Rx6xlffr4Zl_2RmOSWNIPBScghxc6fwd2wqOvuI7iosBhSPPYzhnTe0EEkjAQ0_CbeUFE/s320/TIO+FILATELISTA.jpg" border="0" /></a> “<em>El tío filatelista”</em> constituía un incentivo a los lectores para su incursión en la filatelia como camino hacia el conocimiento histórico, geográfico, etc. El “tío”, un simpático hombrecito de gruesos bigotes blancos, daba, edición tras edición, información sobre determinados e interesantes sellos postales del mundo.<br /><br />“En el año 1962 fueron emitidas estas estampillas en homenaje al célebre baile del Ramayama inspirado en la leyenda de Rama y Sita”, se aseguraba en el número 92 que reproduce los seis sellos a los que el texto se refiere.<br /><br />Es también un espacio común el que ocupaba lo que llamamos <em>prosopopeya didáctica</em>, es decir el relato que ciertos objetos inanimados hacen de su existencia, funcionamiento, razón de ser, etc.. Así por ejemplo, “El arado relata”, “La nafta relata”, “La iglesia relata”, “La casa relata” o “El bisturí relata”. Se lee en este último : “En la sala de operaciones el bisturí permanecía callado junto a un ramo de rosas rojas enviadas por un enfermo para ser entregadas a la buena sor Celestina ; una enfermera las había dejado en la sala de operaciones.<br /><br />- Jamás me ocurrió semejante cosa -refunfuñó el bisturí- ¡Huelan qué aroma !<br />Una rosa disgustada ante aquellas palabras, abrió su rojo corazón, y preguntó :<br />- ¿Acaso te molesta nuestra presencia ?...”<br />Luego la conversación de los seres inanimados iba incursionando en temas de medicina tales como la historia de la cirugía, la aparición de pinzas hemostáticas para contener hemorragias, los anestésicos, etc.<br /><br /><strong>Notas diversas.</strong><br /><br />Amen de las secciones fijas, Selecciones Escolares ofrecía notas diversas. Para citar solamente algunos casos puede decirse que en el número 2 bajo el título “Insectos alquimistas” se ofrecía un artículo de cuatro páginas con profusas ilustraciones sobre abejas, tipos, características y elementos de apicultura.<br /><br />En el número 4 se presentó una síntesis histórica y conceptual de la UNESCO “concretada el 4 de noviembre de 1945, en que se constituyó oficialmente. Un año más tarde 79 países la integraban y ya estaban en ejecución algunos planes de corto alcance, mientras se realizaba una intensiva labor de planificación de obras de vastas proyecciones”.<br /><br />En abril de 1960 apareció una nota en forma de diálogo familiar sobre la ley de la gravedad y teorías de la fuerza titulada “Bill y la manzana”. Dice uno de sus párrafos : “Si tú atas una piedra a un hilo y los haces girar, la piedra sigue una ‘trayectoria’ que es una circunferencia. Cuanto más velozmente la haces girar, más debes esforzarte para que no se te escape. Entonces en un determinado momento la piedra ‘tirará’ tan fuerte que se romperá el hilo y se irá volando en línea recta. Esa fuerza que obliga al objeto a alejarse de tu mano, justamente se llama fuerza centrífuga”.<br /><br />“Cuatro botones mal pegados” es el título de la nota aparecida en el número 3 que se inicia diciendo : “Hoy Eduardo volvió triste de la escuela. La maestra le había corregido una composición que él estimaba no tenía un solo error”. De ahí en más, el relato aclara los errores semánticos en que el niño habría incurrido y se remata diciendo que “Eduardo comprendió lo útil que es saber usar el diccionario.”.<br /><br />La poesía tuvo también su espacio en la revista mediante obras de Gabriela Mistral (“Doña primavera”), Leopoldo Lugones (“Canto a la mañana”) y Ricardo Rojas (“La libertad”).<br /><br /><strong>La publicidad.</strong><br /><br />Una somera observación de los espacios de publicidad en varios números de la revista permite apreciar que la publicidad ocupaba aproximadamente un 12,5 % del espacio total de cada edición, como así también que cerca de un 60 % de esos espacios estaban cubiertos por otros productos de la editorial Codex.<br /><br />En este sentido y al mejor estilo de las actuales empresas de multimedios, Codex generaba un mecanismo de retroalimentación publicitaria entre sus productos editoriales.<br /><br />Así, algunas de las obras del fondo editorial ofrecidas en Selecciones Escolares eran, por ejemplo, Diccionarios Codex (Cuatro tipos), “Pájaros del mundo” (Tres tomos con textos en castellano, inglés, francés y portugués, con ilustraciones de Axel Amuchástegui), “Historia universal” (Tres tomos. Por Charles Guignebert, profesor de la Universidad de París, traducida y completada por Horacio A. Difrieri, profesor del Colegio Nacional de Buenos Aires), “Historia gráfica del arte universal” (Por Julio E. Payró, de la Academia Nacional de Bellas Artes), “Nuestro universo maravilloso” (Cuatro tomos. Ficción y realidad del misterio y la investigación), revista mensual “Pimpinela” (Historietas de acción), libros bimestrales “Pimpinela extra”, “Diccionario enciclopédico, atlas universal y poligloto Codex” (Seis tomos), “Novelas humorísticas, juveniles y policiales” (Seis tomos), “Grandes figuras de la humanidad” (Seis tomos. Estudio crítico biográfico de 1315 hombres célebres), “Contabilidad” (Siete tomos), “Enciclopedia estudiantil” (Revista semanal coleccionable para el estudiante secundario) y “La Biblia” ( Semanal, encuadernable).<br /><br /><strong>Palabras finales.</strong><br /><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh3_zNTRTj6tYkGIX2qZrEM52OOioLuX9XlcUQ-fh0QtgFpXSdZDlymF0GBmrUM0xbXBtc5r5WnRzej6gZIw2aI093QcHCjfSxT17Sf5y3qlmbhoG_0W4FNDPSnaF8xALH4RZHFeuNj-_w/s1600/tapa+selecciones+mas+de+40.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5409661783053763202" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 199px; CURSOR: hand; HEIGHT: 320px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh3_zNTRTj6tYkGIX2qZrEM52OOioLuX9XlcUQ-fh0QtgFpXSdZDlymF0GBmrUM0xbXBtc5r5WnRzej6gZIw2aI093QcHCjfSxT17Sf5y3qlmbhoG_0W4FNDPSnaF8xALH4RZHFeuNj-_w/s320/tapa+selecciones+mas+de+40.jpg" border="0" /></a>En lo que respecta a su inserción en el mercado de lectores de revistas, la permanencia del medio a través de un considerable espacio de tiempo, las cantidades de las tiradas y otros indicadores de crecimiento y repercusión, hablan a las claras de una vigorosa presencia de Selecciones Escolares en la franja de público infantil, en los albores de la década del sesenta.<br /><br />En orden a la descripción y evaluación de sus contenidos, surge que la revista se orientó al apoyo escolar curricular, el entretenimiento y el aporte a la socialización, mediante la información general y la transmisión de valores, normas sociales y pautas culturales, según las formas de su época.<br /><br />De esto último se deriva asimismo que, si bien el medio ha tenido un estilo particular tanto en la forma cuanto en el tratamiento de los temas, presenta notorios puntos de semejanza con otras revistas infantiles en cuanto el perfil educativo y socializador, como así en la intención, tácita o manifiesta, de obtener para si no solamente la preferencia de los niños sino también el apoyo de los adultos (padres y maestros).<br /><br />Podría decirse, educar jugando y jugar con educación.<br /><br /><span style="font-size:78%;"><strong>Fuentes:</strong><br /><br />• Diario Crónica, 02-10-70<br />• Diario Cronista Comercial, 08-10-74 / 24-12-74<br /><br />Revista Selecciones Escolares, números 2, septiembre 1959; 3, octubre 1959; 4, noviembre 1959; 5, diciembre 1959; 6, enero 1960; 10, marzo 1960; 12, abril 1960; 13, abril 1960; 14, mayo 1960; 16, junio 1960; 19, julio 1960; 34, marzo 1961; 91, enero 1964 y 92, febrero 1964. </span><br /><span style="font-size:78%;"></span><br /><span style="font-size:78%;"> --------------------------------------------------------------------</span><br /><span style="font-size:85%;"><em>Publicado originalmente en la revista-libro "Ensayos Académicos", año X, número 1, del Instituto Superior Pedro Goyena de Bahía Blanca, Buenos Aires, Argentina, en octubre de 2009.</em></span> </p>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com28tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-27131359084568151702009-09-07T16:23:00.000-07:002010-04-15T20:58:32.693-07:00Cuando el “loco” Arcuri tenía “La Palabra”.<div align="justify"><strong><span style="font-family:georgia;font-size:78%;color:#000000;"></span></strong></div><div align="justify"><strong><span style="font-family:georgia;font-size:78%;color:#000000;"></span></strong></div><div align="justify"><strong><span style="font-family:georgia;font-size:78%;color:#000000;">(por Jorge Eduardo Padula Perkins)</span></strong></div><br /><div align="justify"><strong><span style="font-size:78%;"></span></strong></div><div align="justify"></div><div align="justify"></div><div align="justify"><strong><span style="font-family:georgia;"><span style="color:#000000;"></span></span></strong></div><div align="justify"><strong><span style="font-family:georgia;"><span style="color:#000000;">Todo aquel que haya visitado alguna vez aquella redacción e imprenta de Oliveira Cézar 41 en la bonaerense localidad de San Pedro en los tiempos en que José Arcuri hacía “La Palabra”, tendrá de ello un recuerdo imborrable.<br /><br />“La Palabra” era el periódico fundado en 1922 por Eduardo García Corti, que más tarde conduciría su heredero periodístico, el “loco Arcuri”. Así se lo conocía por su nada común opción por las ideas antes que las cosas materiales. </span></span></strong></div><br /><p align="justify"><strong><span style="font-family:georgia;"><span style="color:#000000;"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378871344840104610" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; CURSOR: hand; HEIGHT: 102px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiQKRYXeP2ipRcxThu6G_m5JtI1Q8xFivstrQRD0eDZzQQHp7jr55_8MGRSY5eVjIDfpNX8rwhumbcO6eL_oxJiDQ0tkpd-exhPfY1vJWO42n-Y6Bgjfev4F8Bcdo3H9FKN9lxUKvzLazY/s400/LA+PALABRA.jpg" border="0" /> En esa vieja casona con olor a papel y tinta José Bechara Arcuri dirigía y construía de modo artesanal y apasionado ese medio que, de la mano del romanticismo y del idealismo casi utópico, transitaba ya en la década del setenta, tiempos de cambio resistiéndose a quebrarse ante el embate de la modernidad. </span></span></strong></p><strong><span style="font-family:georgia;"><div align="justify"><span style="color:#000000;">Con su espíritu noble y su entusiasmo por hacer de cada joven un manojo viviente de ideales, Arcuri acogía con presteza las colaboraciones, en verso o en prosa, de escritores noveles cuyos sueños fogoneaba, incentivándolos mediante la publicación de sus trabajos, por sencillos que estos fueren, y su palabra viva y entusiasta que invitaba a la libertad y a la creatividad individual y colectiva.<br /><br /></span><span style="color:#000000;">Era admirable la fluidez de sus palabras y la simultánea velocidad con que sus manos, ennegrecidas por la tinta, componían con tipos móviles los textos que sembrarían de ideas una próxima edición. Lo haría, hasta la década del setenta, en cuatro páginas de tamaño sábana, resultado de su múltiple labor como redactor, tipógrafo e impresor. </span></div><br /><div align="justify"></div><div align="justify"></span></strong></div><div align="justify"><strong><span style="font-family:georgia;"><span style="color:#000000;">Argentino, descendiente de libaneses, José Bechara Arcuri fue caracterizado por Alejandro Maino como “inflexible, insobornable, asceta”, que “piensa, habla y escribe sin esguinces, a pecho descubierto” con un léxico que, en el fragor del debate de ideas, puede tornarse “recio y espinoso”.<br /></span><br />“<span style="color:#000000;">Su periódico es acicate de las actividades públicas”, ha sostenido también Maino, que lo describió “sensible al ámbito de su actuación y de sus predilecciones” y “ferviente demócrata, vigilante en perpetua guardia de su libertad y de las ajenas…” </span></span></strong></div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhUEekk287DXLKWSY-vcKDMtr9yBEy_9N_H-d82UmYmcyg89w0qrV0hjPXVJH01xjLjg0JNhA_87JJ6zrp_U8tDhHcgPLZkJMLhVB9uIPUZGzsyqArPoL-QnteCkCQ-guYwhAhNtDpurrI/s1600-h/Jose+B.+Arcuri.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5444574634670824610" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 270px; CURSOR: hand; HEIGHT: 320px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhUEekk287DXLKWSY-vcKDMtr9yBEy_9N_H-d82UmYmcyg89w0qrV0hjPXVJH01xjLjg0JNhA_87JJ6zrp_U8tDhHcgPLZkJMLhVB9uIPUZGzsyqArPoL-QnteCkCQ-guYwhAhNtDpurrI/s320/Jose+B.+Arcuri.jpg" border="0" /></a><br /><div align="justify"><strong><span style="font-family:georgia;"><span style="color:#000000;">Es por eso que el busto emplazado en el cantero de la avenida Tres de Febrero en su intersección con la calle Almafuerte en la ciudad de San Pedro es sin duda alguna un merecido homenaje. Nada más justo que rescatar para la ciudadanía y las nuevas generaciones la figura señera y ejemplar de este periodista de raza, oficio y corazón.</span></span></strong><span style="color:#000000;"> </span></div><div align="justify"><span style="color:#000000;"><br /></span><br /><span style="font-size:78%;"><strong>LA FOTOGRAFIA DEL BUSTO DE DON JOSÉ ARCURI ES UNA PARTICULAR GENTILEZA DE LA FOTÓGRAFA SAMPEDRINA MATILDE CARRERAS.</strong></span></div><br /><p align="justify"><span style="font-size:78%;"><strong>Bibliografía y fuentes:<br /><br />Arcuri, José B. (sin fecha): Libro Celeste, editorial diario La Palabra, San Pedro, Buenos Aires<br />Piccagli, Américo E. (1997): Historia documental de San Pedro, Rafael de Armas Editores, Buenos Aires.<br />Honorable Concejo Deliberante de San Pedro. En línea </strong></span><a href="http://www.hcdsp.gov.ar/"><span style="font-size:78%;"><strong>http://www.hcdsp.gov.ar/</strong></span></a><span style="font-size:78%;"><strong> [Consulta: 6 de septiembre 2009]</strong></span></p><p align="justify"><strong><span style="font-size:78%;"></span></strong> </p><p align="justify"><span style="font-size:78%;"><em><strong>Enlace al video "El Quijote y La Palabra" de Pablo Banegas:</strong></em></span></p><p align="justify"><a href="http://periodismodeayer.blogspot.com/2010/04/el-quijote-y-la-palabra-un-video-de_15.html">http://periodismodeayer.blogspot.com/2010/04/el-quijote-y-la-palabra-un-video-de_15.html</a></p>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com11tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-51938141843835207532009-09-05T19:43:00.000-07:002009-09-06T08:51:14.144-07:00Apuntes para una historia del periodismo quilmeño<span style="font-size:78%;">(Por: Jorge Eduardo Padula Perkins)</span><br /><br />Los pueblos tienen en la prensa una herramienta insustituible para la libre circulación de la información y de las ideas y, por ende, para el ejercicio democrático y el desarrollo individual y colectivo de la ciudadanía.<br />Entre los más remotos antecedentes de su actividad en el Río de la Plata se encuentran las “gazetas” manuscritas, hojas de 25 por 15 centímetros, que circulaban por Buenos Aires hacia 1764.<br />Más tarde, en 1801, aparecería “El Telégrafo Mercantil”, editado por el español Francisco Antonio Cabello y Mesa, primer periódico impreso que se hacía en las prensas de los Niños Expósitos.<br />Al año siguiente, Juan Hipólito Vieytes, considerado el primer periodista argentino, sería responsable del “Semanario de Agricultura, Industria y Comercio”.<br />Ya en 1810 verían la luz el “Correo de Comercio”, fundado por Manuel Belgrano y, el 7 de junio, la “Gaceta de Buenos Ayres” que, bajo la responsabilidad de Mariano Moreno, estaría llamada a señalar el “día del periodista” en estas tierras.<br />A ellos seguiría una muy prolífica actividad a través de la cual nacerían y dejarían de existir cientos de medios de prensa gráfica a lo largo de la historia argentina.<br />Pero la referencia a los pueblos hecha al inicio de esta presentación, no solo remite a los conglomerados humanos que conforman una nación, sino también a los espacios geográficos, los poblados y ciudades, ya que en nuestro país se reproduce en casi todos ellos el fenómeno de la comunicación a través sus propios medios de prensa.<br />Es de este modo como en muchas localidades existe una interesante historia del periodismo regional, al tiempo que los medios de prensa local constituyen una fecunda fuente de la historia de esas mismas comunidades de las que emergen y a las que sirven.<br />Así sucede con la prensa escrita de la mayoría de las localidades de la provincia de Buenos Aires. En este sentido Quilmes denota una rica producción en periodismo local, cuya singularidad permite distinguirla y a su vez tomarla de paradigma de tantas otras.<br />Originada en el asentamiento de aborígenes provenientes de Tucumán, sus inicios se remontan a 1666, con la creación de la “Reducción de la Exaltación de la Santa Cruz de los Kilmes” y fue declarada ciudad por ley provincial en 1916.<br /><br /><strong><em>El principio.</em></strong><br /><br /><br /><div><div><div><div><div><div><div><div><div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglnPa8th_pYCHAg8RIgCjaBJvAOwUHI_tOjL4hzI9a0cLgqJ26pCRUrTS3U-tUQfW2U9KTqfW5ITBKEQwaeSSwXjDkhryCtMlCrq_WN479ISIFPhU2RdN0LTIa27CnOfwyWCVgxps0QeY/s1600-h/el_progreso.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378185648163077874" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 227px; CURSOR: hand; HEIGHT: 320px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglnPa8th_pYCHAg8RIgCjaBJvAOwUHI_tOjL4hzI9a0cLgqJ26pCRUrTS3U-tUQfW2U9KTqfW5ITBKEQwaeSSwXjDkhryCtMlCrq_WN479ISIFPhU2RdN0LTIa27CnOfwyWCVgxps0QeY/s400/el_progreso.jpg" border="0" /></a>Poco tiempo después de la aparición de grandes diarios argentinos como “La Prensa” (1869) y “La Nación” (1870), sale a la luz “El Progreso de Quilmes”, en el mismo año de 1873 en el que el primer tranvía a caballo comenzaba a recorrer las calles de este pueblo.<br />Domingo Faustino Sarmiento, el otrora fundador del periódico “El Zonda”, presidía la República y eran tiempos de real y creciente progreso. Un año antes, el 18 de abril de 1872 había llegado a Quilmes el ferrocarril y poco después se había incorporado el alumbrado público a kerosene en reemplazo de los faroles con velas.<br />También en 1872 se había fundado en Quilmes la primera biblioteca popular, mientras en Buenos Aires funcionaban 26 imprentas y se editaban 94 diarios, 44 de los cuales habían aparecido ese mismo año.<br />En el mes de mayo de 1873, el médico, educador, político y periodista José Antonio Wilde, nacido en Buenos Aires en 1813 y afincado en Quilmes en 1853 edita, por su propia y única imprenta en la zona, el que sería el primer periódico en el lugar. “El Progreso de Quilmes” aparece, según CRAVIOTTO, el 8 de mayo de 1873 (4 de mayo de 1873, para RAMOS). Por entonces Andrés Baranda volvía a ser electo titular del municipio.<br />Hijo de Santiago Spencer Wilde y tío de Eduardo Wilde, José Antonio vivía en la calle 25 de mayo entre Paz y Pringles. En 1837 publicó el “Cancionero Argentino”. Entre ese año y el siguiente colaboró en “La Moda”, en donde publicó entre otros trabajos “El hombre hormiga”. En 1948 fue redactor de “El Mosaico Literario”, que habría tenido un solo número de 258 páginas (ULANOVSKY, 1997).<br />En 1881 se publicó su libro “Buenos Aires desde setenta años atrás”, presente en toda antología de la literatura argentina. El 7 de noviembre de 1884 fue designado director de la Biblioteca, cargo que sólo pudo ejercer algunas semanas ya que murió el 14 de enero de 1885.<br />En 1874 el bohemio poeta Alfredo Wilde, primo de Victoria Wilde de Wilde, edita “El Libre” (GOLDAR, 1970) y en 1875, quien sería considerado el primer periodista profesional de Quilmes, Pedro Giménez, publica “El Quilmero” (RAMOS). Para entonces funcionaban en esta localidad bonaerense cuatro escuelas en las que se educaban unos 300 niños.<br />En 1876 “El Quilmero” comenta un concierto ofrecido por el español Francisco Navarro acompañado en piano por Antonio Barrera hijo, por entonces de edad cercana a los 17 años, el 2 de enero de ese año, en el Salón Municipal a las 21.30 horas, con una asistencia de 250 personas, público conformado aproximadamente en la mitad por “las señoritas y señoras del pueblo y chacras” (GOLDAR, 1970).<br />En este periódico se ha encontrado la firma “Sanguijuela”(GOLDAR, 1970)<br />Eran tiempos en los que Nicolás Avellaneda ocupaba la presidencia de la Nación y en los cuales nacía uno de los diarios en idioma extranjero llamados a ocupar un lugar preponderante en su género, “The Buenos Ayres Herald”.<br />Ese mismo año, José Andrés López, nacido en Barracas el 8 de mayo de 1851 y radicado en Quilmes en 1867, inicia su extensa actividad periodística con “El Independiente”, que editaría durante dos años. Luego publica “El Cáustico” y “El Eco de Quilmes” en 1878.<br />Han firmado artículos en este medio “Un paseante de Quilmes” y “R”. Publicó el primer comentario sobre teatro local en su edición del 8 de abril de 1877 (GOLDAR, 1970)<br />Autor del libro “Quilmes de Antaño”, un clásico en su género, José Andrés López moriría en esta ciudad en septiembre de 1932. En 1876 inició su actuación como periodista con “El Independiente” (hasta el 5 de mayo de 1878). Luego le siguen “El Cáustico” y “El Eco de Quilmes” en 1878. En 1880 hace “Nueva Época” (GOLDAR, 1970) [GOLDAR, 1970 refiere aparición de Nueva Epoca para 1880 mientras que RAMOS lo hace para 1903].<br />Hacia 1877 Felipe Amoedo era reelegido como presidente de la municipalidad. El domingo 8 de abril de ese año “El Independiente” hace una extensa reseña de la primera función teatral que se llevó a cabo en Quilmes. Comenta GOLDAR (1970), que el director de “El Quilmero”, Pedro Giménez, estaba disgustado con José Andrés López y los jóvenes aficionados al tearo que le hacían la competencia periodística don “El Independiente”, razón por la cual ofrece información escueta respecto de las presentaciones.<br />Con la firma de “R”, la crónica de aquella función teatral ofrecida por “El Independiente” señalaba: “El domingo a las ocho de la noche penetrábamos al salón Municipal donde habíamos sido invitados a una función dramática de aficionados. En el acto de nuestra llegada apenas algunas personas poblaban el salón, pero media hora después el telón se alzaba ante una numerosa y selecta concurrencia”.<br />Resultaban claros y amplios los elogios a los intérpretes: “El joven Casavalle nos ha dado el Colón más perfecto que hemos visto (se trataba del drama de Larra titulado "La agonía de Colón”), arrancando del público entusiasmado frenéticos y estrepitosos aplausos, el joven Silva en el papel de Juan y Amoedo en el de Gil estuvieron admirables, no dejando absolutamente nada que desear”.<br />El 23 de septiembre de aquel año, muere Antonio Barrera padre, razón por la cual “El Independiente” del día 30 de ese mes relata los últimos momentos de su vida, afirmando que “el señor Barrera se sintió desfallecer, y a no ser por el pronto auxilio que le prestó el señor Matienzo, hubiera caído en tierra”. “El Quilmero” del jueves 27 había aseverado que las últimas palabras de Barrera fueron dirigidas a su esposa diciendo: “esta vez creo que te dejo”.<br />Andrés Baranda vuelve a ocupar la titularidad del municipio en 1878, año en que aparecen “El Cáustico” y luego “El Eco de Quilmes”, ambos bajo la responsabilidad de José Andrés López .<br />“El Eco de Quilmes” se fundó el 8 de diciembre de 1878. Tuvo su administración en la entonces calle 23, casa de D. F. Lanatta. Dejó de aparecer desde el 30 de noviembre de 1879 hasta el 8 de febrero de 1880. Han firmado artículos en este medio “B. O.” y “G. A.” (este último, José Andrés López, según GOLDAR, 1970).<br />Desde el 6 de julio de 1879 “El Eco de Quilmes” anuncia que se realizarán ensayos para ofrecer una función dramática a beneficio del Club Fraternidad. Días más tarde anticipa que el grupo ha incorporado a la joven Carmencita Lanatta, quien en los carnavales de ese mismo año había sido iniciadora y cabeza de la primera comparsa de niñas llamada El Porvenir Quilmeño (GOLDAR, 1970).<br />Un año después de que José Berazategui accediese a los cargos de juez de paz y presidente de la municipalidad, en 1880, habría aparecido “Nueva Época” de José Andrés López. [GOLDAR, 1970 refiere aparición de Nueva Epoca para 1880 mientras que RAMOS lo hace para 1903]<br />Al advertirse el enfrentamiento entre el gobernador de Buenos Aires, Carlos Tejedor, y el presidente de la Nación, Nicolás Avellaneda, conocido como “Revolución de 1880”, en abril de ese año, “El Quilmero” llama a la cordura diciendo: “¿Cuál es el motivo de esta lucha que se prepara con aspecto tan siniestro...? Porque si los ejércitos argentinos tuvieran al frente un enemigo de otra nacionalidad a quien repeler con armas después de haberse agotado recursos diplomáticos...el pueblo empuñaría las armas con entusiasmo y bravura...pero hoy no se trata de eso...¡ Se trata de guerra civil !”<br />“El Quilmero del domingo 23 de enero de 1881 da cuenta de una función teatral en la que “estará a la vista del público el trabajo hecho por el modesto artista Don Carlos Morel, quien generosamente se ha prestado a pintar los tres telones, bastidores y demás del bonito proscenio levantado en el salón municipal”. Morel residía en Quilmes desde 1870 y falleció en este pueblo en 1894.<br />El mismo periódico demandaba un cambio de política impositiva cuando en su edición del domingo 10 de agosto de 1884, año en que comenzaba a editarse en La Plata el diario “El Día”, decía que “en la Capital se trata actualmente de aplicar un impuesto a las localidades de los teatros” y afirmaba que “es un error pues el teatro es un medio de instruirse deleitándose y así lo interpretan todos los pueblos cultos”.<br />El 25 de enero de 1885 una editorial de “El Quilmero” alude al Hospital de Caridad afirmando que “muchas veces nos hemos ocupado de la necesidad de dotar a Quilmes de un establecimiento de este genero”. El 26 de agosto de 1886 el mismo periódico anunciaba la próxima inauguración del hospital, y el 5 de septiembre da cuenta de las primeras 45 internaciones.<br />En 1885 se instala en Quilmes el servicio telefónico, que cuenta entonces con 22 abonados. Al año siguiente se establecería la primera comunicación telefónica de larga distancia, entre Buenos Aires y La Plata y en 1887 se separaba en Quilmes el juzgado de paz de la municipalidad.<br />ULANOVSKY (1997) menciona para el año 1886, la existencia en Quilmes de un periódico “El Quilmeño”, que después habría pasado a denominarse “El Priovincial” (en 1910). De ninguna de estas denominaciones existen referencias de los estudiosos locales, razón por la cual puede presumirse una confusión de parte de la fuente, pese a lo cual se ha querido referir por razones de honestidad intelectual.<br />El 10 de octubre de 1895, el presbítero Antonio de Rossi funda y dirige “La lectura” y cuatro años más tarde aparece la revista semanal “La Fama” .<br /><br /><strong><em>Primera mitad del siglo XX.</em></strong><br /><br />El cambio de siglo encuentra al país bajo la segunda presidencia de Julio A. Roca. En un contexto de crecimiento de la industrialización y de la inmigración, se generaba un amplio proletariado en el cual hallaban campo fértil las ideas libertarias de anarquistas y socialistas.<br />El año de 1900 ofrece, al 31 de marzo, la fundación en la Argentina de la Agencia Saporiti, primera agencia de noticias de América y sexta del mundo, producto de Emilio Saporiti. Dos años antes había comenzado a editarse en Bahía Blanca “La Nueva Provincia”.<br />Según RAMOS, y tal como se ha referido anteriormente, es en el año 1903 cuando aparece en Quilmes “Nueva Epoca”, publicación que GOLDAR (1970) ubica en 1880.<br />En 1904, cuando Manuel Quintana asume la presidencia de la Nación, José A. López hace lo propio con el gobierno municipal de Quilmes, ciudad cuyas calles habían comenzado a ser transitadas en enero por los vehículos de la empresa tranviaria de la Compañía Buenos Aires y Quilmes para transporte de pasajeros y cargas.<br />Ese mismo año resultaba electo Alfredo Palacios, quien sería el primer diputado socialista, cuyos ideales abrazaban entusiastas los sectores obreros y difundían con ahínco algunos intelectuales y periodistas. Así nacería en Quilmes “El Ariete”, fundado el 5 de julio de 1909, bajo la dirección de Jorge Silva y Raimundo Cavagnolo (RAMOS) o bajo la responsabilidad de Francisco Cúneo, según FIRPO.<br />Dispuestos a la confrontación de ideas a través de la tinta de imprenta, los conservadores generaban ese mismo año el periódico “La Comuna”, dirigido por Lucas Gracia que, según RAMOS, habría aparecido con el nombre de “El Platense” y luego adoptado la precitada denominación.<br />En su edición del 15 de agosto de 1910, el periódico local “La Aurora” decía que “Quilmes late con trepidaciones intensas en todas las manifestaciones del progreso humano”. El mismo año aparecía la publicación bimestral “La Voz del Pueblo” bajo la dirección de Plácido Mosteirin.<br />Un año más tarde se fundaba la Sociedad de Bomberos Voluntarios de Quilmes y aparecía el periódico “La Verdad”, dirigido por Rodolfo A. López que, según RAMOS, representaba a la juventud radical de la época.<br />Por su parte, Carlos Clark comenzaba a imprimir “El Heraldo”. También por entonces Santiago Uccello como director, junto con Monseñor Nicolás Esandi y Agustín Pedemonte fundaron “La Unión”, primer periódico de Bernal, que continuaría editándose hasta la segunda mitad de la década del sesenta (FIRPO).<br />Hacia 1914, dos años después de la instalación de la primera red de gas en el distrito, aparece el periódico “El Pueblo”, atribuido por RAMOS a la Unión Cívica Radical, cuyo candidato Hipólito Yrigoyen accedería a la presidencia de la República en 1916, año en el que Enrique Olivero fundaba “La Opinión” (FIRPO). Al año siguiente Pedro Berbeni dirigía la publicación “El Hogar Quilmeño”.<br />La década del veinte se inicia en Quilmes con el periódico “El Régimen” y en enero de 1922 Máximo Salaberry funda “Crónica”, en donde se desempeña como secretario de redacción mientras su hermano Bernabé asume la dirección. De aparición sabatina, el medio se editaba en Bernal y acompañaba los intereses de la población de ese sector geográfico quilmeño.<br />Ese mismo año aparecen también “El Plata”, primera revista ilustrada que desde el 14 de julio pone en la calle Emilio Mauri Casabal (quien cinco años después editaría la “Nueva Guía ABC” –3 de junio de 1927-); la revista “Vida Nuestra”, bajo la responsabilidad de Valentín Zamora y el periódico “La Reacción” de Manuel Huisi.<br />También en 1922, el 22 de abril, el ingeniero Roverano y el aficionado Manuel Ales, en receptores construidos por ellos recibieron la primer transmisión radiotelefónica en Quilmes. El 28 de agosto de 1920 había nacido la radio en la Argentina y el Club Social tenía un receptor desde julio de 1922. También por entonces, don Carlos Braggio iniciaba en Bernal las transmisiones de su estación 462 o CB8, que difundía música y que en 1924 se comunicó directamente con un radioaficionado de Nueva Zelanda estableciendo un record mundial de distancia en la época (GOLDAR, 1970).<br />GOLDAR (1970), cita con fecha 9 de julio de 1922 la publicación en “La Verdad” de un artículo de José Andrés López titulado “Versificadores de antaño” ( CRAVIOTTO cita por su parte números de esta publicación en los años 1935 y 1941). El 5 de junio de 1925 Braulio Dimas Etcheverry crea “La Palabra” de Berazategui.<br />Decía José Andrés López respecto de aquellos poetas quilmeños de la segunda mitad del siglo XIX que “más fácil resulta hallar quien no haya roto un plato en su vida que un hombre con veinte años cumplidos que no haya hecho versos o presumido que los hace” y que la juventud quilmeña de cincuenta años atrás “no podía ser una excepción a la regla y hacía versos, con el mismo fatalismo que los niños rompen platos”, advirtiendo que “siendo el amor su musa inspiradora ¿ a qué otro género que el amatorio habían de pertenecer los versos de aquella juventud, que vivía en su aislamiento, como los calamares en su tinta, sin fiestas, bailes, paseos, ni nada que sirviera para facilitar el comercio social entre la juventud de uno y otro sexo?”.<br />Asimismo comentaba que “la aparición del primer periódico llenó de regocijo a cuentos sentían arder en sus adentros y eran todos, la llama amorosa de sus ansias y que rabiaban por enterar del estado de su corazón a la causante, o causantes de sus amorosos afanes”, porque los periódicos de aquellos tiempos albergaban a aquellas creaciones del corazón y la pluma (GOLDAR, 1970).<br />Al año siguiente, Carlos Clark y Augusto Giordanelli fundaron y dirigieron la primera revista de Bernal llamada “La Pluma” (FIRPO).<br />El primer día de noviembre de 1927, don José Antonio Blanco, que se había iniciado en “Crónica” de Bernal (FIRPO), fundaba el diario “El Sol”, entonces con administración y redacción en el 279 de la principal arteria quilmeña, la calle Rivadavia. Su slogan, “esquema de nuestro tiempo” resultaría admonitorio en cuanto a la adaptación a las modificaciones del país y del mundo que lo condujeran a transformarse en una empresa de multimedios que todavía existe y, entre otras cosas, edita ese diario.<br /><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378188465248424162" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; CURSOR: hand; HEIGHT: 40px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEisgiaKv3Rc01Hlq5xHS7c9PJ93fVl9Qu1mOvUAdiDbBl6zVMazTKzkc7dbPh609_e_eV6JPay1JQNsn-MXSp0zSwJstY-PNOG9U22aKBmAE38kyWTBHpnyFoYgMfx5f7ckVEAWV9UpE58/s400/logo_elsol.jpg" border="0" /> Tras la muerte de su fundador y durante un extenso período, la dirección del diario “El Sol” estuvo a cargo de Lona H. H. S. de Blanco. </div><br /><div>En 1930 se inaugura el Colegio Nacional de Quilmes y comienza a funcionar la Compañía Microómnibus Quilmes, con taxis colectivos que hacen el recorrido entre Bernal Oeste y Mitre y Dorrego.<br />Un año más tarde, cuando se habilita el sistema de aguas corrientes, comienza a editarse “El Demócrata” bajo la dirección de Mariano Castellanos Guido. Fundado el 29 de marzo de 1931, el periódico respondería, según RAMOS, al pensamiento conservador.<br />En 1932 hace su aparición la revista “Cultura”, de Bernal (FIRPO) y en abril de 1933, Julio E. Faggiano funda y dirige el semanario “Vida Quilmeña”. Ese mismo año aparece el periódico socialista “La Plebe” (RAMOS).<br />Hacia 1936, CRAVIOTTO cita números de una publicación denominada “Renovación”, cuya fundación y dirección FIRPO atribuye a Adela García Salaberry.<br />Al año siguiente, Juan Noell funda el periódico “La Zona”. Sin fecha clara de aparición, existen referencias a las publicaciones “Nueva Epoca”, “El Libre” y “Actualidad Quilmeña”.<br />En 1940, dos años después de la creación de la Federación Argentina de Periodistas y del establecimiento del 7 de junio como día del profesional de prensa, se funda en Quilmes, el 4 de enero, la publicación “Vida Católica”, cuya dirección está a cargo de Damián Spagnolo.<br /></div><div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ3F5HN0Lk-2VkJ4DGYGU77bCGBsfsH_IEyYV2rGsUxdTqSejPYVe5pfD3IPGF_TejyOVX9uMjM7ZOYi2g8k80Bd65nZy-trBy6yTQ34a59smhdscpwSlTHsa9QXxgVOavezCwPgkxt1w/s1600-h/TITULO.JPG"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378186061413397330" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 315px; CURSOR: hand; HEIGHT: 95px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ3F5HN0Lk-2VkJ4DGYGU77bCGBsfsH_IEyYV2rGsUxdTqSejPYVe5pfD3IPGF_TejyOVX9uMjM7ZOYi2g8k80Bd65nZy-trBy6yTQ34a59smhdscpwSlTHsa9QXxgVOavezCwPgkxt1w/s400/TITULO.JPG" border="0" /></a><br /></div><div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ3F5HN0Lk-2VkJ4DGYGU77bCGBsfsH_IEyYV2rGsUxdTqSejPYVe5pfD3IPGF_TejyOVX9uMjM7ZOYi2g8k80Bd65nZy-trBy6yTQ34a59smhdscpwSlTHsa9QXxgVOavezCwPgkxt1w/s1600-h/TITULO.JPG"></a></div><div></div><div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ3F5HN0Lk-2VkJ4DGYGU77bCGBsfsH_IEyYV2rGsUxdTqSejPYVe5pfD3IPGF_TejyOVX9uMjM7ZOYi2g8k80Bd65nZy-trBy6yTQ34a59smhdscpwSlTHsa9QXxgVOavezCwPgkxt1w/s1600-h/TITULO.JPG"></a></div><div></div><div></div><div></div><div></div><div></div><div></div><div></div><div></div><div></div><div></div><div></div><div>“Con el hacha de mi fe iré cortando la maleza del camino” rezaba el periódico “La Lealtad” que el 16 de mayo de 1942 fundaba y dirigía Alfredo A. Faggiano, con redacción y administración en Sarmiento 672 de Quilmes. Sus páginas de un blanco que diferenciaba su papel de aquel sobre el que normalmente se imprimen los diarios, albergaron no solo información y opinión periodística sino una amplia gama de producción literaria zonal.<br />GOLDAR (1979) hace referencia a una reunión acaecida en el hospital local en junio de 1942, en ocasión de una visita de los periodistas quilmeños al nosocomio en compañía de su director, doctor Isidoro G. Iriarte y otras autoridades. En la ocasión, según el autor, se hizo una recorrida por las instalaciones previa al servicio de un vino de honor y estuvieron presentes Oscar D. Sanz (La Prensa), Guillermo A. White (La Nación), José A. Faggiano (El Día), Juan Cassiau (La Razón), Francisco Urrestarazu (El Mundo y El Radical), José A. Blanco (El Sol), Dr. Ernesto Garibotti (La Reacción), Juan Carlos Nardi (El Censor), Alfredo A. Faggiano (La Lealtad), Mordy Strugo (Urraca), Julio E. Faggiano (Vida Quilmeña, Norte y Agencia ANDI), José Lema García (LAMA), Tomás Aguilar (La Libertad), Juan Noell y David Jusid (La Zona), Antonio Sierra (Don Bosco), Máximo Salaberry (Crónica, El Comercio de Florencio Varela y La Palabra de Berazategui), Máximo García Zárate (Sur) y M. Rodríguez (El Orden).<br />Para 1943, CRAVIOTTO cita la existencia de la publicación “Quilmes Presente”.<br />En 1944 hace su aparición “Quilmeslandia” y al año siguiente, mientras en Buenos Aires Roberto Noble funda el diario “Clarín”, nace en Quilmes el periódico “Norte” y dos años más tarde, en 1947 hace su aparición “El Heraldo”.<br /><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj-y88AIbI3i9b_aySKngyF4Sn9h9fU7J57rk1e3YwsJlqqcHA06e3HUAT87TsREZot3p7U8yvmfTqDlzv0l4DFaCkmWwfAjr_-LTJHSgiZNQB4shEJEq7cF7YXxgSUlGlzxnp_KZP_gUI/s1600-h/CARNET+CIRCULO+DE+LA+PRENSA+DE+QUIL..jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378193586088290978" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 310px; CURSOR: hand; HEIGHT: 199px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj-y88AIbI3i9b_aySKngyF4Sn9h9fU7J57rk1e3YwsJlqqcHA06e3HUAT87TsREZot3p7U8yvmfTqDlzv0l4DFaCkmWwfAjr_-LTJHSgiZNQB4shEJEq7cF7YXxgSUlGlzxnp_KZP_gUI/s400/CARNET+CIRCULO+DE+LA+PRENSA+DE+QUIL..jpg" border="0" /></a><br />Hacia el cierre de la década, el 4 de julio de 1949 es fundado el “Círculo de la Prensa de Quilmes”, lugar de encuentro de los periodistas de esta ciudad que tiene en su haber épocas de profunda camaradería profesional por encima de diferencias de cualquier tipo, cuya última sede todavía se encuentra en Manuel Quintana 1407.<br />En los setenta el Círculo de la Prensa de Quilmes tenía Personería Jurídica N° 5974 y estaba registrado como entidad de bien público a nivel provincial con el número 3333 y municipal con el 521.<br />Ayer, hoy y siempre están presentes en su espíritu Antonio Alberto Moglia, Omar Andragnez, Ernesto Fernández Navales, José López Comendador, Jorge García, Alcibíades Rodríguez, Leticia Corsiforti, Juan Ruano, José M. González, Domingo Costa, Víctor Alberto Giordano, Jorge Berton, Pedro Colucchio, David M. Tolzes, Daniel Eduardo Cacace, Vicente Sangiovanni, Santiago Flamini, Aniceto Castaño y tantos otros.<br /><br /><strong><em>Segunda mitad del siglo XX y albores del siglo XXI.</em></strong><br /><br />La década del cincuenta encuentra al país en el apogeo del régimen peronista. Juan Domingo Perón había asumido la presidencia de la Nación el 4 de junio de 1946 y transcurridos cuatro años consolidaba una gestión de particulares características sobre la base de un gran apoyo popular.<br />Originado en la vecina localidad de Florencio Varela, pero con distribución y receptoría de publicidad y redacción en Andrés Baranda 676 de Quilmes, Alberto Masserdotti lanza en 1951 el periódico “Cruz del Sur”.<br />Al año siguiente de la inauguración del Museo Histórico Regional “Almirante Guillermo Brown”, acaecida el 29 de julio de 1954, hace su aparición “El Plata” y acaso “Actualidad Quilmeña”, citado por AGNELLI pero del cual no se tiene información precisa respecto de la fecha de inicio.<br />El 5 de febrero de 1962 Jorge Brown funda y dirige “El Vecino”. Un año más tarde es inaugurado el Museo Municipal del Transporte “Don Carlos Hillner y Decoud” y se produce el fallecimiento del doctor Isidoro G. Iriarte. El diario “El Sol” del 2 de mayo de 1963 dice al respecto que “la noticia corrió, inflamada de pena, hacia todos los rumbos” porque la muerte alcanzó a un apóstol de la medicina “que durante más de medio siglo dedicó todas sus horas con obsesión apasionada al nobilísimo ejercicio de la humanitaria profesión”. Agrega que “su figura de asceta, de paso rápido, mirada perdida y nerviosa agilidad, se popularizó hasta en los últimos rincones del partido, donde se le vio a todas horas y con todos los tiempos, corriendo hasta el lecho de sus enfermos” (GOLDAR, 1979).<br />El año 1965 ve nacer al semanario “Enfoques” de Florencio Varela, dirigido por Domingo Costa y volver en una segunda época al “Cruz del Sur” de Masserdotti.<br />Los años setenta se inician con la aparición de la revista “Visión Sur” dirigida por José M. González, nombre que no mucho después adoptaría un periódico en el cual el propio González actuaría como subdirector.<br />Presentado como “tribuna independiente para expresar ideas, lanzar iniciativas, apoyar y difundir obras de las instituciones de bien público” y como periódico “social, cultural e informativo”, Juan Boric funda “Reflejos”, el 1 de septiembre de 1971, cuya circulación se restringía a Quilmes Oeste y Bernal Oeste. Al año siguiente es inaugurado el Puente 14 de agosto sobre las vías del ferrocarril.<br />Con un amplio staff que lo secunda, el locutor y periodista Omar Andragnez funda y dirige en 1973 el periódico “Visión Sur”. Como se dijo, la subdirección queda a cargo de José M. González. La secretaría de redacción es fue responsabilidad de David M. Tolzes y fueron periodistas Pedro Colucchio, Leticia Corsiforti (que más tarde dirigiría el medio), Fidel Garrido y Juan Ruano.<br />También contaba el ambicioso proyecto de prensa con un consejo asesor de notables de la prensa regional tales como Manuel Ales, Jorge Barton, Domingo Costa, Carlos E. Domínguez, Víctor Alberto Giordano, Eleodoro Lemos, Luis Otamendi y Alcibíades Rodríguez. La redacción funcionaba en la calle Alsina 76 de Quilmes.<br />En 1975, Santiago Servín, que ya había sido responsable del periódico “El Lucero”, dirige junto a Luis Barbieri la publicación “La Voz de Solano”, dedicada al tratamiento de cuestiones de interés comunitario.<br />El 20 de octubre de ese año es asesinada la joven periodista de ese medio Ana María Estevao, hecho que es denunciado por “La Voz de Solano” en su siguiente y última edición.<br />Nacido en 1925 en Zenón Cué, Paraguay, Servín vivía en un barrio humilde de San Francisco Solano, en donde editó los periódicos “El Lucero” y “La Voz de Solano”. Santiago Servín fue secuestrado de su casa el 7 de septiembre de 1976, convirtiéndose en un “desaparecido”. (UTPBA)<br />El día 19 del mes de septiembre de 1976 se crea el Obispado de Quilmes y al año siguiente es cuando la calle Rivadavia es convertida en peatonal. </div><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjG7K4Im4alKIBh8K-IltlP4Q41RxwhUNCi-nF8G4SBjE8EXPBe6Uw5sFyTiyP1ekLixSUZfBGqThQuKUjRjH6oRrUBUY8yZVyOXhv0z6y3CDHG8iSuCmtQrgHB4cOEQJF49AbRO4HNI9Y/s1600-h/EL+PERIODISTA.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378197450150876242" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 346px; CURSOR: hand; HEIGHT: 165px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjG7K4Im4alKIBh8K-IltlP4Q41RxwhUNCi-nF8G4SBjE8EXPBe6Uw5sFyTiyP1ekLixSUZfBGqThQuKUjRjH6oRrUBUY8yZVyOXhv0z6y3CDHG8iSuCmtQrgHB4cOEQJF49AbRO4HNI9Y/s400/EL+PERIODISTA.jpg" border="0" /></a><br /><div><br />También en 1977 ven la luz “El Periodista”, fundado por Omar Andragnez el 7 de junio y posteriormente dirigido por Celia Nasti con el slogan “con la valentía de un argentino” y “Crónica Semanal de Bernal” de Jorge Fraga Villas.<br /></div><div>En 1979 el matutino porteño “Diario Popular” crea la edición regional para los partidos de Quilmes, Berazategui y Florencio Varela que se distribuye gratuitamente con ese medio bajo la denominación de “El Quilmeño” y con la dirección de Alberto S. Albertengo, también responsable del diario que lo incluye. </div><div></div><br /><p><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghef3ciOuUdLi9xNMY5_APMAh1d_FGMkHiUSRWCXJEgAmNo5On-MO2WLZX_FwOuTDjbVU2tmIc5oqyuE7ixrKhYrpFyYTR4Y1FbHYVr4kfVnVj9wZ4eBSV2Alb2n30oNYMQ95p6gV7rvQ/s1600-h/perspectiva1.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378186704705853538" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 230px; CURSOR: hand; HEIGHT: 98px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghef3ciOuUdLi9xNMY5_APMAh1d_FGMkHiUSRWCXJEgAmNo5On-MO2WLZX_FwOuTDjbVU2tmIc5oqyuE7ixrKhYrpFyYTR4Y1FbHYVr4kfVnVj9wZ4eBSV2Alb2n30oNYMQ95p6gV7rvQ/s400/perspectiva1.jpg" border="0" /></a>El 15 de noviembre de 1982 se funda “Perspectiva Sur”, periódico bimensual dirigido por Raúl David Caballero que, para 1986 contaba con David A. Kohler y Ruben Bagini como redactores y tenía oficinas en calle Alvear 780.<br />Tabloide de 20 páginas en blanco y negro, agregó en algún momento color celeste y con posterioridad trocó al rojo. El 15 de marzo de 1994 se transformó en diario y hoy forma parte de la empresa multimedial homónima que integra al canal 5 de televisión abierta y la emisora FM 103.9, con sede en Mitre 815.<br />También en 1982, el 29 de septiembre de 1982 en San Francisco Solano aparece “La Ciudad”, cuya directora era Carmen Minniti de Uriz y tres años más adelante Juan Carlos Altamirano hace “La Edición Imposible”. Entre tanto, al 7 de mayo de 1985 “Visión Sureña” editaba su número 18 del primer año de vida.<br />Bajo la dirección de Juan Carlos Costa y con Luis Laugé como secretario de redacción, aparece en enero de 1987 la revista “Hola Quilmes”, impresa con tapa a cuatro colores, con dimensiones de 20 por 28 centímetros y 32 páginas. Se trata de una publicación gratuita que se presenta como mensual en su primer número pero su segunda aparición corresponde al bimestre febrero-marzo del mismo año.<br />Al año siguiente nace el periódico “Nuevo Horizonte” bajo la responsabilidad de Pedro Navarro, cuyo primer número corresponde al día 5 de octubre (RAMOS). </p><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhBq5UOk3-CIKWw-B1w9vFAk25hdEXydn_m6dUK5RsYzWBdKdnntlCfHC7XFy8z1UAWr7M5vAbwMAA6o8804WH_qQxmxIQlzVL0e8NxPGmvqxMnisZ72vz0cP_vCjxfP4EeSOQ-nYV_jmI/s1600-h/prensa+barrial.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378194583040088130" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 297px; CURSOR: hand; HEIGHT: 400px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhBq5UOk3-CIKWw-B1w9vFAk25hdEXydn_m6dUK5RsYzWBdKdnntlCfHC7XFy8z1UAWr7M5vAbwMAA6o8804WH_qQxmxIQlzVL0e8NxPGmvqxMnisZ72vz0cP_vCjxfP4EeSOQ-nYV_jmI/s400/prensa+barrial.jpg" border="0" /></a> <p><br />También en octubre, pero de 1991 comienza a editarse “Prensa Barrial” con Marta Alicia Armella a cargo de la dirección y Jorge Eduardo Padula Perkins como redactor. Periódico mensual de distribución gratuita en formato de 16,5 por 21,5 centímetros, imprime mil ejemplares por edición, con ocho o doce páginas. Se editan en total 26 números entre su fundación y el año 1993.<br />La claridad de sus objetivos se aprecia en el primer editorial, que anuncia la presencia del periódico “para ser el medio de comunicación de su zona de influencia, una porción concreta de nuestra ciudad, con sus realidades, sus actividades y su necesidad de comunicación”. Para ofrecerse como “un medio que, dentro del marco ético de la profesión periodística, actuará como órgano independiente al servicio del interés vecinal”.<br />Por su parte, en 1992, Dardo Abbatista homenajea al pueblo originario que, trasladado desde la provincia de Tucumán hasta estos confines, diera origen al poblado, editando “Los indios Kilmes”.<br />Dos años más tarde, la Comisión Asesora de Cultura, creada por Decreto Municipal 1318/93 pone en circulación la revista “Quilmes Generando Cultura”, que dirige Ariel Bucich. Integran su consejo editor Palmira Bollo Cabrios (Junta de Estudios Históricos de Quilmes), Julieta Firpo (Instituto Inmaculada Concepción), Leticia Corsiforti (Escuela Nacional Normal Superior de Quilmes y FM Sur), Liliana Nicótera (Televisora Belgrano), Enrique Cicciarelli (Secretaría de Cultura y Medio Ambiente).<br />Se trata de una publicación mensual de 30 páginas, que se distribuye gratuitamente entre las entidades culturales del partido de Quilmes, con formado de 20 por 28 centímetros y tapa color en cartulina satinada.<br />También en 1994 aparece “Tiempo Sur”, periódico dirigido por Miguel A. Morelli que, junto con la Librería Ramos inicia la edición de una colección de cuadernos sobre temas históricos locales.<br />Por esos tiempos, tal vez en la segunda mitad de la década del noventa, aparece el periódico “5 Días”, llamativo por sus reducidas dimensiones y que ofrece también una versión digital, ambas bajo la dirección de José Haro.<br />A fines de la década del noventa comenzó a publicarse el tabloide quincenal de ocho páginas “Visión 12”, cuyo director y propietario fue Horacio Ramiro Gómez Díaz. El diseño estuvo a cargo de Claudia Moreno y se identificaron como colaboradores a Yael, Gastón, Ary, Zoe y Pancho, sin que se conozcan sus nombres y apellidos, como así también a P. Arcanjo y F. Sierra, esta última persona a cargo de las correcciones.<br />Ya en el año 2000 nace “El Suburbano”, cuyo director es Adrián Di Nucci. Creado el 25 de mayo de 2000, es un tabloide de 16 páginas y distribución gratuita que bajo el slogan “observamos todo, informamos todo” asume un fuerte compromiso político. Secundan al director Federico Fioretta y Hernán Gersberg como jefe y secretario de redacción respectivamente y un grupo de redactores formado por Carlos Doallo, Eliana Paniagua, Juampi Pesce, Matías Colantoni, Soledad Oliver, Martín Acedo.<br />También en el 2000 aparece “Pulso 33”, con redacción en la calle Belgrano 56 de la localidad de Bernal. Lo dirige Horacio Caballo mientras la jefatura de redacción está a cargo de Ruben H. Facci. Su editor es Alejandro D. Zajac y sus redactoras Eliana Klotschan y Maricel Seeger. Los deportes son responsabilidad de Juan M. Erausquin, la corrección de Patricia Walk, la diagramación de Laura Di Bella y la fotografía de Gastón Masciotta.<br />En el 2004 y con el slogan “Estamos cerca, informamos mejor”, aparece en Florencio Varela y con distribución también en los partidos de Berazategui, Quilmes, Almirante Brown y Avellaneda, el diario “Info Sur”, de la empresa Surmedios S. A. y bajo la dirección de José Cáceres. Se trata de un tabloide de 16 páginas, con tapa y contratapa a cuatro colores, cuya redacción se ubica en Dr. Sallarés 454 de Florencio Varela y tiene un precio de tapa de un peso para septiembre de 2005.<br />Entre los años 2004 o 2005 comienza a editarse “SIC” bajo la dirección general de Walter Queijeiro y con la colaboración de German Paoloski, Adrián Puente, Fernando Carlos, Mariano Caballero, Marcelo Fiasche, Paul Showman.<br />Fundado el 1 de junio de 2005 y con la empresa CDD - Servicio de Difusión como editora responsable, aparece “Informe Kilme”, periódico quincenal de tamaño tabloide y ocho páginas subtitulado “Nuestra patria chica”.<br />La dirección está a cargo de Daniel Delgado y la dirección periodística es responsabilidad de Raúl Leguizamón. Colaboran en la redacción Norberto Alfaro, Silvia Barrientos, Miguel Bogado, Gastón Pinto. Sus oficinas funcionan en Vicente López 1356 de Quilmes Oeste.<br /><br /><strong><em>La prensa, siempre la prensa.</em></strong> </p><p><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvxCCmUS5wokNxkXtFBAGcmKz_F4EuxqIi2vOwb1Wfyiad-K73aZwIZERMF7NVbxmCLpZsxCQmR8YQ6uMysTRld-bTIKC-IRiu2cXyAsEd6w_Db1-5IXbfNAYcWLvmYcNnkcXsMmCSUr0/s1600-h/TICKET.JPG"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378196935021220658" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 314px; CURSOR: hand; HEIGHT: 194px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvxCCmUS5wokNxkXtFBAGcmKz_F4EuxqIi2vOwb1Wfyiad-K73aZwIZERMF7NVbxmCLpZsxCQmR8YQ6uMysTRld-bTIKC-IRiu2cXyAsEd6w_Db1-5IXbfNAYcWLvmYcNnkcXsMmCSUr0/s400/TICKET.JPG" border="0" /></a><br />Periódicos, diarios y revistas constituyen la faceta de raigambre más antigua del periodismo en Quilmes, que acompañó siempre, en ocasiones adhiriendo a las gestiones de gobierno y en otras con una mirada crítica, el desarrollo de la social, político, económico y cultural de la población.<br />Así lo han hecho los medios gráficos en la mayoría de los pueblos de la provincia de Buenos Aires, aun en los más pequeños en cuyo seno no ha faltado una imprenta con opinión. </p><p>Y también lo hacen hoy, junto a las emisoras y productoras de radio y televisión y los sitios en Internet que, proyectados al mundo, mantienen el interés local.<br />Como sangre fluyendo por las venas de los pueblos para mantener su vida misma, a diario circulan las informaciones y opiniones que propone la prensa, siempre la prensa.<br /><br /><strong><em>Bibliografía y fuentes:</em></strong><br /><br />- Agnelli, Héctor Chalo (2004): Maestros y escuelas de Quilmes 1666 – 2004, Jarmat, Bernal.<br />- Agnelli, Héctor Chalo (2008): Dr. José Antonio Wilde. Médico, periodista y educador quilmeño. Biografía 1814-1885, Jarmat, Bernal.<br />- Craviotto, José A. (1969): Quilmes a través de los años, Municipalidad de Quilmes, Quilmes.<br />- Firpo, Felipe Jorge –recopilador- (1981): Reseña histórica de la ciudad de Bernal, Biblioteca Popular José Manuel Estrada. Bernal.<br />- Goldar, José Abel (1970): Panorama de las artes quilmeñas, Biblioteca Pública Municipal “Domingo Faustino Sarmiento”, Municipalidad de Quilmes, Quilmes.<br />- Goldar, José (1979): Historia de la Sociedad Hospital de Quilmes “Dr. Isidoro G. Iriarte”, Municipalidad de Quilmes, Dirección de Cultura, Quilmes.<br />- Ibañez, José C. (1978): Historia de las instituciones políticas y sociales argentinas (desde 1810), Troquel, Buenos Aires.<br />- Luna, Félix (2002): Breve historia de los argentinos, Planeta Bolsillo. Buenos Aires.<br />- Padula Perkins, Jorge E. (1994): Quilmes y sus medios gráficos. En “Quilmes Generando Cultura”, año 1, número 5, agosto de 1994.<br />- Padula Perkins, Jorge E. (2006): Crónica del periodismo gráfico quilmeño. En Revista Historia, año XXVI, número 101, marzo-mayo de 2006.<br />- Ramos, Nilda I. (1994): Quilmes cronología, colección Fichas de Historia/1, Librería Ramos – Tiempo Sur, Quilmes.<br />- Ulanovsky, Carlos (1997): Paren las rotativas. Historia de los grandes diarios, revistas y periodistas argentinos, ESPASA, Buenos Aires.<br />- Ulanovsky, Carlos y otros (1999): Días de radio. Historia de la radio argentina, Espasa Calpe, Buenos Aires.<br />- Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (1998): Los periodistas desaparecidos, UTPBA-Norma, Buenos Aires.<br />- Historia de la literatura argentina (1980). Tomos I y II. Centro Editor de América Latina, Buenos Aires.<br />- Diccionario Enciclopédico Ilustrado Clarín (1997), Arte Gráfico Editorial Argentino. Buenos Aires.<br />- Exposición de medios gráficos locales en Museo Fotográfico Municipal, Julio de 2005.<br />- Informe Kilme, Año 1, números 5 y 6, primera y segunda quincena de septiembre de 2005.<br />- Info Sur, año 2, número 347, 29 de septiembre de 2005.<br />- El Periodista. Año 1, número 7<br />- El Sol. N° 12.970, 23 deagosto de 1974.<br />- El Suburbano. Año V, número 224, 23 al 30 de junio de 2005.<br />- El Quilmeño. Año 26, número 8753, 24 de agosto de 2005.<br />- Hola Quilmes. Año I, número 1,enero de 1987.<br />Año I, número 2, febrero-marzo de 1987.<br />- La Lealtad. Año XXXI, número1303, 28 de abril de 1973.<br />- Perspectiva Sur. Año 4, número 74, 2da. Edición de marzo de 1986.<br />Año 23, número 4082, 7 de julio de 2005.<br />- Prensa Barrial. Colección completa de 26 números entre 1991 y 1993.<br />- Reflejos, número de 1972.<br />- Quilmes generando cultura. Año I, número 5, agosto 1994.<br />- SIC. Año 2, número 9, 22 de junio de 2005.<br />- Visión 12, año 7, número 88, 22 de diciembre de 2005.<br />- Visión Sur. Año 1, número 25, 9 de marzo de 1974.<br />- <a href="http://www.elmurocultural.com/Columnistas/cdemena08.html">http://www.elmurocultural.com/Columnistas/cdemena08.html</a> [Consulta: 6 de agosto 2005]<br />- <a href="http://www.bernal.com.ar/historia_bernal/curiosidades.htm">http://www.bernal.com.ar/historia_bernal/curiosidades.htm</a> [Consulta: 6 de agosto 2005]<br />- <a href="http://www.bibnal.edu.ar/paginas/galeriadirec.htm#wilde">http://www.bibnal.edu.ar/paginas/galeriadirec.htm#wilde</a> [Consulta: 6 de agosto 2005]<br />- <a href="http://www.paginadigital.com.ar/articulos/quilmes/pulso56.html">http://www.paginadigital.com.ar/articulos/quilmes/pulso56.html</a> [Consulta: 1 de septiembre de 2005]<br /><br /><span style="font-size:78%;">Fuentes:<br /><br />Ponencia homónima presentada por el autor en el Undécimo Congreso de Historia de los Pueblos de la Provincia de Buenos Aires, Bahía Blanca, 19 y 20 de abril de 2007. Instituto Cultural de la Provincia de Bs. As. – Archivo Histórico Dr. Ricardo Levene, edición digital multimedia, La Plata, 2007, ISBN 978-987-05-3268-2.</span><br /><span style="font-size:78%;"></span></p><p><span style="font-size:78%;">En línea.: </span><a href="http://elquilmero.blogspot.com/2009/07/el-periodismo-grafico.html"><span style="font-size:78%;">http://elquilmero.blogspot.com/2009/07/el-periodismo-grafico.html</span></a><span style="font-size:78%;"> . </span></p></div></div></div></div></div></div></div></div>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-42762269154126632022009-09-05T16:35:00.000-07:002009-09-05T16:52:10.151-07:00El periodista José Hernández<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiv392fGJDBQCd47_IEiqKJHpcMC_bD2MyIfFUEgvNFBZlD5P3XNqoYSUUI0j0ziNP9Poa80qOC8z_xU3Ov8ih3mOecqCuyh_r5FKh8FMlzCV_AqkT_st2R3EPC7kdA7Zn8rluiseCwY-Y/s1600-h/jose+hernandez.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378135067791271474" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 102px; CURSOR: hand; HEIGHT: 127px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiv392fGJDBQCd47_IEiqKJHpcMC_bD2MyIfFUEgvNFBZlD5P3XNqoYSUUI0j0ziNP9Poa80qOC8z_xU3Ov8ih3mOecqCuyh_r5FKh8FMlzCV_AqkT_st2R3EPC7kdA7Zn8rluiseCwY-Y/s400/jose+hernandez.jpg" border="0" /></a><br /><div><span style="font-size:78%;">Por: Jorge Eduardo Padula Perkins<br /></span><br />* <span style="font-size:78%;">Primer Premio, rubro ensayo en el Certamen de las Artes, las Ciencias y el Pensamiento 1990, organizado por la Subsecretaría de Cultura de la Provincia de Buenos Aires.<br /><br /></span>ÍNDICE<br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#introduccion">INTRODUCCIÓN</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo1">Capítulo I - INFANCIA Y JUVENTUD DE JOSE HERNÁNDEZ</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo2">II - LA REFORMA PACÍFICA (Buenos Aires, 1856).</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo3">III - EL NACIONAL ARGENTINO (Paraná, 1860).</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo4">IV - EL ARGENTINO (Paraná, 1860).</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo5">V - EL ECO DE CORRIENTES (Corrientes, 1863).</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo6">VI - LA CAPITAL (Rosario, 1868).</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo7">VII - EL RÍO DE LA PLATA (Buenos Aires, 1869).</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo8">VIII - LA PATRIA (Montevideo, 1872).</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo9">IX - OTROS MEDIOS (Buenos Aires, 1873-1876).</a><br />a- EL PLATA (1873).<br />b- LA LIBERTAD (1875).<br />c- El BICHO COLORADO (1876).<br />d- MARTIN FIERRO (1876)<br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo10">X - LOS ÚLTIMOS AÑOS</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#capitulo11">XI - PALABRAS FINALES</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#notas">Notas</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#bibliografia">Bibliografía Citada</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#bibliografiageneral">Bibliografía General y de Referencia</a><br /><a href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6928572749550321474#piedeimprenta">Pie de imprenta original.</a><br /><br />ADVERTENCIA:<br />Las citas y notas del presente trabajo se hicieron en orden a las normas tratadas por FUENTES PUJOL en su libro <<la>> (Barcelona: ATE, 1981).<br />En las transcripciones textuales de artículos de José Hernández aparecidos en la prensa se han respetado las grafías originales por razones de fidelidad.<br /><br /><a name="introduccion">INTRODUCCIÓN: </a><br />La persona de José Hernández ha estado siempre vinculada y férreamente a la del protagonista de su máxima obra poética. Tanto es así que al informar sobre su fallecimiento un diario de La Plata titulaba: «Ha muerto el senador Martín Fierro».<br />Pero Hernández no limitó su actividad a las letras, ni restringió su pluma a la poesía. Se forjó en las faenas camperas, tomó las armas, fue oficial de la contaduría de la Confederación, taquígrafo del Senado en Paraná, secretario privado del general Pedernera durante su vicepresidencia, ministro del gobernador correntino Evaristo López, librero, impresor, legislador bonaerense en ambas Cámaras y fecundo periodista.<br />Martínez Estrada ( 1980, p. 48) sintetiza su personalidad señalando que «Hernández es cuatro cosas, por la naturaleza de su ser, de su carácter: militar, periodista, político y poeta. Las cuatro manifestaciones activas de su psique corresponden a un mismo tipo extravertido, y tres, -militar, periodista y político- por igual al combatiente».<br />Respecto de ese Hernández batallador que por convicciones políticas escribió artículos y fundó periódicos existen referencias biográficas diversas pero ninguna que, marginando el poema gauchesco y aún la actividad política estrictamente tal, sintetice la totalidad de su labor en la prensa. Es esta entonces la intención del presente trabajo: reunir, aunque en forma breve, los datos de la labor periodística hernandiana de todos los medios en los que hubo actuado, hasta el presente dispersos, en un cuerpo único y coherente.<br />La tarea se ha desarrollado sobre la base de la bibliografía existente y documentado, en la medida de las posibilidades, con las fuentes periodísticas que en cada caso correspondieran.<br />En consecuencia con el objetivo propuesto la obra ha sido estructurada en capítulos en los que se ha priorizado el quehacer periodístico en forma absoluta y que en su mayoría llevan por título los nombres de cada medio en que Hernández actuó.<br /><br /><br /><a name="capitulo1">CAPITULO I - INFANCIA Y JUVENTUD DE JOSE HERNANDEZ </a><br /><br />Incumbe a este trabajo descubrir y exponer al José Hernández periodista en la forma más pura posible, es decir sin desviar la atención hacia otros aspectos de su vida más que en la medida de lo indispensable. Pero sin duda alguna un hombre no aparece espontáneamente con su primera acción trascendente; no lo hace Hernández con su primer artículo en la prensa. «Las ideas, las creencias y los sentimientos de los seres humanos dependen, en gran parte, de las enseñanzas recibidas durante su infancia, adolescencia y juventud» (Romero Carranza, 1963 p. 11).<br />Es por ello que no puede iniciarse una semblanza periodística hernandiana sin hacer referencia a la formación en los días de su niñez y juventud que constituyen su bagaje espiritual primigenio.<br />Hernández nació en la chacra de Pueyrredón (antiguo caserío de Pedriel), propiedad de su tía materna Victoria Pueyrredón en el actual partido bonaerense de San Martín, el 10 de noviembre de 1834.<br />Fueron sus padres don Rafael Hernández y doña Isabel Pueyrredón. Recibió el bautismo con el nombre de José Rafael en la parroquia de la Catedral del Norte, hoy Basílica de la Merced, en la ciudad de Buenos Aires, el 27 de julio de 1835.<br />La vida de Hernández apareció marcada desde su nacimiento por el entorno político de la época. Fermín Chávez (1959, p. 9) resume la situación del siguiente modo:<br />"La madre pertenecía a una familia de filiación unitaria y era prima hermana de Juan Martín de Pueyrredón, por lo cual José resulta primo segundo del pintor Prilidiano Pueyrredón. El padre, en cambio, militaba en el partido federal, al igual que sus hermanos Eugenio y Juan José Hernández, este último muerto durante la batalla de Caseros."<br /><br />Tempranamente quedó al cuidado de su tía Victoria, llamada «mamá Totó», mientras sus padres solían pasar largas temporadas en estancias del sur de la Provincia. Pero sus tías debieron emigrar por razones políticas y José fue dejado al cuidado de su abuelo paterno, José Gregorio Hernández Plata, que vivía en una quinta de Barracas sobre el Riachuelo.<br />A los seis años José Hernández comenzó sus estudios en el Liceo Argentino de San Telmo, dirigido por Pedro Sánchez. Desde 1841 hasta 1845 se formaría conforme a los hábitos y reglamentos de la época, en lectura y escritura, doctrina cristiana, historia antigua, romana y de España, aritmética, dibujo y gramática castellana.<br />Amén de ello, Chávez (ibid., p. 10) señala:<br />"Por un aviso de «La Gaceta Mercantil», publicado el 27 de agosto de 1845 y en ediciones posteriores, tenemos conocimiento de que ese año José Hernández cursaba todavía en las aulas del Liceo de Pedro Sánchez y que las clases habituales habían sido aumentadas con otras de francés, geometría y geografía, a las que concurrían «gratis y en premio los alumnos que por su capacidad y ejemplar conducta se han hecho acreedores a tal distinción». Los alumnos beneficiados así por el maestro Sánchez -que acababa de trasladar su escuela a Reconquista 221- sumaban veintidós y entre ellos figuraban Francisco y Juan José Urquiza, José Mariño, Teófilo Ezeiza, Manuel Badía, Nicolás Rivero y José Hernández."<br />Falleció la madre de José Hernández en 1843 y debido a que él estaba afectado por una dolencia física, al parecer del pecho, por la que le fue prescripto un cambio de clima, debió abandonar las aulas hacia 1846 y fue llevado por su padre, que trabajaba como mayordomo en establecimientos ganaderos de Rosas, a la pampa bonaerense donde se recuperó. Chávez (ibid., p. 11) refiere del siguiente modo aquellos días:<br /><br />"Es así como, a los doce años de edad, Hernández entra en contacto directo con el gaucho y con sus tareas de todos los días, en una época caracterizada par la intensa actividad de los saladeros. Su hermano Rafael lo dice en una de sus clásicas páginas sobre la juventud de aquél: «Allá en Camarones y en Laguna de Los Padres se hizo gaucho, aprendió a jinetear, tomó parte en varies entreveros y presenció aquellos grandes trabajos que su padre ejecutaba y de que hoy no se tiene idea. Esta es la base de los profundos conocimientos de la vida gaucha y amor al paisano que desplegó en todos sus actos» (Rafael Hernández. Pehuajó, 1896)."<br />Así recogió una visión acabada y de primera mano de la realidad del hombre de la campaña, donde fue uno más y pudo «captar el sistema de valores, lealtades y habilidades que cohesionaban a la sociedad rural» (Gramuglio, 1980, p. 2).<br />A los 19 años de edad, en 1853, ingresó en las filas del ejército e intervino en la represión del levantamiento del coronel Hilario Lagos contra el gobierno de Valentín Alsina, estando bajo las órdenes de los coroneles Pedro Rosas y Belgrano y Faustino Velazco y resultó vencido en San Gregorio, el 22 de enero de ese año. Al año siguiente actuó nuevamente, esta vez como teniente, contra las fuerzas de Lagos en la batalla de El Tala, donde su bando resultó victorioso.<br />Después de haberse batido a duelo con otro oficial, por razones políticas, abandonó las filas de la milicia y emigró a Entre Ríos, en 1858. Dos años antes había iniciado su labor periodística en «La Reforma Pacífica», órgano del Partido Federal Reformista al que adhirió.<br />«Testigos de la época lo describen sencillo y conservador, hablando con voz estentórea, arrebatado por los avatares de la política pero con tiempo para detenerse en el mercado, donde se pasaba escuchando los dichos y chistes gauchescos de los carniceros, que entonces eran todos criollos de pura cepa y de indumentaria campera» dice Gramuglio (ibid., p. 2).<br />Sedano Acosta ( 1962, p. 192) lo describe a su vez asegurando que: «Era un bello tipo de criollo: corpulento, vigoroso, atezado, de pelo lacio, de voz potente, probada en las faenas del campo y en las de la ciudad, ágil de cuerpo y de ingenio».<br /><br /><a name="capitulo2">CAPITULO II - </a>LA REFORMA PACIFICA (Buenos Aires - 1856)<br /><br />«En 1855, según el Almanaque de «La Tribuna» (1853/84; hermanos Varela), Buenos Aires contaba con diez imprentas...» (Rivera, 1980, p.324) y se mantenía como un estado disidente en un marco de frágiles «pactos de convivencia» con la Confederación Argentina presidida por Justo José de Urquiza y dotada ya de un cuerpo constitucional desde hacía dos años.<br />Hernández, que había tomado las armas por primera vez para defender al gobierno de Alsina en Buenos Aires contra el coronel Lagos, optó por alinearse en 1856 al Partido Federal Reformista, partidario de la incorporación de aquel estado a la Confederación.<br />En coincidencia con su pensamiento político inició ese mismo año sus lides periodísticas. «Su vinculación al periódico La Reforma Pacífica, dirigido por Nicolás Calvo, cuando éste sólo contaba 22 años, señala el despertar de su pasión por los problemas espirituales y sociales que agitaban al país». (Pagés Larraya, 1952, p. 51).<br />«La Reforma Pacífica» era el medio del nuevo partido a cuyos integrantes el oficialismo porteño denominaba despectivamente «chupandinos» por su supuesta afición a la bebida. A su vez los separatistas, partidarios de Valentín Alsina y Bartolomé Mitre, recibían de sus adversarios el mote de «pandilleros» porque, a decir de éstos, se manejaban siempre en grupos o pandillas.<br />Gramuglio (ibid., p. 6) señala que:<br />"En 1856, Nicolás Calvo fundó «La Reforma Pacífica», periódico que expresaba la tendencia reformista a la que pertenecía Miguel Navarro Viola, Tomás Guido, Ovidio Lagos, los González del Solar, Los Hernández y otros cuyas trayectorias seguirán encontrándose durante muchos años. Se dice que José Hernández colaboró en «La Reforma Pacífica» o que fué su corresponsal en Paraná. Este dato incierto es el que sitúa Las primeras actividades periodísticas de José Hernández, que luego serán tan fecundas» (1).<br />El primer número de «La Reforma Pacífica» se editó el 1° de diciembre de 1856. Su tamaño era de 84 centímetros por 53 de ancho y contaba con tres anchas columnas y ocho páginas.<br />Era un matutino que aparecía todos los días con excepción hecha de los días posteriores a los festivos, cuya suscripción tenía un costo de 30 pesos por mes.<br />El editor propietario de la empresa periodística era Juan José Soto, padre de Héctor S. Soto que luego codirigiría con Hernández un periódico montevideano.<br />«La Reforma Pacífica» se editaba en la calle Defensa 73.<br />Posteriormente trasladó la administración a Representantes 71. También modificó su formato, ampliado en tamaño y reducido el número de páginas con cuatro o cinco columnas cada una.<br />Dice Chávez (ibid., p. 16) que «Entre Calvo y el general Urquiza no se había llegado a establecer ninguna alianza política, pero de todos modos «La Reforma Pacífica» aparecía a los ojos del oficialismo (porteño) como un mero instrumento del estanciero de San José».<br />Auza (1978, p. 160) es aún más claro al precisar que:<br />"Calvo no conocía al general Urquiza y más que indiferencia, sentía antipatía hacia su persona y sus ideas. Sin embargo, los sucesos porteños, la conducta de sus dirigentes y, sobre todo la actitud de la Confederación en su política con Buenos Aires le hicieron cambiar lentamente de opiniones, superar su antipatía por Urquiza y olvidar sus resquemores hacia los hombres de Paraná."<br /><br />Y aún amplía el mismo autor:<br />"<la> no nacía como un diario favorable a la tendencia urquicista en Buenos Aires, ni mucho menos con la misión de sostener las ideas de algunos federales de las provincias sobre la cuestión de la separación de la ciudad portuaria. El diario representaba los intereses de un grupo porteño cuyos miembros, siendo ante todo porteños, querían y aspiraban a la nacionalidad, pero no del modo, ni con los procedimientos o el programa que se auspiciaba desde Paraná y, mucho menos, en el que se propiciaba desde San José "(ibid., p. 159).<br />Como se refirió en el Capítulo I, tras un duelo Hernández debió emigrar a Entre Ríos en 1858. Se radicó entonces en Paraná en donde trabajó como empleado de comercio y ocupó un cargo en la Administración Nacional.<br />En 1859 José Hernández participaba en la batalla de Cepeda con el grado de capitán, bajo las órdenes del coronel Eusebio Palma en las huestes de la Confederación, que resultan triunfadoras sobre las fuerzas de Buenos Aires.<br />A su regreso a Paraná, ese mismo año, se desempeñó como taquígrafo del Congreso y remitió desde aquella ciudad, por entonces capital de la Confederación, sus colaboraciones para «La Reforma Pacífica».<br />Las colaboraciones de Hernández referidas por todos sus biógrafos no resultan totalmente verificables según los estudios efectuados sobre el tema por Auza (ibid., p. 168) debido a que no son firmadas ni inicialadas. Según este estudioso de la prensa nacional los artículos hernandianos son identificables recién hacia 1860 bajo el seudónimo de «Vincha». Al respecto en el número del 18 de febrero de ese año se publicaba en «La Reforma Pacífica» un suelto citado por Auza (ibid., p. 169) que rezaba:<br />"Vincha. Tal es el seudónimo de nuestro más activo, laborioso e ilustrado corresponsal de las provincias. Ya hemos publicado antes correspondencias del señor Vincha, que lo han hecho conocer ventajosamente; en adelante bastará ver su nombre al pie de un escrito para que los lectores se detengan con gusto a recorrer las páginas trazadas par su pluma. Estamos ciertos que ninguno de nuestros colegas podrá presentar un extracto tan fiel y tan luminoso de la sesión del 6 como el que publicamos a continuación, debido a la infatigable laboriosidad de Vincha. "<br />Los artículos de José Hernández en «La Reforma Pacífica» con la firma de Vincha se inician el 13 de febrero de 1860 con el título de «Correspondencia de las provincias» y finalizan el 12 de enero de 1861 con «Correspondencia desde Rosario».<br />«La Reforma Pacífica» se editó hasta el 8 de febrero de 1861. Ese mismo año Calvo criticaba severamente la política de Alsina y desde el oficialismo se acusaba al periódico de instigación al asesinato del gobernador.<br />En 1860 resultaba electo presidente de la Confederación Santiago Derqui y el general Juan Esteban Pedernera, vicepresidente, a quien acompañaba Hernández como secretario. Simultáneamente comienza a escribir en «El Nacional Argentino» de Paraná (*).<br /><br />(*) La colección de «La Reforma Pacífica» se encuentra en la Hemeroteca de la<br />Biblioteca Nacional. Ref. 30.501/30.686.<br /><br /><a name="capitulo3">CAPITULO III - EL NACIONAL ARGENTINO (Paraná -1860) </a><br /><br />«El Nacional Argentino» era un diario defensor del gobierno de la Confederación aparecido en Paraná el 3 de octubre de 1852. Salía los jueves y domingos.<br />Su formato era de 48 centímetros de alto por 31 de ancho, a cuatro columnas.<br />Desde el 5 de marzo de 1855 aumentó su tamaño a 57 centímetros de alto por 40 de ancho, a cinco columnas y comenzó a aparecer los martes, jueves y sábados hasta 1858 en que se transforma en diario.<br />Se imprimía par la Imprenta del Estado y era su administrador don Jorge Alzugaray. Desde 1856 comenzó a insertar avisos comerciales, primero en espacios reducidos y posteriormente en toda la cuarta página.<br />Después de haber tenido en su redacción a Juan María Gutiérrez, Eusebio Ocampo, Alfredo M. du Graty, Ramón Gil Navarro, Benjamín Victorica, Emilio de Alvear, Luis Cáceres, Lucio V. Mansilla, Francisco Bilbao y Juan Francisco Seguí, el diario inició su última etapa de existencia, a la sazón con José Hernández como redactor.<br />Para entonces presidía la Confederación Argentina Santiago Derqui, con la vicepresidencia de Pedernera.<br />Dice Auza (ibid., p. 120) refiriéndose a «El Nacional Argentino»:<br />"El 19 de setiembre, algunos indicios delatan la presencia de una mano firme y segura al frente de El Nacional Argentino, pues se elimina el lema iniciado por Seguí, como si ya no tuviera vigencia (2).<br />Pocos días después, el 22, se publica un artículo que aparece en el espacio destinado al editorial y se titula «Comunicado. La Convención Nacional no es juez de las elecciones». Ese artículo estaba firmado por"Vincha" y tenía por objeto rebatir las ideas expuestas en El Correo Argentino. El 30 nuevamente aparece el seudónimo en otro «Comunicado» titulado «Desenlace Complicado»... aquellos artículos oficiaban de editoriales y retomaban la tradición del periódico de adoptar su propia posición ante los sucesos, más incluía una novedad, cual era el uso del seudónimo para amparar la verdadera personalidad del redactor."<br />Debe considerarse al respecto que parece justificable el uso del seudónimo en tanto que Hernández actuaba para la época como secretario del vicepresidente Pedernera y se desempeñó asimismo como taquígrafo de la Convención Nacional de Santa Fe encargada de estudiar las reformas a la Constitución propuestas por Buenos Aires.<br />José Hernández publicó dieciocho artículos en «El Nacional Argentino».<br />El 4 de octubre de 1860 escribía:<br />"La incorporación política (de Buenos Aires) está efectuada por los Pactos del 11 de noviembre y 6 de junio; la reincorporación administrativa, gubernativa, va a realizarse muy pronto. Para la República se abre una nueva era; una época de paz, de progreso, de actividad mercantil, de desarrollo moral y material.<br />Para la realización de estas vastas esperanzas, para el cumplimiento de las promesas con que nos halaga el presente, existe una condición esencial e indispensable: la estabilidad de las instituciones, el respeto y obediencia a la autoridad ejecutiva, que encargada de la dirección de los destinos del país, le conduce a la felicidad por el camino que le traza la ley" (Auza, ibid., p. 122).<br /><br />Aún como federal urquicista, Hernández adhería a la posición integracionista del presidente Derqui con la esperanza de un futuro de pacificación y progreso y aseguraba en consecuencia tres días después de la publicación del artículo citado:<br />"Porque los viejos partidos han muerto ya y los partidos nuevos que se levantan a impulsos de necesidades nuevas y de una vida comercial y civilizada, no les prestarán su apoyo.<br />En nuestra época, las necesidades de la sociedad son otras y otros los fines a que se dirige.<br />Las causas son nuevas, las ideas son nuevas, los propósitos lo son también y no es posible armonizarla con las causas, ideas y propósitos viejos; ni es posible ni cuerdo olvidar lo que corresponde a la sociedad de hoy, para sostener lo que pertenece a una sociedad que pasó"(Auza, ibid., p. 122).<br />En una de sus últimas notas, el 11 de octubre de 1860, Hernández defendía su independencia periodística y política señalando:<br />"Escribimos en este diario como lo haríamos en otro cualquiera para manifestar y sostener nuestras ideas y nuestras creencias políticas, que nunca hemos sometido ni someteremos jamás a ideas o creencias extrañas.<br />Escribimos porque nuestra calidad de argentino nos da derecho pleno y hasta cierto punto nos impone el deber de tomar ingerencia legítima en la política de nuestro país. Escribimos en este diario porque podemos hacerlo con libertad, con una independencia que cuadra a nuestro carácter..." (Auza, ibid., p. 123).<br />Así Hernández, próximo a cumplir Los 26 años de edad, ponía en juego el vigor de su juventud impetuosa hacienda alarde de su libertad y convicciones en cada nota.<br />Su último editorial, titulado «El estilo es el hombre», con las iniciales J. H., apareció el 15 de octubre.<br />La edición del día 25 del mismo mes del año 1860 fue la última de «El Nacional Argentino». .<br />El 17 de setiembre de 1861 Los ejércitos de la Confederación y del estado de Buenos Aires se enfrentaban en la batalla de Pavón.<br />Hernández, con el grado de capitán, actuó en el bando confederado al mando de Urquiza y resultó vencido, más que por la capacidad bélica de su adversario (Mitre) par la falta de convicción puesta en la acción ordenada desde Paraná par el presidente Derqui. Sería esa actitud de Urquiza la que le significaría el desprecio de muchos comandantes del interior del país, entre ellos el coronel López Jordán a quien se atribuye la responsabilidad ideológica de su asesinato.<br />En noviembre del mismo año José y Rafael Hernández participaban en la batalla de Cañada de Gómez, donde también resultaban vencidos por las tropas mitristas.<br />Mientras se organizaban focos de resistencia federal en el interior del país, bajo la conducción del general Angel Vicente Peñaloza, el coronel Felipe Varela, el general Ricardo López Jordán y otros, Derqui presentaba su renuncia y emigraba a Montevideo, Pedernera declaraba acéfalo el gobierno nacional y Mitre era designado presidente provisional. En mayo de 1862 fue electo definitivamente presidente par el Congreso que a su vez elegía a Marcos Paz como vicepresidente. Asumen el 12 de octubre de ese mismo año. (*).<br />(*) La colección de «El Nacional Argentino» se encuentra en la Hemeroteca de la<br />Biblioteca Nacional. Ref. 20.626.<br /><br /><a name="capitulo4">CAPITULO IV - EL ARGENTINO (Paraná- 1863) </a><br /><br />El 8 de junio de 1863 José Hernández se casó, en la catedral de Paraná, con Carolina González del Solar. E1 general Bartolomé Mitre presidía para entonces la República.<br />Meses después Hernández funda y redacta «E1 Argentino», periódico que sumaría su esfuerzo a «E1 Litoral», redactado por Carriego, en la defensa del ideal federal provinciano.<br />E1 12 de noviembre del mismo año el general Ángel Vicente Peñaloza, que se había rendido a una partida del comandante Ricardo Vera, es asesinado y decapitado y su cabeza es exhibida ante el pueblo en una pica, en una plaza de Olta, La Rioja.<br />La noticia de esta muerte conmueve Las fibras más íntimas de Hernández quien desde «E1 Argentino» hace la apología del «Chacho» al tiempo que anatematiza a sus enemigos políticos:<br />"ASESINATO ATROZ. El general de la Nación Don. Ángel Vicente Peñaloza ha sido cosido a puñaladas en su lecho, degollado y llevada su cabeza de regalo al asesino de Benavídez, de los Virasoro, Ayes, Rolta, Giménez y demás mártires, en Olta, la noche del 12 del actual.<br />El general Peñaloza contaba 70 años de edad; encanecido en la carrera militar, jamás tiñó sus manos en sangre y la mitad del partido unitario no tendrá que acusarle un solo acto que venga a empañar el valor de sus hechos, la magnimidad de sus rasgos, la grandeza de su alma, la generosidad de sus sentimientos y la abnegación de sus sacrificios.<br />La historia tiene para el general Peñaloza el lugar que debe ocupar el caudillo más prestigioso y más humano y el guerrero más infatigable.<br />El asesinato del general Peñaloza es la obra de los salvajes unitarios; es la prosecución de los crímenes que van señalando sus pasos desde Dorrego hasta hoy.<br />Que la maldición del cielo caiga sobre sus bárbaros matadores. Los millares de argentinos a quienes el general Peñaloza ha salvado la vida, rogarán por él." (Pagés Larraya, ibid., p. l51).<br />Varias notas que durante el mes de noviembre de 1863 aparecen en "E1 Argentino" fijan su posición después de la muerte de Peñaloza.<br />Otra de ellas, titulada «La política del puñal» decía, entre otras cosas:<br />"Los salvajes unitarios están de fiesta. Celebran en estos momentos la muerte de uno de los caudillos más prestigiosos, más generosos y valientes que ha tenido la República Argentina. El partido Federal tiene un nuevo mártir. El partido Unitario tiene un crimen más que escribir en la página de sus horrendos crímenes. El general Peñaloza ha sido degollado. El hombre ennoblecido por su inagotable patriotismo, fuerte por la santidad de su causa, el Viriato (3)Argentino, ante cuyo prestigio se estrellaban las huestes conquistadoras, acaba de ser cosido a puñaladas en su propio lecho, degollado y su cabeza ha sido conducida como prueba del buen desempeño del asesino, al bárbaro Sarmiento" (Pagés Larraya, ibid., p. 153).<br />Asimismo reclama a Urquiza una actitud firme ante los mandos de Buenos Aires:<br />"No se haga ilusiones el general Urquiza con las amorosas palabras del general Mitre: Represéntese el cadáver del general Peñaloza degollado, revolcado en su propia sangre, en medio de su familia después de haber perdonado la vida a sus enemigos más encarnizados, después de haber librado de la muerte hasta al bárbaro instrumento que los unitarios han empleado para hundirlo en el cuello del caudillo más valiente y más humano que ha tenido el interior del país. ¡En guardia, general Urquiza! el puñal está levantado, el plan de asesinaros preconcebido; la mano que descargue el golpe la comprará el partido Unitario con el oro que arrebata el sudor de los pueblos que esclaviza" (Pagés Larraya, ibid., p. 155).<br />Aclara aún lo que a su entender era la situación política del momento:<br />"Los asesinos del general Peñaloza se han espantado de la deformidad de su propio crimen. Quedan dos únicos caminos que pueden salvarlos y los salvajes unitarios, infames como siempre, como siempre traidores, los siguen sin vacilar.<br />El primero es adormecer al general Urquiza, adularlo, cortejarlo, complacerlo en cuanto desee, mostrarse con él solícitos, afables y cariñosos, a fin de que la bárbara degollación del general Peñaloza no lo haga abandonar un solo instante esa política de contemplaciones y de dulzuras que hace dos años tiene para con los salvajes unitarios. Así lo hicieron cuando asesinaron a Benavídez. Así lo hicieron cuando asesinaron a los Virasoro. Así lo harán ahora que han asesinado a Peñaloza. Pero el general Urquiza no puede dejarse engañar por esas zalamerías de tigres. Benavídez dio por resultado Cepeda. Virasoro dio por resultado Pavón.Un segundo camino de salvación para ellos, es engañar al país y esa es la inicua tarea que han emprendido. Peñaloza no ha sido perseguido. Ni hecho prisionero. Ni fusilado. Ni su muerte ha acaecido el 12 de noviembre. Lo vamos a probar evidentementeme y con los documentos de ellos mismos. Todo eso es un tejido de infamia y mentiras, que cae por tierra al más ligerísimo examen de los documentos oficiales que han publicado sus asesinos. Ha sido cosido a puñaladas en su propio lecho y mientras dormía, por un asesino que se introdujo en su campo en el silencio de la noche..." (Pagés Larraya, ibid., p. 156).<br />Publicó también Hernández una semblanza del «Chacho», que en diciembre de 1863 aparecía como folleto con el título de «Vida del Chacho. Rasgos biográficos del general Dn. Angel Vicente Peñaloza», que decía:<br />"Vamos a escribir, a grandísimos rasgos, la vida de este héroe sencillo y modesto, a bosquejarla con la brevedad con que nos lo permite el carácter y aún el objeto de esta publicación.<br />Pocos habrá, quizá, que conozcan una existencia extraordinaria, como la de este caudillo valiente, generoso y caballeresco, que ha sido actor en las escenas más notables del drama de nuestras luchas civiles y a quien sus perversos enemigos han pintado como el tipo de la ferocidad y encarnación del crimen." (Pagés Larraya, ibid., p. 168).<br />Y comentaba, entre otras cosas, que:<br />"No creemos necesario detenernos mucho para recordar a nuestros lectores, la resistencia heroica que el general Peñaloza hizo por el espacio de muchos meses al ejército que después de Pavón envió el general Mitre al interior y que fue a ensangrentar el suelo de las provincias. Aún están vivos esos hechos en la memoria de todos y todos saben que ante su prestigio, su actividad y su arrojo, únicos elementos de que podía disponer, fue a estrellarse todo el poder de las huestes invasoras, políticas de ese partido, cuya ambición es su único fin, el asesinato su único medio." (Pagés Larraya, ibid., p. 180).<br />«E1 Argentino» deja de aparecer a fines de 1863. Durante el año siguiente José Hernández reside en Paraná hasta el mes de diciembre. Para esos días Paysandú, Uruguay, es sitiada por el general Venancio Flores (triunfador de Cañada de Gómez) con la ayuda de fuerzas brasileñas de mar y tierra. Los federales entrerrianos reclaman la actuación de Justo José de Urquiza en defensa de los «blancos» sitiados, pero éste no abandona San José argumentando neutralidad. Entonces grupos entrerrianos, entre los que se cuenta a Hernández, se movilizan hacia el lugar pero llegan cuando los sitiados ya han sido derrotados. Regresa entonces Hernández a Paraná en donde reside desarrollando actividades comerciales.<br />En 1867 se traslada a Corrientes y colabora con el gobierno de Evaristo López. Ocupa cargos públicos: fiscal del Estado, secretario del gobernador, profesor de gramática. Comienza a publicar en «El Eco de Corrientes». (*).<br /><br />(*) La colección de «El Argentino se encuentra en la Hemeroteca de la Biblioteca<br />Nacional. Ref. 30.501.<br /><br /><a name="capitulo5">CAPITULO V - EL ECO DE CORRIENTES (Corrientes, -1868) </a><br /><br />En febrero de 1867 Hernández llegó a Corrientes, donde su cuñado, Melitón González del Solar, desempeñaba su profesión de médico. Allí colaboraron con el gobernador Evaristo López. Al respecto Chávez (ibid., p. 39) señala que:<br />"Poco después de su arribo a Corrientes, Hernández es designado (el 7 de marzo de 1867) Fiscal Interino del Estado, en sustitución del doctor Tomás J. Luque, que había renunciado. El correspondiente decreto del gobernador López expresa que aquél ocupará el cargo «con goce de sueldo y prerrogativas que le acuerda la ley»."<br />Allí escribe José Hernández en «El Eco de Corrientes». Al respecto Pagés Larraya (ibid., p. 51) señala que "En 1867 poseyó su primera imprenta y editó su primer diario: «El Eco de Corrientes»."<br />Pero esa apariencia fundacional no coincide con la información de Piccirilli (1954, p. 240) de que el periódico «Apareció en la ciudad de Corrientes el 24 de agosto de 1866», lo cual se verifica en su colección de la Biblioteca Nacional y que indica que Hernández fue uno de sus redactores y no el único ni el primero.<br />Tampoco Chávez (ibid., p. 39) lo menciona como fundador, al aseverar que «Desde las columnas del El Eco de Corrientes, cuya redacción pasa a integrar, el poeta debe sostener ardorosa polémica con el diario opositor La Esperanza, que aprovecha para atacarlo en su condición de funcionario oficial».<br />Entre tanto en Buenos Aires la cuestión de la capital hacía perder a Mitre popularidad y daba origen a la división de su partido en dos fracciones: Los que seguían sus principios -convertir a Buenos Aires en capital de la República- se denominaban «nacionalistas» y sus opositores, encabezados por Adolfo Alsina, fueron llamados «autonomistas», porque defendían el localismo porteño y la autonomía de la provincia de Buenos Aires. En el lenguaje político los últimos fueron apodados «crudos» y los nacionalistas «cocidos», o bien alsinistas y mitristas respectivamente.<br />Antes de que Mitre terminara su mandato, el pueblo se agitaba con los preparativos de la próxima elección presidencial. El partido nacionalista sostenía la candidatura del ministro de Relaciones Exteriores, Rufino de Elizalde y el autonomista propiciaba a su jefe, el doctor Adolfo Alsina.<br />Como una transacción entre las tendencias opositoras surgió la candidatura de Domingo Faustino Sarmiento (Ibáñez, 1970, p. 204.211).<br />«El Eco de Corrientes» era un periódico bimensual que se editaba por su imprenta, en el que Hernández publicó varias editoriales con las iniciales J. H. o con su nombre completo.<br />Así lo hizo el 1° de marzo de 1868 con el título «Candidaturas» de carácter antisarmientista.<br />El 31 de marzo, con el título «¿Hasta cuándo?», escribía denostando a sus adversarios políticos:<br />"¿A dónde va ese círculo exaltado de Buenos Aires que ha logrado hacer, aunque pocos, calurosos prosélitos en todos los ámbitos de la República, a dónde va en su afán de dotar al país con un presidente cuyos antecedentes políticos y cuyo carácter personal son una amenaza viva para la paz y la quietud de sus habitantes? ¿Ha escrito acaso en su bandera la palabra de muerte para toda la Nación e intenta convertirla en un vasto cementerio?.<br />Hacen sesenta años no interrumpidos que los hijos de esta tierra, nacen al estruendo de los cañones, se forman en medio del bullicio de las batallas, encallecen sus manos empuñando la lanza y el sable y sienten encanecer sus cabellos entre el humo de los combates. Las legiones argentinas han recorrido el suelo americano en todas direcciones dejando tras de sí regueros de su sangre generosa, apilados los cadáveres de sus hijos y marchando siempre adelante, con el arma al brazo y atento el oído a la voz de los clarines.<br />¿A dónde van esas masas armadas a prisa, dirigidas por generales más o menos hábiles, vencidos hoy, vencedores mañana, pero sin conquistar jamás para sí un día de reposo? Cada vara de nuestro suelo recuerda un episodio sangriento, se liga a la historia trágica de un combate, cada vara de tierra es una tumba.<br />¡Hemos de marchar siempre chapaleando sangre separando solícitos los cadáveres de nuestros hermanos que obstruyen nuestro paso y caminando a la ventura en medio de las tinieblas de la anarquía y sin más luz que el resplandor rojizo de los cañones!<br />Los pueblos tienen derecho a la paz, al reposo, al sosiego, después de sesenta años de vida en los campamentos, en que han devorado sinsabores, apurando todas las amarguras que brinda la desgracia.<br />¿No se sienten conmovidos los autores de la anarquía en presencia de estas multitudes sacrificadas bárbaramente en holocausto de sus ambiciones bastardas, a la vista de esas hermosas campiñas donde blanquean los huesos de tantos millares de hijos de esta desgraciada República, al contemplar esos pueblos empobrecidos, aniquilados por la guerra civil y sentadas sobres sus escombros las viudas, las madres, los huérfanos como la imagen de la desolación?<br />Aunque tienen serenidad para buscar un rincón donde reunirse tranquilos y tratar de que la destrucción se complete y de que las matanzas sigan.<br />Quince años de lucha sin tregua, fueron necesarios para conquistar un dogma: LA LIBERTAD.<br />Veinticinco de combates fueron precisos para fundar un principio: LA LEY.<br />Qué se busca ahora?<br />Fundar un Gobierno que haga de la libertad una mentira y de la ley una farza.<br />Remover esas dos grandes conquistas, que son el fruto de una batalla de medio siglo, para sentar en su lugar, el imperio de un círculo, para sustituir a la ley de voluntad de unos cuantos y para hacer que empecemos de nuevo el tan trillado camino de las luchas fraticidas.<br />Pero debemos tener fé en que esas tentativas no han de alcanzar su éxito.<br />El país ha de saber oponerse a esos manejos de los anarquistas y su voluntad ha de ser una valla que ha de contener el ímpetu de sus pasiones tantas veces funestas.<br />Si la anarquía, que intenta levantar de nuevo su cabeza, es vencida en la próxima lucha electoral, desaparecerá de entre nosotros, dando lagar al imperio del orden, de las instituciones y dejando abierto y franco el camino del porvenir.<br />¡Dios proteja la causa de los Pueblos! J. Hernández" (El Eco de Corrientes N° 166).<br />E1 17 de abril Hernández firmaba el artículo titulado «La combinación que han formado los sucesos es la única posible URQUIZA-ELIZALDE» (4) en el que analiza la situación política del país y promueve dicha fórmula:<br />"Por la primera vez la Nación presenta un aspecto verdaderamente republicano al ocuparse de la elección del Magistrado que ha de encargarse de sus elevados destinos.<br />Sean cuales fueren las causas que hayan despertado esa opinión que por todas partes se muestra en manifestaciones diversas, ese movimiento, nuevo entre nosotros, es por si sólo un gran paso dado en las prácticas de la democracia.<br />La Nación gana y se ilustra en él.<br />Pero eso mismo hace que la cuestión presidencial que va a resolverse, así como presagia grande, bienes para el porvenir, entrañe en sí escollos y peligros que conviene evitar.<br />¡Dios ilumine a los Electores, la imagen de la Patria los inspire, para que le den solución de una manera que permita a la República volver las espaldas a su pasado tenebroso, dirigiendo sus miradas al porvenir!<br />Sin entrar a investigar el origen de los males que han martirizado a la República por espacio de 50 años, sin detenernos en el examen de los elementos que los han producido, deber es, si intentamos alcanzar su remedio, estudiarlos en lo que hoy son, bajo la fisonomía de la época, con los deslindes y caracteres que presentan actualmente.<br />Mirando la cuestión desde la altura en que debe colocarse el observador de buena fe, podemos señalar con una rápida ojeada como grandes causas:<br />Las divisiones de partidos - Unitarios y Federales. Las rivalidades de localidad - Buenos Aires y las provincias.<br />Las fuerzas activas perniciosas - La oligarquía las montoneras. Todo lo demás, no son, por decirlo así, sino efectos emanados de estas causas radicales."<br />Continúa su análisis político y luego, en la misma nota dice:<br />"Bien puede quedar eliminada de este estudio la combinación Sarmiento-Alsina; su triunfo sería el triunfo del CRUDISMO, es decir, de los elementos más vivos de la anarquía, sería la victoria de un círculo reducido y exagerado en sus pretensiones, dejando afuera de la nueva situación a las dos grandes fracciones que forman los sostenedores de las candidaturas de Urquiza y Elizalde".<br />Más adelante afirma Hernández:<br />"Eliminada pues, esta ficción de combinación... quedan solamente la combinación Urquiza-Alsina y la candidatura de Elizalde.<br />Ya hemos señalado antes los graves peligros que envuelve la combinación caprichosa de Urquiza-Alsina, que sin tener una base sólida puede comprometer la paz interior, la gloria del general Urquiza y las garantías del partido Federal.<br />................................<br />No estando pues, destinada a triunfar la combinación Sarmiento-Alsina, no pudiendo tampoco alcanzar el triunfo la de Urquiza- Alsina por los peligros que envuelve, ¿qué queda? Nada. Es decir ninguna combinación hecha, que tenga probabilidades de éxito.<br />................................<br />Nos quedan solamente para examinar dos entidades políticas, dos candidaturas que la lucha electoral ha venido a colocar frente a frente y en torno de las cuales se agrupan fraccionados los partidarios de una misma idea, los que han levantado en algo una misma bandera política. La del general Urquiza. La del Dr. Elizalde.<br />................................<br />La idea de la nacionalidad tiene hoy, pues, por sostenedores a los amigos del Dr. Elizalde y a los del general Urquiza."<br />Y llega por fin Hernández, sobre el final de esta extensa nota, a la propuesta política que indicaba en el título:<br />"Sólo de la unión de esas dos grandes fracciones Nacionalistas, puede surgir un gobierno fuerte, estable, prestigioso, que ofrezca verdaderas garantías a todos los partidos, que asegure la paz interior y nos haga respetables para el exterior.<br />................................<br />La combinación alternativa Urquiza-Elizalde es la única posible, la única natural y la única también que daría a la República el gobierno que reclaman sus circunstancias y su porvenir.<br />................................<br />No es que nos hagamos nosotros caprichosamente autores de esa combinación, sino que estudiando los sucesos en su significación e importancia política, juzgando de su alcance como de la influencia llamados a ejercer en los destinos futuros de la República, deducimos lógicamente su necesidad, palpamos los males que aleja, los peligros que evita y entrevemos los bienes que promete.<br />................................<br />Esa combinación:<br />Echa las bases de una fusión sólida entre los partidos. Conserva a Buenos Aires en la Unión Nacional.<br />Contiene a la oligarquía con el poder de Elizalde y pone término a las montoneras con el poder y el prestigio del general Urquiza. "<br />Finaliza el artículo con una sentencia que trasciende su tiempo:<br />"Las conveniencias legítimas de los partidos, giran dentro de las conveniencias de los Pueblos; ambas pueden consultarse y salvarse unidas. "<br />José Hernández (El Eco de Corrientes, N° 170).<br />E18 de mayo publicó «Tiempo al tiempo» donde contestó al liberal Luis Baibiene que lo difamara desde «La Tribuna» de Buenos Aires.<br />Dijo entre otras cosas:<br />"En «La Tribuna» de Buenos Aires correspondiente al 26 de abril último, hay tres columnas suscriptas por Luis Baibiene en que, con motivo de contestar al «Eco de Corrientes>> se ocupa casi exclusivamente de injuriar y calumniar a José Hernández.<br />Es un modo muy cómodo de discutir, para el que a falta de una respuesta tiene a mano la facilidad de calumniar y denigrar a su adversario.<br />................................<br />Desafiamos al autor de estas palabras a que pruebe la verdad de lo que afirma, a que nos cite un solo caso de venalidad de nuestra parte, UNA SOLA OCASION en que alguno haya obtenido de nosotros el favor de un dictamen Fiscal por cualquier género de recompensa, a que diga quién nos ha inducido a una injusticia pagándonos el precio de nuestra rectitud, a que nombre al que alguna vez haya puesto en nuestras manos un solo real, declarando desde ya, si no lo hace, que Dn. LUIS BAIBIENE ES UN CALUMNIADOR INFAME.<br />................................ "<br />José Hernández (El Eco de Corrientes, N° 176) (5)<br /><br />De «E1 Eco de Corrientes» se editaron 186 ejemplares y cesó el 26 de mayo de 1868 porque el día 27 estalló un movimiento sedicioso mitrista que derrocó a Evaristo López.<br />El gobernador fue arrestado y sus ministros perseguidos.<br />"Hernández debió abandonar también un cargo menor pero altamente significativo: El de maestro de gramática en la Escuela de San Agustín" (Chávez, ibid., p.42).<br />Agrega Chávez (ibid., p.42) que:<br />"Después de su salida de Corrientes, el periodista y maestro se radica por algunas semanas en Rosario, donde...tenía algunos familiares y bienes. En esa oportunidad, su amigo Ovidio Lagos lo invita a colaborar en su diario La Capital, que todavía no tiene un año de existencia." (*)<br /><br />(*) La colección de «El Eco de Corrientes» se encuentra en la Hemeroteca de la Biblioteca Nacional. Reg. 30.453.<br /><br /><a name="capitulo6">CAPITULO VI - </a>LA CAPITAL (Rosario -1868)<br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhYJY1QLWXnhGJZ2bj4YNehiww6Q36E7l-jbuaUMKhLjilBn0NPaQAQG0kKs8K9M8cp6AauIFiD89-kl46PsCd05K_acc4QVFaY4eNBy74mwrGrXNpu1J4GXvV5pTGyajzo058l4UCWDXQ/s1600-h/la+capital+de+rosario.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378132943965357922" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 324px; CURSOR: hand; HEIGHT: 200px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhYJY1QLWXnhGJZ2bj4YNehiww6Q36E7l-jbuaUMKhLjilBn0NPaQAQG0kKs8K9M8cp6AauIFiD89-kl46PsCd05K_acc4QVFaY4eNBy74mwrGrXNpu1J4GXvV5pTGyajzo058l4UCWDXQ/s400/la+capital+de+rosario.jpg" border="0" /></a><br />«La Capital» fue fundado en 1867 y es considerado el decano de la prensa argentina, ya que todavía se edita.<br />Nació para apoyar el proyecto presentado el 1° de julio de ese año por el diputado por Buenos Aires Manuel Quintana para declarar a Rosario capital de la República.<br />Fundado par Ovidio Lagos, periodista que había trabajado en «La Reforma Pacífica», asociado con Juan Chassaing.<br />El primer número apareció el 15 de noviembre y dedicó el editorial inicial al elogio de la difusión de la educación popular (Piccirilli, ibid., voz Capital).<br />Como se indicó en el capítulo anterior, en julio de 1868, Lagos invitó a Hernández a colaborar en su periódico. Dice Chávez (ibid., p. 42)<br />"Había razones harto suficientes para que ambos periodistas estrechasen los lazos de su espíritu junto con las ataduras que da la lucha política misma. Los dos, federales erguidos frente al centralismo que la burguesía portuaria venía organizando desde hacía años. Ambos, formados en las duras luchas de una existencia penuriosa; los dos emigrados porteños después de las persecuciones de 1857, pertenecientes a un mismo partido: el chupandino. Una misma vocación, junto a las prensas y casi un mismo estilo".<br />Los artículos de Hernández en «La Capital» aparecen inicialados J. H. El primero de ellos fue publicado el 20 de junio con el título de «Los sucesos de Corrientes y la prensa anarquista» en donde planteaba el problema de la legalidad provincial avasallada par la revuelta mitrista.<br />A1 día siguiente, el 21 de junio de 1868, publicó «Corrientes se salva». «Los atentados deben tener término», Los días 22 y 23 de junio. «Tres proposiciones» en sucesivas ediciones desde el 24 al 27 de junio.<br />El12 de julio «Los cantos de las sirenas». «El Rosario debe ser la capital de la República», el 4 de julio y «9 de julio de 1816» en el 52 aniversario de la declaración de la independencia. El 16 de julio «El gobernador ilegal de Corrientes». «Lecciones para los pueblos», dos días después. «De mal en peor», Los días 20 y 21 de julio, última colaboración de José Hernández en el diario de Ovidio Lagos.<br />En este último artículo desarrolló un ataque al programa sarmientino de introducir métodos y maestros norteamericanos, de acuerdo con su concepto de civilización y a riesgo de modificar las tradiciones pedagógicas nacionales. Decía:<br />"Es un destino bien amargo el de esta pobre República. Esto se llama ir de mal en peor.<br />Mitre ha hecho de la República un campamento . Sarmiento va a hacer de ella una escuela.<br />Con Mitre ha tenido la República que andar con el sable a la cintura.<br />Con Sarmiento va a verse obligada a aprender de memoria la anagnosia, el método gradual y los anales de Da. Juana Manso. Estas son las grandes figuras que vienen a regir los destinos de la patria de Alvear y San Martín!<br />Pero, ¿ Consentirá el Congreso, consentirán los hombres influyentes de la República, consentirá el país en que un loco, que ya ha fulminado sus anatemas contra el clero y contra la religión, que ha dicho que va a nombrar una mujer para Ministra de Culto, que es un furioso desatado, venga a sentarse en la silla presidencial, para precipitar al país a la ruina y al desquicio ? No lo creemos; esperamos que el patriotismo y la reflexión no nos hayan abandonado del todo y que antes que consentir en semejante escándalo, tendrán bastante energía para decirle al partido de los anarquistas 'hasta aquí no más', y al loco predilecto de los perturbadores, que se vuelva a su destierro político, a estudiar los diversos métodos de las escuelas americanas." Chávez, ibid., p. 45).<br />En «E1 Rosario debe ser la capital de la República» José Hernández sostuvo:<br />"Hace 15 años que vivimos en un provisoriato funesto respecto de la capital.<br />Y este provisoriato amenaza continuar.<br />¿Qué? ¿Sólo lo provisorio habrá de ser siempre permanente entre nosotros?<br />Ya basta de incertidumbre. Ya es época de decidir de una manera definitiva y concluyente, dónde deben tener su asiento las Autoridades nacionales, ofreciendo así esa seguridad más a los grandes intereses que aguardan impacientes esa resolución. Ningún pueblo de la República puede sostener con el Rosario la competencia, sobre las condiciones y ventajas positivas que reúne para ser el punto de residencia de las autoridades nacionales.<br />Las fuerzas activas de la República, las fuerzas que pesan más decisivamente en el orden de todos los acontecimientos políticos y sociales, residen en la gran linea del Litoral formada por las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos y Corrientes.<br />Colocado como se halla el Rosario en el centro de esa gran línea, es decir, en el centro de todas esas fuerzas, el Gobierno aquí, regularía sus movimientos y trazaría a esos grandes centros de poder, la órbita en que deberían girar para bien general de la República.<br />El poder de Buenos Aires, que ha de ser siempre una amenaza para los pueblos mientras aquella provincia se mantenga como hasta aquí dominada por un círculo exclusivista y anárquico, ese poder se encontraría contenido por la proximidad del Gobierno Nacional, establecido en un punto fuera del alcance de su influencia; se hallaría observado de cerca y forzosamente estrechado dentro de los límites territoriales de su provincia. "<br />Afirma Hernández, al fin, en este artículo que:<br />"La capital en el Rosario sería la única solución conveniente que puede darse a las grandes cuestiones políticas y administrativas que nos han agitado y dividido hasta hoy."<br />Descalifica asimismo las posibilidades de Buenos Aires asegurando que:<br />"La capital en Buenos Aires sin traer grandes beneficios para aquel pueblo, hace la ruina del resto de la Nación. Aun cuando fuera posible el ridículo fenómeno de la coexistencia en Buenos Aires, de los dos Gobiernos, Nacional y Provincial, esa coexistencia trae así misma aparejados inconvenientes de tal naturaleza, que la convierten en un absurdo, en una extravagancia política."<br />Finaliza la nota con un vehemente llamado en favor de lo propuesto:<br />"Inspírense los representantes de los pueblos argentinos en las grandes conveniencias de la República y echen su voto en la balanza de nuestros destinos futuros, para asegurar para siempre los beneficios que los pueblos aguardan impacientes.<br />¡Óigase su voz, como la palabra de redención para los pueblos mártires! J.H." (Chávez, ibid., p. 148 ss).<br />La despedida de Hernández del periódico de Lagos es publicada el día 23 de julio de 1868 y dice:<br />"Este apreciable caballero, amigo y correligionario político, se marchó ayer para Buenos Aires; que su viaje sea feliz y su permanencia en la gran ciudad tranquila. El señor Hernández, que se hallaba establecido en Corrientes, trabajaba allí en la prensa apoyando siempre a la libertad y las buenas ideas; independiente de todas nuestras cuestiones las ha tratado con elevación y un conocimiento poco común de nuestros hombres y nuestras cosas.<br />Peregrino contra su voluntad, por la persecución del célebre gobierno revolucionario de Corrientes, con su permanencia de pocos días en Rosario, La Capital le debe notables artículos, que han llevado la palabra de verdad de nuestra situación política al ánimo del pueblo." (Chávez, ibid., p. 46).<br /><br /><a name="capitulo7">CAPITULO VII - EL RIO DE </a>LA PLATA (Buenos Aires - 1869)<br /><br />E1 12 de octubre de 1868 asume la presidencia de la Nación Domingo Faustino Sarmiento al tiempo que hace lo propio como vicepresidente Adolfo Alsina.<br />A mediados de noviembre de 1869 José Hernández se establece en Buenos Aires. E1 6 de agosto aparece el primer número de «E1 Río de la Plata». La administración y redacción funcionaba en la calle Victoria 202.<br />E1 diario enarbola fundamentalmente banderas de autonomía municipal, abolición de contingentes de fronteras y elección popular de jueces de paz, comandantes militares y consejeros escolares.<br />«E1 Río de la Plata» se editó en un formato tipo sábana y aparecía por la mañana. Juan Recalde figuraba como regente y editor.<br />Pagés Larraya (ibid., p. 54) hace una caracterización de la situación de la prensa al momento de la aparición de este medio:<br />"El Río de la Plata se fundó en un instante de singular florecimiento del periodismo argentino. Sin contar otras publicaciones menores, aparecían por entonces El Nacional fundado por Vélez Sársfield y favorable a la política de Sarmiento; La Tribuna de los hijos de Florencio Varela; La Nación Argentina de los Gutiérrez que, adquirida por Mitre, se editó desde el 4 de enero de 1870 con el título de La Nación y La Prensa, fundada el 18 de octubre de 1869 y a la cual pasaron tres de los redactores del Río de la Plata: Estanislao S. Zeballos, Cosme Mariño y Aurelio Herrera. "<br /><br />Posteriormente Pagés Larraya (ibid., p. 55) describe al medio y su actitud política:<br />" Diario de combate en hora de bullentes pasiones políticas, El Río de la Plata se caracterizó por su tono equilibrado y por la ausencia de ataques personales, recurso que por entonces era tan habitual en la prensa y bordeaba casi siempre lo calumnioso. Salta a luz El Río de la Plata a menos de un año de la asunción del mando presidencial por parte de Sarmiento y combatía su gobierno con serenidad, a la par que atacaba con más violencia al partido liberal de Mitre, entonces en la oposición. Pero más que la crítica de lo contingente el periódico de Hernández procuró afrontar los problemas fundamentales y no resueltos de la nacionalidad."<br />Hernández se ocupará en «El Río de la Plata» del tema social que luego desarrollaría en abundancia en su poema: el gaucho. Beatríz Sarlo (1979, p. 3s.) desglosa esa problemática del siguiente modo:<br />"En 1869, Hernández fundó en Buenos Aires un periódico, El Río de la Plata. Allí publicó una serie de artículos que constituyen algo así como el cañamazo de ideas que el Martín Fierro elaborará literariamente: el problema de las fronteras con el indio y su defensa, la iniquidad de que ésta repose exclusivamente sobre el habitante pobre de la campaña que es arrancado de su hogar para ser arrojado al fortín, convertido en una suerte de prisionero, desecho por la indigencia y mortificado por la arbitrariedad de las autoridades militares y civiles.<br />Es el gobierno, afirma Hernández, el que «convierte al gaucho en matrero, en delincuente, en asesino»."<br />Porque para los sectores intelectuales y la élite gobernante el vocablo gaucho era justamente sinónimo de delincuente. Pérez Amuchástegui (1977, p. 229) afirma:<br />"La conciencia antigaucha de los intelectuales se universalizó después de Caseros; Urquiza perdió el apoyo de la élite en tanto adoptó actitudes gauchescas. Después de Pavón, cuando se inicia la estructura nacional de la triunfante oligarquía paternalista, la voz 'gaucho' y sus derivados se reserva para las huestes del Chacho Peñaloza y sus pares. Y cuando ya no quedan mas 'gauchos montoneros' se aplica la notación despectiva de 'gaucho' a los 'bárbaros' de la campaña que, en un país ávido de europeizarse, pretenden mantener formas anquilosadas de tradicionalismo criollo. Para esta época serán gauchos esos 'salvajes' que sólo sirven para seguir a Felipe Varela o a los Taboada, según el bando... "<br />La guerra de la Triple Alianza contra el Paraguay era también un mecanismo para la extirpación formal y material del gaucho mediante las conscripciones forzosas.<br />Pagés Larraya (ibid. p. 56 s.) indica que si bien los artículos de Hernández aparecidos en «E1 Río de la Plata» no han sido firmados, resultan claramente identificables por los siguientes elementos:<br />"a) Se trata de artículos editoriales, que siempre escribía el director del periódico, en este caso Hernández. b) Hay coincidencias con los temas tratados por Hernández antes y después de El Río de la Plata. c) Hay coincidencias estilísticas. d) Hay repetición exacta o próxima de expresiones suyas usadas en otros lugares."<br />E1 19 de agosto de 1869 Hernández publicaba en «E1 Río de la Plata» el artículo titulado «Hijos y entenados» en el que sostenía:<br />"Tiempo es ya que los gobiernos empiecen a preocuparse de aplicar al mal remedios eficaces, para garantirnos de sus invasiones y se deje de girar perpetuamente en derredor de un círculo vicioso.<br />.................................<br />¿Qué se consigue con el sistema actual de los contingentes?. Empieza por introducirse una perturbación profunda en el hogar del habitante de la campaña. Arrebatado a sus labores, a su familia, quitáis un miembro útil a la sociedad que lo reclama, para convertirlo en un elemento de desquicio e inmoralidad.<br />Parece que lo menos que se quisiera fomentar es la población laboriosa de la campaña o que nuestros gobiernos quisieran hacer purgar como un delito oprobioso el hecho de nacer en el territorio argentino y de levantar en la campaña la humilde choza del gaucho.<br />.................................<br />Es la campaña, pues, fuente de nuestra riqueza y de nuestro porvenir económico y social, la que necesita de garantías, de medidas liberales y protectoras. Es necesario desarrollar su industria, fomentar la población nacional, escudar al ciudadano contra los atentados de la fuerza.<br />.................................<br />Nosotros nos pronunciamos no sólo contra el atentado que envuelve la reglamentación actual del servicio de fronteras, sino contra la ceguedad que así nos arrastra al precipicio y así desconoce nuestros más fundamentales intereses." (Pagés Larraya, ibid., p. 197ss).<br />E1 20 de agosto de 1869 «E1 Río de la Plata» publicaba el artículo titulado «E1 Peligro de la Oposición» que decía:<br />"La oposición es siempre útil a los pueblos y a los gobiernos por más que muchas veces sea apasionada e injusta. Ella es un testimonio de la liberalidad de las instituciones y del respeto de la autoridad hacia los derechos que consagran.<br />.................................<br />Más sirve a los gobiernos la prensa opositora, que la prensa oficial, porque aquella señala siempre los errores y los escollos mientras que ésta se empeña en facilitar el camino y en oscurecer la verdad que hiere y deslumbra. No faltará nunca a los gobiernos, apóstoles de la idea que aplaudiesen sus buenos actos y los alentasen en la ruta del bien ¿A qué, pues, buscar la dudosa sinceridad del aplauso interesado?<br />Decíamos que la oposición es siempre útil y mucho más allí donde el error tiene sus sacerdotes, que se empeñan la más de las veces en hacernos comulgar con ruedas de molino. La exageración de la oposición en la prensa, se destruye por si misma, como los globos de jabón se desvanecen en el aire. No combatimos pues la oposición, no le negamos su razón de ser y no podríamos negarla sin suicidarnos. Los derechos son solidarios y la máxima evangélica que aconseja no desear al prójimo mal que no queramos para nosotros, encierra una profunda enseñanza moral" (Pagés Larraya, ibid., p. 184 ss).<br />E1 22 de agosto Hernández insertaba en «E1 Río de la Plata» la nota que llevaba por título el interrogante ¿Qué civilización es la de los matanzas? en la cual con la dureza de su prédica social señalaba, entre otros conceptos:<br />"La frontera, decíamos debe ser guardada por tropas de líneas, organizadas por medio de enganche. Este es el medio legítimo de custodiarlas y de su adopción no se resiente ningún principio, no se afecta derecho alguno."<br />"Los ejércitos de fronteras no sólo deben tener armas: deben estar además munidos de instrumentos de trabajo".<br />"No sólo deben salvar a la campaña de las invasiones de los indios sino que deben fructificar la tierra que pueblan, apropiándola a su existencia y bienestar.<br />..................................<br />Ofrezca el gobierno esas ventajas positivas y no le faltarán brazos que contraer a la defensa y a la colonización de las fronteras. Si nuestros gauchos, si los que vagan hoy sin ocupación y sin trabajo obtienen además del salario correspondiente un pedazo de tierra para improvisar en él su habitación y los instrumentos necesarios, se le liga más y más a la defensa de la línea fronteriza, porque ya no serán sólo los intereses extraños los que ampararía sino sus propios intereses.<br />.................................<br />La experiencia ha demostrado el absurdo de las combinaciones hasta hay adoptadas para arrebatar a los indios el señorío del desierto.<br />La idea de llevarles una guerra ofensiva para exterminarlos, que algunos han emitido en la prensa y hasta en opúsculos que se han impreso bajo la protección oficial, no ha dado los resultados con que soñaban los autores. Y decimos felizmente, porque si eso hubiese tenido lugar habría sido para mengua de nuestros gobiernos, que no habrían descubierto un medio más en armonía con nuestros sentimientos humanitarios y cristianos de neutralizar el mal y hacer al salvaje mismo partícipe de los beneficios de la civilización.<br />.................................<br />Nosotros no tenemos el derecho de expulsar a los indios del territorio y menos de exterminarlos. La civilización sólo puede dar los derechos que se deriven de ella misma" (Pagés Larraya, ibid., p. 206 ss).<br />E1 1° de setiembre de 1869 «El Río de la Plata» publicaba un artículo titulado: «La división de la tierra» que entre otros conceptos aseveraba:<br />"Los gobiernos que no deben tener ni aún la inspiración de ser propietarios, se empeñan entre nosotros, en arrebatar las grandes empresas de progreso, a la acción fecundante del individuo y en vez de buscar el restablecimiento del equilibrio industrial, introducen de esta manera una honda perturbación en la marcha económica de la sociedad.<br />En vez de despojarse de falsas atribuciones devolviéndolas al pueblo a quien pertenecen, nuestros gobiernos se arrogan facultades monstruosas, estableciendo privilegios y monopolios odiosos en favor del que está encargado precisamente, como ya lo hemos dicho, de asegurarnos los beneficios de nuestras libertades institucionales.<br />.................................<br />La sociedad no hace de los gobiernos agentes de comercio, ni los faculta para labrar colosales riquezas, lanzándolos en las especulaciones atrevidas del crédito. La sociedad no podría delegar, sin suicidarse, semejantes funciones, que son el resorte de su actividad y de su iniciativa.<br />.................................<br />Las tierras en poder del fisco, no aumentan la renta del Estado, cuyo fundamento está en el impuesto y en la población.<br />.................................<br />Por medio de la subdivisión de la tierra se atrae una población, cuyo espíritu emprendedor se exita en una lucha profícua y estimulante.<br />En esta provincia, que tiene en su contra el flagelo de los indios y donde se agita como un problema insoluble la cuestión de fronteras, el medio de resolver en pocos años esta cuestión sería el de fomentar la población industriosa, llevar al desierto las locomotoras del progreso, que traerían a su regreso a nuestros mercados los pingües productos que regala la tierra, a los que la abonan y cultivan." (Pagés Larraya, ibid., p. 193 ss).<br />E1 3 de octubre, en el editorial titulado «La ciudad y la campaña» se sostiene, entre otros conceptos que:<br />.................................<br />El servicio de fronteras, parece haberse ideado como un terrible castigo para el hijo de la campaña.<br />Los intereses de la campaña ¿ son intereses distintos de los de la ciudad ? No, por cierto.<br />La campaña y la ciudad, es una misma población, con iguales derechos constitucionales, con idénticos intereses, con aspiraciones confundidas.<br />Y si esto es así ¿ Cómo se pretende establecer una separación odiosa, inconstitucional?<br />¿Cómo se pretende que la campaña únicamente, atienda el servicio de las fronteras?<br />¿Por qué no se hace extensivo ese servicio a los hijos de la ciudad ?<br />La respuesta es fácil. Porque ese servicio es inicuo y atentatorio. Porque no puede exigirse en la ciudad, donde habría, consumada la violación de un derecho, una protesta energética y una acusación legal.<br />¿ Y habremos de consentir que se perpetúe la injusticia, la masa de un antagonismo fatal, que puede producir mañana tremendas complicaciones?..."(Pagés Larraya, ibid., p. 189).<br />El 6 de octubre otro artículo señala:<br />.................................<br />«El Río de la Plata» se ha constituido en defensor de ls derechos desconocidos y violentados en el habitante de la campaña.<br />Ha iniciado y sostenido el medio que lo gobiernos deben recurrir para resolver el servicio de ls fronteras, sin falsear la libertad del ciudadano, sin atentar contra su personalidad, amparada en la Ley.<br />Los gobiernos necesitan soldados para atender al servicio de la frontera. Pues que ls busquen con sus recursos propios". (Pagés Larraya, ibid., p. 192).<br />Para finalizar la reseña sobre «El Río de la Plata», resulta interesante señalar la publicación que el periódico de Hernández hiciera los días 19, 20 y 21 de noviembre de 1869. Se trata de unos comentarios sobre las Islas Malvinas remitidos par Augusto Lasserre. Este realizó un viaje a las islas como comisionado especial de una importante compañía de seguros marítimos, la «Asociación de Seguros Mutuos de la Marina Mercante Italiana», con el objeto de realizar una investigación y un peritaje sobre la pérdida total de la barca italiana «Perú» en el puerto de Albemarle.<br />Con motivo de ese viaje, escribió una «Descripción de un viaje a las Malvinas» publicada, como se dijo, en «E1 Río de la Plata». Dice Gianello (1963, p. 176).<br />"Sobre esta «Descripción», escrita en forma de carta a Hernández, se hizo un gran silencio. En ella Lasserre hace una minuciosa descripción de las islas y especialmente de Stanley, de su fauna y su flora.<br />Pero sobre todo, patrióticamente inspirado, su propósito es que se restituya a la soberanía argentina ese usurpado territorio. Examina nuestros justos títulos de dominio y acusa la negligencia de las autoridades argentinas que «imperdonablemente postergaron justicieras reclamaciones que hacen más difícil cada día, la integridad territorial de la República». Su carta es un requerimiento siempre de actualidad para que se comprenda la importancia de esa devolución que en él, nuestro gobierno, se halla en el deber de exigir al gobierno de Su Majestad Británica."<br />E126 de noviembre, en el N° 92, se publica un extenso artículo titulado «Islas Malvinas. Cuestiones Graves», en el que Hernández señala:<br />"Los argentinos, especialmente, no han podido olvidar que se trata de una parte muy importante del territorio nacional, usurpada a merced de circunstancias desfavorables, en una época indecisa, en que la nacionalidad luchaba aún con los escollos opuestos a su definitiva organización.<br />.................................<br />...deber es muy sagrado de la Nación Argentina, velar par la honra de su nombre, por la integridad de su territorio y por los intereses de los argentinos. Sus derechos no prescriben jamás." (Destéfani, 1982, p. 98s).<br />E1 11 de abril de 1870 estalla en Entre Ríos un movimiento revolucionario encabezado por el general Ricardo López Jordán, que se venía gestando desde cinco años antes.<br />Urquiza es asesinado por considerárselo traidor a la causa federal.<br />En Buenos Aires comenzaron a ser vigilados los nombres de la oposición, entre ellos Hernández que había sido ministro de campaña de Evaristo López y como tal (10 agosto 1868) había refrendado el nombramiento de «Brigadier de la Provincia de Corrientes» para López Jordán. Decide entonces clausurar «E1 Río de la Plata», el 22 de abril de 1870 y en su último editorial dice:<br />"No queremos asistir en la prensa al espectáculo de sangre que va a darse en la República...<br />No hemos aprendido a cortejar en sus extravíos ni a los partidos ni a los gobiernos y antes de hacernos una violencia a que no se someta la independencia y rectitud de nuestro carácter, preferimos dejar de la mano la pluma que hemos consagrado exclusivamente al servicio de las legítimas conveniencias de la Patria. Dejamos de escribir el día en que no podemos servirla." (Chávez, ibid., p. 52). (*)<br /><br />(*) La colecci6n de «El Río de la Plata» se encuentra en la Hemeroteca de la Biblioteca Nacional. Reg. 30.689.<br /><br /><a name="capitulo8">CAPITULO VIII - </a>LA PATRIA (Montevideo -1872)<br /><br />A fines de 1870 Hernández se incorporó a las filas del ejército jordanista compartiendo la derrota de Ñaembé el 26 de enero de 1871.<br />Posteriormente emigró junta con López Jordán a Santa Ana do Livramento, en territorio brasileño, donde permaneció desde abril de 1871 hasta principios de 1872.<br />Luego viajó a Uruguay en donde habría hecho alguna incursión periodística, posiblemente en «La Patria», según Piccirilli (ibid., p. 329s), para regresar más tarde a Buenos Aires amparado en una amnistía de Sarmiento y publicar el célebre poema gauchesco. Residió en una casa de la calle Talcahuano y luego en el hotel «Argentino» de Rivadavia y 25 de Mayo, mientras su familia se ausentó a la estancia «Cañada Honda» de Baradero para escapar del flagelo de la fiebre amarilla.<br />A mediados de 1873 López Jordán invadió Entre Ríos y el gobierno de Sarmiento puso precio a su cabeza y la de sus colaboradores. Hernández en su condición de tal buscó refugio nuevamente en Montevideo, donde reinició sus tareas periodísticas el 1° de noviembre de ese año en «La Patria», que dirigía Héctor Soto, hijo de Juan José Soto, el editor de «La Reforma Pacífica», su primer periódico en que Hernández iniciara sus lides en la prensa (ver Capítulo II).<br />El 9 de diciembre, López Jordán es derrotado en Don Gonzalo. El 10 de marzo de 1874 Hernández publicó en «La Patria» un manifiesto de López Jordán redactado por él, donde se revaluaba la postura jordanista ante sus enemigos y fracciones disidentes surgidas contra la personalidad del caudillo federal.<br />En abril y mayo publicó en ese medio nueve artículos polémicos en respuesta al publicista (6) chileno Benjamín Vicuña Mackena, firmados con el seudónimo «Un Patagón» (Pagés Larraya, ibid., p. 52).<br />En agosto de 1874 compartió con Soto la dirección del periódico y, tras un breve paso por Buenos Aires, regresó a Montevideo y asumió la dirección y redacción de «La Patria», hecho que en octubre anuncia en las páginas del medio del siguiente modo:<br />"Redacción. La ausencia de nuestro amigo el Sr. Soto, nos coloca por algunos días al frente de la redacción de La Patria y los emplearemos en hacer fuego contra la sombría personalidad de Dn. Bartolomé Mitre, que en el delirio de sus ambiciones pretende todavía imponerse por medio de la fuerza y encadenar a su voluntad el porvenir de los pueblos argentinos. J. H." (Chávez, ibid., p. 69).<br />Según Cútolo (1971, p. 564) Hernández utilizará en este medio el seudónimo «Polilla>> (7).<br />En 1874 Mitre y Alsina, los jefes de los dos principales partidos políticos, se disputaban el mando futuro del país, aunque ambos eran resistidos en buena parte de las provincias por su condición de porteños. La actividad del interior favoreció las aspiraciones del doctor Nicolás Avellaneda -Ministro de Justicia e instrucción pública de Sarmiento- nacido en Tucumán.<br />La candidatura de Avellaneda logró la adhesión de diez provincias, por lo que Alsina retiró la propia y dispuso apoyarlo con su partido Autonomista.<br />De la fusión entre el partido Nacional de Avellaneda y el Autonomismo de los «crudos» de Alsina, surge una nueva expresión política: el Partido Autonomista Nacional (PAN).<br />En medio de gran tensión política, las elecciones se efectuaron el 14 de abril de 1874. Como se señaló, el triunfo correspondió a la fórmula encabezada par el doctor Avellaneda, seguido del doctor Mariano Acosta para el cargo de vicepresidente.<br />En las filas de la revolución mitrista para oponerse a la asunción de Avellaneda del 24 de setiembre de 1874 se encontraban viejos enemigos del Chacho, de López Jordán y de Evaristo López. Arredondo, Baibiene, José C. Paz y otros simbolizaban la política que Hernández combatía desde 1857. Por eso el gran antisarmientista habrá de luchar esta vez por la legalidad representada en Sarmiento y Avellaneda (Chávez, ibid., p. 68).<br />En ese marco tratará también de neutralizar los intentos del mitrismo por llevar a sus filas a elementos jordanistas y con ese motivo publica varios artículos en «La Patria»: «De presidente a revolucionario, de revolucionario a pirata»; «La administración Mitre»; «El predominio de Mitre»; «Mitre y Catriel»; «Los dos restauradores»; «Males sobre males»; «Los dos fundadores de la nacionalidad argentina».<br />En «La administración Mitre» Hernández arremetía contra el ex presidente diciendo:<br />"Ahogó en sangre las resistencias de la Patria, para prepararse el camino de la Alianza, que debía dar por resultado la devastación del Paraguay.<br />En esta sección americana, Mitre ha sido un cometa de sangre, un flagelo devastador, un elemento de corrupción y de desquicio y dan testimonio de su existencia los huérfanos, las viudas y los inválidos." (Chávez, ibid., p. 70).<br />En el artículo «Mitre y Catriel» Hernández hacía mención de la utilización del indio en las revoluciones y guerras civiles, por Rosas en Caseros, Urquiza en Cepeda y Mitre en la revolución del 74.<br />Los artículos publicados por Hernández en «La Patria» eran reproducidos casi en su totalidad por «La Política» de Buenos Aires (periódico fundado par Evaristo Carriego en 1872).<br />El 1° de enero de 1875 suspende su aparición «La Patria» de Montevideo y Hernández regresa poco después a Buenos Aires en el marco de la política conciliadora de Nicolás Avellaneda que había asumido la presidencia de la Nación el 12 de octubre de 1874 secundado por Mariano Acosta como vicepresidente.<br /><br /><a name="capitulo9">CAPITULO IX - OTROS MEDIOS (Buenos Aires - 1873/1876) </a><br />a - EL PLATA (1873)<br />Un solo autor, J. Sapiña, en el «Diccionario de Autores», tomo II p.270, menciona el diario «El Plata». Dice, refiriéndose a Hernández: ... Sigue en la prensa y en la acción a López Jordán en la revolución de 1873 y tiene que expatriarse. Funda después el diario «El Plata», no habiéndose encontrado confirmación alguna al dato. Por lo tanto simplemente se deja constancia a Los efectos de una ulterior verificación.<br />b - LA LIBERTAD (1875)<br />A mediados de 1875 Hernández publicó la segunda edición de su «Vida del Chacho», recopilación de sus notas periodísticas aparecidas en «El Argentino» de Paraná, en 1863.<br />El diario «La Tribuna», de los hermanos Héctor y Mariano Varela, publicó en su edición del 18 de setiembre de 1875 un comentario crítico en el que calificaba la obra de Hernández de «notablemente reaccionaria». Tres días después, «La Tribuna» también acusaba a Hernández de jordanista y de «partidario de la situación», como prosélito de Avellaneda. (Chávez, ibid., p. 75).<br />El autor respondió entonces el ataque el día 23 de setiembre, desde las columnas de «La Libertad», diario porteño que redactaba para entonces el chileno Manuel Bilbao.<br />«La Libertad» era un diario político, noticioso, literario y comercial que apareciera en Buenos Aires el 1° de julio de 1873, con dirección de Gregorio Aráoz y se tiraba por la Imprenta del Mercurio.<br />Era una continuidad, según lo expresaba en su primer número, del diario «La República» de 1867. Sostenía en su prédica la candidatura a la presidencia del doctor Manuel Quintana (8) en las elecciones de 1874.<br />Era un periódico de gran tamaño, a siete columnas, con agentes en el interior de la República encargados de su difusión. En el número 27 del viernes 1° de agosto de 1873 cambió el editor, que resultó ser J. M. Portillo. En el número 39, se da cuenta de la proclamación de la candidatura del doctor Quintana para la presidencia. El último número aparecería en abril de 1886. (Piccirilli, ibid., voz Libertad).<br />Como se dijo, el 23 de setiembre de 1875 José Hernández publicaba en «La Libertad» su respuesta a «La Tribuna»; lo hacía bajo el título «Señor Sarmiento»: ¿por qué mataron?» y decía:<br />"Empecemos nuestra contestación a «La Tribuna» con un recuerdo oportuno, que nos servirá de introducción y de punto de partida.<br />Hace aproximadamente quince años, tuvo lugar en Santa Fe una Convención Nacional para considerar las reformas que Buenos Aires presentaba a la Constitución.<br />Ocupábamos en ella el puesto de taquígrafo.<br />En la fila derecha, en el primer asiento, se encontraba un convencional que se revolvía agitándose continuamente en su silla.<br />Miraba a todas partes como un desaforado, manifestando en todos sus movimientos una agitación y algo de un malestar que no le permitía permanecer tranquilo.<br />De pronto hace un movimiento rápido y se saca un botín, a pocos minutos el otro, coloca los pies cubiertos sólo con las medias sobre aquellos zapatos que tanto le habían mortificado y respirando fuertemente como quien se libra de una gran incomodidad, permanece muy tranquilo, como en el retiro de su casa, delante de la respetable Asamblea. Ese hombre era el Sr. Sarmiento y ese fue el día y las circunstancias en que lo conocí, bajo la impresión que cada uno de los lectores puede calcular que produciría en el observador aquel hecho de intimidad y confianza con la Convención y con el público.<br />De allí parten mis relaciones de vista con el Sr. Sarmiento, por quien después he sido perseguido sin tregua.<br />...el Sr. Sarmiento me persiguió en Corrientes cometiendo una injusticia y una violación de la Constitución, por la que fue acusado ante el Congreso al principio de su presidencia y esa acusación tiene mi firma al pie. Cuando él era candidato, yo había combatido su candidatura y él se vengaba.<br />Más tarde, siendo él Presidente, tengo noticias de cinco o seis órdenes de prisión dictadas contra mi, pero he tenido la satisfacción de verlo bajar del gobierno, sin que él tuviera la de meterme en la cárcel.<br />.......................................<br />Cuando los que mataban, los que aplaudían la matanza y los que la predicaban como justicia, me llamaban a mi «mazorquero», porque condenaba aquellos excesos y defendía en tantos desgraciados el derecho de vivir, yo no podía, no debía quedarme sin retribuir el sangriento apóstrofe.<br />Era una injuria recíproca. Recibía una y devolvía otra que le era correlativa.<br />Pero los que mataron, Sr. Sarmiento, los que mataron son más culpables, cualesquiera que sean las formas en que lo hicieron, que los que condenaron a los matadores, cualesquiera que sean los términos que escribieron.<br />Fínjase muerto y oirá la opinión de la posteridad respecto de usted." (Chávez, ibid., p. 76 ss).<br /><br />Al día siguiente «La Tribuna» publicaba un artículo en el que, entre otras cosas, acusaba a Hernández de haberse vengado con «crueldad refinada» de Urquiza, Mitre y Sarmiento, a lo que el poeta respondía en la edición del 26 de setiembre de 1875 de «La Libertad»:<br />"Rechazo esa afirmación, con la dignidad del patriota, del hombre de convicciones políticas y del verdadero republicano.<br />Yo no me he vengado de Urquiza, ni con crueldad ni sin ella y olvidé pronto el mal que alguna vez me hizo.<br />No me he vengado de Mitre, de quien jamás recibí agravio ni ofensa personal alguna y a quien sólo he combatido por los sucesos públicos que bajo su dirección y su influencia se han producido en las Repúblicas del Plata.<br />No me he vengado de Sarmiento, no porque no tuviera de que, sino porque en mi espíritu no tiene cabida el ruin sentimiento de la venganza.<br />En fuentes menos turbias he bebido mis inspiraciones políticas y en más elevadas aspiraciones, en propósitos más generosos y nobles he hallado la energía suficiente para la lucha y el vigor necesario para aceptar los sacrificios que ella me ha impuesto." (Chávez, ibid., p. 79).<br />«La Tribuna» del 28 de setiembre daba por cerradas las lides con un artículo en el que señalaba respecto de Hernández»:<br />"Federalote ultra, entusiasta, admirador y humilde eco de los actos del Chacho y servidor del virtuoso general Dn. Ricardo López Jordán, que no por haber asesinado al general Urquiza fue menos virtuoso ante la moral de Dn. José Hernández, profesa principios incompatibles y de imposible relación con los que forman el credo de la Redacción de «La Tribuna». Es nuestra última palabra." (Chávez, ibid., p. 80).<br />Hernández, con el título de «A la última palabra, las últimas palabras», hizo lo propio en la edición del 29 de setiembre de «La Libertad» en donde dijo:<br />"¿A quién ha elogiado «La Tribuna» que no haya pertenecido a su comunidad política, ni a quién ha elogiado en su vida el Sr. Sarmiento?<br />¡Recuérdase como acaba de tratar al general Paz y calcúlese como puede tratar a Peñaloza (9).<br />Recuérdese como acaba de tratar a ciudadanos, entre los que se comprendía el Sr. Albarracín, pariente suyo, de quienes dijo que había tenido que arrojarlos de la casa de gobierno y calcúlese como podrá tratarme a mi.<br />No, nosotros no hemos pretendido tales elogios, no cabe tanta ceguedad de nuestra parte, ni es honroso el elogio, sino cuando no es buscado.<br />.......................................<br />Aceptemos posiciones y establezcamos diferencias.<br />Entre la conducta de un ciudadano que se mezcla en una revolución, sin mancharse en ella y la del primer magistrado que dio ante la República y ante el mundo el escándalo de ofrecer cien mil patacones por la cabeza del jefe revolucionario, hay una diferencia fácil de medir.<br />El primero comprometió su individualidad; el segundo escarneció la moral pública, vilipendió la autoridad que investía, escandalizó a la República, infirió un ultraje a la civilización. Yo no inauguré el período de las revoluciones.<br />Y él pretendió inaugurar en el Río de la Plata, un periodo aciago la costumbre inmoral, impía, de poner precio las cabezas (10)." (Chávez, ibid., p. 80s).<br />c - EL BICHO COLORADO (1876)<br />Dice Cutolo (ibid., p. 564) que Hernández «colaboró en 1876, en «El Bicho Colorado», periódico satírico, político y literario...».<br />Coinciden en ello todos los biógrafos hernandianos consultados.<br />«El Bicho Colorado» fue un periódico de carácter humorístico que apareció en Buenos Aires el 1° de febrero de 1876, dirigido por José Hernández.<br />Fue ilustrado por el dibujante francés Carlos Clérice. Con ocho páginas en prosa y verso incluye una sátira contra Juan María Gutiérrez por su rechazo del diploma de la Academia Española (11) y testimonios de la constante crítica de Hernández a la política contra el indio y su oposición a Mitre, Avellaneda, Sarmiento y Adolfo Alsina. (Pagés Larraya, ibid., p. 52).<br />Se ofrecía en la calle y, al por mayor,en Perú 217 de Buenos Aires.<br />Como lo describe Vázquez Lucio (1985, p. 139):<br />"...ilustra su portada con un primerísimo plano del pie de la República hasta más arriba del tobillo, cubierto de forúnculos donde aparecen las caricaturas de Sarmiento, Mitre, Avellaneda, Aneiro e indios; el dibujo lleva por título «Los bichos colorados de la República Argentina»."<br />Sostenía el redactor de «El Bicho Colorado» que al aparecer en la vida periodística con un programa, era costumbre prometer maravilla; pero que un programa, en este caso, era un «letrero mentiroso como el que los charlatanes ponen en sus tiendas ...» Por eso el periódico adoptó este programa: «Sin programa». (*)<br />d- MARTIN FIERRO (1876)<br />Siguiendo la reseña biográfica de Cutolo (ibid., p. 564) leemos, como se señaló en el punto precedente: «Colaboró en 1876, en «El Bicho Colorado»... como en 'Martín Fierro', otro semanario humorístico».<br />«Martín Fierro» era, en efecto, un semanario humorístico, de política, literatura y noticias que apareció el domingo 13 de agosto de 1876.<br />Figuraban como redactores «Tres gauchos baqueanos» e inserta composiciones en prosa y verso.<br />Dice Pagés Larraya (ibid., p. 53) que «En el primer número se inserta un artículo titulado 'Aquí estoy' que pareciera de la pluma de Hernández porque se citan versos del poema y se expresan algunos juicios coincidentes con su personalidad». Dice, por ejemplo, «... Los más sabios del país, me dieron el diploma de 'dotor' y ahora sí que puedo hablar con la gente que no así nomás no se da ese grano de anís a cualquiera».<br />El 18 de setiembre y el 30 de octubre aparecen sendas colaboraciones con la firma de «El payador Pepe José» que superponen algunas expresiones a Los versos de Hernández.<br /><br />Desde el tercer número aparece en la última página del semanario un aviso de la librería «Martín Fierro» de Angel Da Ponte (Bolívar 20), en el que se anuncia asimismo la venta de la décima edición del poema gauchesco. Además, en el primer número se anunciaba ya, tres años antes de su aparición, «La vuelta de Martín Fierro», una primicia tal que justifica la afirmación de que uno de los «tres gauchos baqueanos» fuese José Hernández. (Pagés Larraya, ibid., p. 53s) (**).<br /><br />(*) Un único ejemplar de «El Bicho Colorado» se encuentra en la Hemeroteca de la Biblioteca Nacional.<br />(**) La colección de «Martín Fierro>> se encuentra en la Hemeroteca de la Biblioteca Nacional. Reg. 30.563.<br /><br /><a name="capitulo10">CAPITULO X - LOS ULTIMOS AÑOS </a><br /><br />En 1877 Hernández fue candidato a senador bonaerense por el Partido Autonomista, pero luego se retrajo de la actividad partidaria ante la conciliación de su sector con los mitristas.<br />Al año siguiente se asoció con Rafael Casagemas en la «Librería del Plata», más tarde totalmente de su propiedad.<br />En 1879 fue diputado por la segunda sección electoral en la Legislatura de la provincia de Buenos Aires y un año más tarde obtuvo la presidencia de la Cámara.<br />Poco antes de terminar el mandato de Avellaneda dos candidatos se presentaron para reemplazarlo, el gobernador bonaerense Carlos Tejedor y el general Julio Argentino Roca, Ministro de Guerra.<br />Este último contaba con el apoyo de Avellaneda y de todas Las provincias con excepción de Buenos Aires y Corrientes.<br />Junto con Hipólito Yrigoyen, Jacinto Varela y otros, Hernández fundó un Club de la Juventud Porteña, en adhesión a la candidatura de Roca, quien resultó triunfador en las elecciones por amplia mayoría.<br />Tejedor no aceptó el resultado del comicio y dispuso una movilización de milicias tras lo cual debió sufrir el sitio de la ciudad por parte de las tropas nacionales y se produjeron intensos combates los días 20 y 23 de junio de 1880.<br />Hernández se negó a tomar parte en las luchas y se ocupó de organizar, junta con Carlos Guido y Spano, el auxilio de los heridos por medio de la Cruz Roja.<br />El 12 de octubre de ese mismo año asumió la presidencia Julio Argentino Roca.<br />Hernández abogó desde la Legislatura por la federalización de la ciudad de Buenos Aires, orientándose en el autonomismo nacional y en consecuente oposición a Leandro N. Alem.<br />Así, en la sesión del 19 de noviembre de 1880 Hernández decía que «el diputado Alem desconoce la marcha de su partido, la legalidad del Congreso, la conveniencia pública de esta cuestión...» (Manacorda, 1941, p. 51).<br />José Hernández fue vocal del Consejo General de Educación y senador provincial de Buenos Aires, electo en 1881 y reelecto en 1885.<br />En 1881 escribió la «Instrucción del Estanciero» editado par Casavalde.<br />Con el gobernador Dardo Rocha trabajó en el proyecto de fundación de la capital bonaerense. Si bien resulta lógico interpretar la nominación por la proximidad ribereña, algunos estudiosos sugieren, basándose en la tradición oral, que la denominación de «La Plata» estaría también vinculada al segundo apellido de su abuelo. La fundación tuvo lugar el 19 de noviembre de 1882 (12) y se sirvió un asado preparado por Hernández.<br />En 1884 compró una quinta en Belgrano, en donde comenzó a residir desde entonces, progresivamente alejado de su actividad como legislador.<br />El 12 de octubre de 1886 asumió la presidencia de la Nación Miguel Juárez Celman.<br />José Hernández falleció el jueves 21 de octubre de 1886 atacado par una afección cardíaca. Sus biógrafos coinciden en señalar como sus últimas palabras: «¡Buenos Aires! ¡Buenos Aires!».<br />Sus restos descansan en el cementerio de la Recoleta.<br /><br /><a name="capitulo11">CAPITULO XI - PALABRAS FINALES </a><br /><br />Dice Rivera (ibid., p. 326):<br />"José Hernández puede servir muy bien como paradigma del escritor en el que militancia política, estilo de vida, quehacer periodístico y creación literaria forman todavía un sistema perfectamente coherente y solidario, pero en el que la «faena de la pluma» (inclusive el oficio abundantemente ejercido) tiene un peso especifico aun relativo desde el punto de vista de la creación de medios materiales de subsistencia, acaso por el signo mismo con que son asumidas esas faenas."<br />Ciertamente, en Hernández, como en tantos otros precursores del periodismo en la Argentina, la labor aparece no como profesión sinónimo de medio de vida, sino como vocación pura al servicio de los ideales. También esto afirma Rivera (ibid., p. 326) cuando asevera que «a pesar de su 'buena pluma', Hernández no vive exclusivamente de la literatura y de los trabajos periodísticos» y ya se ha dicho a lo largo del presente trabajo en cuantas tareas ha incursionado para subsistir; baste para recordarlo: desde peón de campo, hasta librero, pasando por múltiples funciones públicas.<br />Hernández ha sido un batallador que, afirmado en sus íntimas convicciones, bregó por las causas que consideró justas en cada momento de su vida. Podría decirse que fue un pragmático que ajustó su posición y sus actos a cada situación histórica y tomó partido por la causa que en ese marco vislumbró como más justa.<br />De este modo, como se desarrolló el los capítulos precedentes, adhirió al Partido Federal Reformista y su medio de prensa, «La Reforma Pacífica», de Nicolás Calvo, en 1856, haciéndose «chupandino» por considerar valiosa la incorporación de Buenos Aires a la Confederación.<br />Cuatro años más tarde, convencido de que la causa federal hallaba firmeza en Urquiza, obraba desde Paraná en el órgano oficial, «El Nacional Argentino», y luego, también en Paraná, apostrofaba a los matadores del Chacho Peñaloza en las páginas de «El Argentino».<br />En 1868, inmerso siempre en un ideal federal, acompañaba al gobernador correntino Evaristo López y apoyaba su gestión con «El Eco de Corrientes».<br />Llevó la problemática correntina a «La Capital» de Rosario, durante su exilio provincial y también sostuvo desde el medio de Ovidio Lagos el apoyo al proyecto del diputado Manuel Quintana para que esa ciudad fuera capital de la República, con lo cual entendía se hacía justicia por la ubicación geográfica e histórica de Rosario y para reducir la problemática de Buenos Aires.<br />Propuso desde «El Río de la Plata» la distribución de tierras parceladas para ganar el desierto mediante la colonización y no por la fuerza depredadora, al tiempo que fustigó el mecanismo de la leva para la formación de los contingentes de frontera.<br />Apoyó a López Jordán en su defensa del concepto republicano federal que entendía traicionado por Urquiza y desde el exilio, en «La Patria» de Montevideo, combatió a Mitre y a Sarmiento y confió en la unión del Autonomismo con el Partido Nacional que respaldaba a Avellaneda como encuentro reconstitutivo del cuerpo socio político argentino.<br />Polemizó desde «La Libertad» con «La Tribuna», defendiendo su apologética visión del general Peñaloza como baluarte federal y criticó al fin todo lo que consideró pernicioso en el gobierno desde «El Bicho Colorado» y el «Martín Fierro», pese a su adhesión al nuevo Partido Autonomista Nacional.<br />De este modo, durante veinte de los cincuenta y dos años de su vida, luchó a través del periodismo, desde sus primeros pesos en «La Reforma Pacifica» hasta sus últimos y satíricos intentos conocidos en «El Bicho Colorado» y «Martín Fierro».<br />La perspectiva de los años transcurridos desde entonces permite que hoy, como uno de esos toques irónicos de la vida, pueda definirse sintéticamente la labor hernandiana tal como se hiciera con la de su enemigo político, Sarmiento, señalando que ha luchado por su Patria «con la espada, con la pluma y la palabra».<br />Este trabajo ha cumplido hasta aquí su objetivo básico. No obstante, deja por su propia constitución una puerta abierta, cual es la de su perfeccionamiento con detalles biográficos y la posibilidad de la realización de una antología de todo el material periodístico surgido de la pluma de José Hernández.<br /><br /><a name="notas">NOTAS </a><br />1 - Ovidio Lagos funda en 1867 «La Capital» de Rosario y convoca a Hernández a colaborar al año siguiente. Ver Capítulo VI<br />2 - Según refiere Auza (1978, p. 103) el lema anterior vigente era «Integridad Fraternidad», obviamente menos combativo que el retomado por Hernández.<br />3 - Caudillo lusitano (m.139 a. C.) cabecilla de los lusitanos sublevados contra la tiranía del pretor romano Galba, que durante macho tiempo tuvo en jaque a los ejércitos romanos. Fue asesinado en su tienda par sus propios amigos.<br />4 - El partido mitrista o nacionalista sostenía la candidatura presidencial del Ministro de Relaciones Exteriores de Mitre, Rufino de Elizalde. El Autonomismo propiciaba a su jefe, el Dr. Adolfo Alsina, que a su vez era sugerido como compañero de fórmula tanto de Urquiza como de Sarmiento. Después de un complicado proceso electoral el escrutinio arrojó 79 votes en favor de Sarmiento,26 por Urquiza y 22 por Elizalde, mientras que Alsina fue elegido vicepresidente por 32 sufragios.<br />5 - Por razones de fidelidad con el original consultado se han mantenido en las tres notas precedentes las formas gramaticales tal como aparecieron impresas.<br />6 - El calificativo de «Publicista» era de uso común en la época en su aceptación de «persona que escribe para el público, generalmente de varias materias» (EspasaCalpe,1986, voz Publicista).<br />7 - Sus artículos habrían aparecido en distintos medios y épocas sin firma, con su nombre, con las iniciales J.H., con el seudónimo Vincha, como Un Patagón y como Polilla (citados a lo largo del presente trabajo).<br />8 - Manuel Quintana había presentado, como diputado por Buenos Aires, el 1° de julio de 1867 un proyecto para llevar a Rosario la Capital de la República. Ver Capítulo VI.<br />9 - Hernández se refiere en este párrafo a una intervención que para esa época habla tenido el entonces senador Domingo F. Sarmiento en el Congreso, oportunidad en que, contradiciendo sus propios dichos de un bosquejo biográfico del general José María Paz, acusó a éste, ya muerto, de haber fusilado prisioneros heridos durante el sitio de Montevideo (Yaben Jacinto, Biografías Argentinas y Sudamericanas). Buenos Aires: Metrópolis, 1939, voz Sarmiento, p. 587).<br />10 - Durante su presidencia Sarmiento remitió, el 28 de mayo de 1873, un proyecto de ley a la Cámara de Diputados en el que se establecía el precio de los dirigentes de la revolución entrerriana, entre ellos 100.000 pesos fuertes por la cabeza de López Jordán (Chávez Fermín, José Hernández periodista, político y poeta. Buenos Aires: Ediciones Culturales Argentinas, 1959).<br />11 - En su sesión del 11 de diciembre de 1872 y a propuesta de los individuos de número Antonio Segovia, Juan Hartzenbucsh y Fermín de la Puente, la Real Academia Española nombró a Juan María Gutiérrez miembro de la corporación en el orden de extranjeros y se lo comunicó con fecha 30 de diciembre de 1873, pero el cónsul de España le transmitió la nueva recién el 29 de diciembre de 1875, dos años más tarde. La carta que rechaza la designación apareció en «La Libertad» del 5 de enero de 1876 y fue reproducida por otros periódicos. Gutiérrez sostuvo que no aceptaba por oponerse al colonialismo español (Weinberg, Gregorio, Historia de la Literatura Argentina, Buenos Aires: CEAL, 1980).<br />12 - En la actual esquina de 51 y 4, en donde se levantaba para entonces un tinglado.<br /><br /><a name="bibliografia">BIBLIOGRAFIA CITADA </a><br />I - Auza, Néstor Tomás; El Periodismo de la Confederación 1852-1861. Buenos Aires: EUDEBA, 1978.<br />2 - Caso de Sedano Acosta, Juana; Panoramas de América. Buenos Aires: Kapelusz, 1962.<br />3 - Cutolo, Vicente Osvaldo; Nuevo Diccionario Biográfico Argentino 1750-1930. Buenos Aires: ELCHE, ] 971.<br />4 - Chávez, Fermín; José Hernández periodista, político y poeta. Buenos Aires: Ediciones Culturales Argentinas, 1959.<br />5 - Destéfani, Laurio H.; Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur, ante el conflicto con Gran Bretaña. Buenos Aires: Edipress, 1982.<br />6 - Gianello, Leoncio y Piccirilli, Ricardo; Biografías Navales. Buenos Aires: Departamento de Estudios Históricos Navales, ARA, 1963.<br />7 - Gramuglio María Teresa y Sarlo Beatriz; Historia de la Literatura Argentina. Buenos Aires: CEAL, 1980.<br />8 - Ibáñez, José C.; Síntesis de Historia Argentina. Buenos Aires: Troquel, 1970.<br />9 - Manacorda, Telmo; Alem, Un caudillo, Una época. Buenos Aires: Sudamericana, 1941.<br />10 - Martinez Estrada, Ezequiel; Muerte y transfiguraci6n del Martín Fierro, en Martín Fierro y su crítica. Buenos Aires: CEAL, 1980.<br />11 - Pagés Larraya, Antonio; Prosas del Martín Fierro. Buenos Aires: Raigal, 1952.<br />12 - Pérez Amuchástegui, J.A.; Mentalidades Argentinas 1860- 1970. Buenos Aires: EUDEBA, 1977.<br />13 - Piccirilli, Ricardo, Romay Francisco y Gianello Leoncio; Diccionario Histérico Argentino. Buenos Aires: Ediciones Histéricas Argentinas, 1954.<br />14 - Rivera, Jorge B.; Historia de la Literatura Argentina. Buenos Aires: CEAL, 1980.<br />15 - Romero Carranza, Ambrosio; Bagaje doctrinal de Los hombres de mayo, en Las ideas políticos de Mayo. Buenos Aires: Omeba, 1963.<br />16 - Vázquez, Lucio Oscar E.; Historia del humor gráfico y escrito en La Argentina. Buenos Aires: EUDEBA, 1985.<br />17 - Yaben, Jacinto R.; Biografías Argentinas y Sudamericanas. Buenos Aires: Metrópolis, 1939.<br /><br /><a name="bibliografiageneral">BIBLIOGRAFIA GENERAL Y DE REFERENCIA </a><br />] - Aramburu, Julio, Historia Argentina. Buenos Aires. El Ateneo, 1949.<br />2 - Arenas, Luque Fermín V.; Efemérides Argentinas 1492-1966. Buenos Aires: sin mención del editor, 1967.<br />3 - Beltrán, Oscar R., Historia del periodismo argentino. Buenos Aires: Sopena, 1943.<br />4 - Bortnik, Rubén; José Hernández en el país de Martín Fierro. Todo es Historia, n° 211. Buenos Aires: noviembre, 1984.<br />5 - Cimorra, Clemente; Historia del periodismo. Buenos Aires: Atlántida, 1946.<br />6 - García, Pelayo y Gross, Ramón, Pequeño Larousse llustrado. París: Larousse, 1964.<br />7 - Ibáñez, José C.; Historia de Las instituciones políticas y sociales argentinas desde 1810. Buenos Aires: Troquel, 1978.<br />8 - Larrán de Vere, Alberto; Urquiza. Buenos Aires; Atlántida, 1961.<br />9 - Loprete, Carlos A., Literatura española, hispanoamericana y argentina. Buenos Aires: Plus Ultra, 1978.<br />10 - Romero, José Luis, Breve historia de la Argentina. Buenos Aires: Huemul, 1978.<br />11 - Santillán, Diego A., Gran enciclopedia argentina. Buenos Aires: Editar, 1956.<br />12 - Colecci6n «El Eco de Corrientes», Biblioteca Nacional. Ref. 30.453.<br />13 - Diccionario de autores, Barcelona: Montaner y Simón, 1973.<br />14 - Diccionario enciclopédico Quillet. Buenos Aires: Arístides Quillet, 1960.<br />15 - Diccionario Espasa-Calpe. Chile: Espasa-Calpe, 1986.<br />16 - Enciclopedia Danae. Barcelona: Danae, 1973.<br />17 - Gran enciclopedia del mundo. Barcelona: Durvan, 1974.<br /><br /><a name="piedeimprenta">Pie de imprenta</a><br /><br /><span style="font-size:78%;">Este libro se terminó de imprimir en el mes de junio de 1996, en los Talleres Gráficos de la Dirección de Impresiones del Estado y Boletín Oficial, Ministerio de Gobierno y Justicia, Provincia de Buenos Aires.<br /></span></div>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6928572749550321474.post-69778023016027515762009-09-05T15:18:00.000-07:002009-09-05T17:00:00.879-07:00Ulrico Schmidel. Un periodista sin periódico<img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378113753307466034" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 92px; CURSOR: hand; HEIGHT: 124px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh_fCXNKr4uol3nTCwmnnks1WkHvM8c682urJOCzxr_-aLkE99hlPan70zMBrIYRn9jvRECfpz6TWBjySmqRLSKBG2tkEUOYcugOxsBPRlxCDCWK3fRzCn6PYNPaRfd0l6RPXKfvnWB4Lc/s400/ulrico+schmidel.jpg" border="0" /><span style="font-size:78%;">(por Jorge Eduardo Padula Perkins)</span> <div><div><span style="font-size:78%;"><br /><div></span>En enero de 1536 llegaba a las márgenes del Río de la Plata el primer adelantado, don Pedro de Mendoza, quien en febrero de ese mismo año establecía un reducido grupo de casas de barro rodeadas por un muro de tierra. Era la fundación del puerto de Santa María del Buen Ayre. </div><br /><div>Con él, hombres de trabajo y hombres de armas y, en el conjunto, un alemán, Ulrico Schmidel, llamado a ser por vocación y servicio el primer periodista de origen europeo con actuación en estas tierras.</div><br /><div></div><div>Europa vivía para entonces el esplendor del Renacimiento que, junto con una vuelta a los valores de la antigüedad clásica grecolatina, generaba el espíritu de empresa, de aventura e indagación de lo desconocido, y España, en su Siglo de Oro de las letras y las artes, era gobernada por Carlos I que concentraba en su persona ese trono y el de Alemania constituyendo la monarquía más poderosa del continente.</div><br /><div>América era el gran desafío para aquel espíritu de empresa, el objetivo adecuado para los bríos que impulsaban a poner la vida en pos de aventuras, riquezas y conocimientos no pocas veces utópicos.</div><br /><div>Por ello la colonización y, en el caso que nos ocupa, la penetración española en el Río de la Plata de principios del siglo XVI eran noticia en el más moderno sentido del término. Tenía la empresa los tres elementos significativos de la noticia que define Charnley: “Un suceso, que implica un género de acción”, “una información, donde se describe o relata la acción en términos comprensibles” y “un público al cual se presenta la relación”.1 Sucesos, los emergentes de la acción global colonizadora y del detalle de los acontecimientos vividos por sus hombres; información, la brindada por las crónicas que Schmidel, como Pero Hernández lo hiciera sobre Asunción, recopilaba por primera vez del Río de la Plata, y público, el del continente europeo, ávido de conocimiento respecto de aquellas inéditas y asombrosas aventuras.</div><br /><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378113483522199938" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 128px; CURSOR: hand; HEIGHT: 93px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJmadsWN4aQYersM3XIia0FLH4MVDlNzy2U3ECdclM-4ZWr_DT2l2MBxIMnaXI_2qt6DcoFTw5oiLAVUmyW3U4gPL3bIufCzRBXAJqMgWygaLiypwcS7d6HZECnJlwymF1eInGa1YfeUs/s400/ulrico+schmidel+2.jpg" border="0" />Ulrico Schmidel había nacido en Straubin, Baviera, con anterioridad a 1511, y tras haber probado suerte en el comercio se había embarcado como voluntario en la expedición de Mendoza, a consecuencia de lo cual permaneció durante dieciséis años en territorio americano, hasta que en 1552 regresó a Europa. En 1567 escribió y publicó en su idioma natal el libro en forma de crónicas que resultó ser la primera narración cronológica sobre los sucesos acaecidos en el Río de la Plata a partir de la llegada del primer adelantado: Verídica descripción de varias navegaciones, como también de muchas partes desconocidas, islas, reinos y ciudades, también de muchos peligros, peleas y escaramuzas entre ellos y los nuestros, tanto por tierra como por mar, ocurridos de una manera extraordinaria, así como de la naturaleza y costumbres horriblemente singulares de antropófagos, que nunca han sido descritas en otras historias o crónicas, bien registradas o anotadas para utilidad pública, por Ulrico Schmidel de Straubin.2 Era aquella una narración de los sucesos de la expedición del primer adelantado desprovista de adornos literarios, en una “mezcla de alto alemán con vocablos militares y voces españolas y americanas transcriptas al alemán”.3<br /><br /><div>Sin saberlo, Ulrico Schmidel actuaba como un periodista, aun cuando esa categoría comunicacional no había sido formulada, porque no existían los periódicos a la manera de la prensa moderna. Recién a fines del siglo XVI en Venecia comenzaron a circular las hojas informativas denominadas “gazzettas” consideradas precursoras de los periódicos, y en 1615 aparecía en Alemania el primer periódico con características generales de la prensa como hoy se la conoce, el Frankfurter Journal.</div><br /><div>Hechos, lugares, circunstancias, personajes, acciones bélicas y actitudes políticas son relevados por la pluma de Schmidel. Al relatar su arribo a Cádiz el cronista hace una descripción de circunstancia cuyo contenido es eminentemente informativo: “Cerca de esta ciudad había catorce buques grandes, bien pertrechados con toda la munición y bastimentos necesarios, que estaban por navegar hacia el Río de la Plata en las Indias. También se hallaban allí dos mil quinientos españoles y ciento cincuenta entre alto-alemanes, neerlandeses y austríacos o sajones y nuestro supremo capitán, de alemanes y españoles, se llamaba don Pedro de Mendoza”.4 </div><br /><div>Para entonces ya hubo dado Schmidel la fecha de su partida de Amberes, el 2 de agosto de 1534, y la de arribo a Cádiz, 14 días más tarde, es decir, el 16 de agosto del referido año. Por lo tanto los interrogantes básicos cuyas respuestas componen la información son resueltos en su crónica: don Pedro de Mendoza y sus hombres (quién) partirán hacia el Río de la Plata (qué) con su flota de catorce buques (cómo) en el año 1534 (cuándo) desde el puerto de Cádiz (dónde).</div><div><br />Más aun, amplía Schmidel con información secundaria, como si conociese y manejase a conciencia plena el esquema de la pirámide invertida propio del periodismo moderno, que reclama señalar en principio lo más importante y posteriormente los datos de menor jerarquía: “Entre esos catorce buques, uno pertenecía al señor Sebastián Neithart y al señor Jacobo Welser, de Nuremberg, quienes enviaban a un factor, Enrique Paine, al Río de la Plata con mercaderías: en ese buque de los dichos señores... hemos navegado hacia el Río de la Plata yo y otros alto-alemanes y neerlandese, unos ochenta hombres bien pertrechados con armas de fuego y otras clases”.5 </div><br /><div>Otro pasaje de la obra de este cronista describe aspectos de la geografía física y humana de algunos parajes: “...llegamos a tres islas que están juntas unas con otras. La primera se llama Tenerife, la otra Gomera y la tercera La Palma; desde la ciudad de San Lúcar a estas islas hay más o menos doscientas leguas. Los habitantes de ellas son españoles puros, así como sus mujeres e hijos, y hacen azúcar...”.6 Esto es, sin duda alguna, otra forma de noticia, de interés geopolítico, económico y humano.</div><br /><div>Una de las noticias más importantes, sobre todo desde la perspectiva histórica de nuestros días, puede hallarse en los capítulos VI y VII de sus crónicas; esta es la primera fundación de Buenos Aires, hecho que en el marco de nuestras comunicaciones contemporáneas hubiese merecido un título de tapa: “Desembarcamos en el Río de la Plata el día de los Santos Reyes Magos... Allí levantamos una ciudad que se llamó Buenos Aires: esto quería decir buen viento”.7<br />También las acciones bélicas conformaban la crónica de la obra de Schmidel, vulgarmente conocida por su título abreviado de Viaje al Río de la Plata: “...los indios asaltaron nuestra ciudad de Buenos Aires con gran poder y fuerza. Eran como veintitrés mil hombres, y pertenecían a cuatro naciones, una llamada Querandís, otra Guaranís, la tercera Charruás, la cuarta Chana-Timbás. Tenían la intención de matarnos a todos, pero Dios Todopoderoso no les concedió tanta gracia, aunque consiguieron quemar nuestras casas, pues estaban techadas con paja... Mientras parte de los indios marchaban al asalto, otros tiraban sobre las casas con flechas encendidas, para que no tuviéramos tiempo de atender a ambos y salvar nuestras casas...”.8 </div><br /><div>Acto seguido da a conocer la inevitable evaluación de todo hecho bélico: “En el encuentro perecieron cerca de treinta hombres de entre nosotros los cristianos, entre capitanes y gente de tropa...En este ataque quemaron también cuatro buques grandes, que se hallaban a una media legua de nuestra ciudad de Buenos Aires”.9 </div><div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8nmUKStGyyqYRwX_WkTWnedsDIPFJx_Y-_kHSq3bv5iP_Kg34QcTVPQhb1bWJTJY7jo-RAEjguUZlHhyphenhyphenbUn_zzfQbJebvs_ebNuY_VnMMe55wGZ-KQ8S03U7jjbMYvFeXI4WmjY3Kh8s/s1600-h/ulrico+schmidel+3.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5378114262031404530" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 127px; CURSOR: hand; HEIGHT: 94px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8nmUKStGyyqYRwX_WkTWnedsDIPFJx_Y-_kHSq3bv5iP_Kg34QcTVPQhb1bWJTJY7jo-RAEjguUZlHhyphenhyphenbUn_zzfQbJebvs_ebNuY_VnMMe55wGZ-KQ8S03U7jjbMYvFeXI4WmjY3Kh8s/s400/ulrico+schmidel+3.jpg" border="0" /></a><br />El tratamiento de los temas más lacerantes de la condición humana, también surge de las narraciones de este precursor del periodismo del Río de la Plata: “Fue tal la pena y el desastre del hombre que no bastaron ni ratas ni ratones, víboras ni otras sabandijas; hasta los zapatos y cueros, todo tuvo que ser comido. Sucedió que tres españoles robaron un caballo y se lo comieron a escondidas; y así que esto se supo se les prendió y se les dio tormento para que confesaran. Entonces se pronunció la sentencia de que se ajusticiara a los tres españoles y se les colgara en una horca. Así se cumplió y se les ahorcó. Ni bien se los había ajusticiado, y se hizo la noche y cada uno se fue a su casa, algunos otros españoles cortaron los muslos y otros pedazos del cuerpo de los ahorcados, se los llevaron a sus casas y allí los comieron”.10 </div><br /><div>Novedades sobre agricultura son también motivo de ocupación de Schmidel que, refiriéndose a los indios Carios, señala que “tienen trigo turco o maíz y una raíz que se llama mandioca y otras buenas raíces más que se llaman batatas y mandioca-poporí y mandioca-pepirá. La raíz de batata se parece a la manzana y tiene el mismo gusto; la mandioca-poporí sabe a castañas. De la mandioca-pepirá se hace un vino que beben los indios”.11 </div><br /><div>Por último puede citarse el ejemplo de la información sobre las luchas políticas que por aquellos años acaecían entre los europeos en América: “Volvimos a navegar río abajo —dice el cronista— hacia donde estaba nuestro capitán general Álvar Núñez Cabeza de Vaca, y cuando allí llegamos, nuestro general mandó que no dejáramos nuestro buque so pena de muerte y él en persona vino a nuestro buque y aprisionó a nuestro capitán Hernando Ribera. También Álvar Núñez Cabeza de Vaca, nuestro capitán general, nos quitó todo lo que nos habíamos traído de tierra...”.12 </div><br /><div>Inclusive la opinión política, en este caso de oposición a Álvar Núñez Cabeza de Vaca, surge de los escritos en cuestión: “Se portó de impropia manera, pues un capitán que quiere gobernar un país debe siempre prestar y dar atención tanto al grande como al chico y hacer justicia, y mostrarse benevolente tanto para el más humilde como para el más alto —argumenta— nada de eso hizo, sino solamente quiso hacer cuanto su orgullo y soberbia le dictaba”, concluye.13 </div><div></div><br /><div>Y finalmente el derrocamiento del referido gobernante ocupa un lugar en el cuerpo informativo: “Cuando la gente vio que el capitán general no quería moderarse, nobles y villanos decidieron hacer una asamblea, pues querían prender al capitán general y enviarlo a Su Cesárea Majestad, haciéndole saber cómo se había portado con la gente y cómo no podía gobernar el país... En esto intervinieron los cuatro señores que Su Cesárea Majestad había nombrado contador, tesorero y escribano, que tenían los nombres de Alonso Cabrera, don Francisco Mendoza, García Vanegas y Felipe de Cáceres... Tuvimos preso en la cárcel a este señor Álvar Núñez Cabeza de Vaca durante un año, hasta que se aparejó una carabela y se mandó a España a dicho señor... fue necesario elegir e instituir alguien que nos hiciera justicia y gobernase la tierra mientras Su Cesárea Majestad no dispusiese y mandase su representante... Nos pareció entonces conveniente elegir a Domingo Martínez de Irala, que ya antes había gobernado... además la gente se llevaba muy bien con este Domingo Martínez de Irala y la mayor parte estaba muy contenta con él...14 </div><br /><div>Por supuesto que los textos de Ulrico Schmidel deben ser analizados dentro de su contexto histórico cultural. Siguiendo a Charnley, sostenemos que “las crónicas no surgen y no se desarrollan en un vacío; antes al contrario, forman parte de su época y de su sociedad”, cuyas particularidades “pueden afectar el sentido de un suceso y determinar su valor relativo como base para una crónica”.15 </div><br /><div>Justamente por ello es que los hechos, lugares, circunstancias y personajes que Schmidel inserta en sus trabajos no son otros que los que interesan a sus contemporáneos, en la misma o mayor magnitud relativa que al hombre de hoy puede atraerle conocer las posibilidades de vida en el espacio exterior, la cotización del dólar o la geopolítica de Medio Oriente. Y estos hechos trocan en noticia cuando Schmidel los conforma en sus crónicas construyendo lo que De Gregorio denomina una “sistematización de los elementos constitutivos de la información”16 en el momento en que ésta adquiere la forma de texto. Momento al fin en el que se construye el mensaje a partir de un sistema de signos compartidos entre el emisor y el receptor. Una comunicación entre el cronista y el lector, de carácter unilateral, indirecta y pública, tal como lo son las comunicaciones de la prensa contemporánea en el marco de las modernas teorías comunicacionales.</div><br /><div>Las crónicas agrupadas en Viaje al Río de la Plata constituyen una propuesta informativa que, salvando las distancias temporales y cuando todavía el mundo no había elaborado el concepto de prensa periódica en el sentido moderno, presenta aspectos de semejanza con las formas que hoy se aceptan como propias y características del estilo periodístico. Es por ello que puede considerarse a Ulrico Schmidel como el primer periodista europeo del Río de la Plata. Paradójicamente, un periodista sin periódico.<br /><br />Notas<br />Charnley, Mitchell V., Periodismo informativo, traducción de José Clementi, Troquel, Buenos Aires, 1976, p. 18.<br />Canal Feijóo, Bernardo, “La época colonial”, en Historia de la literatura argentina, Tomo I, CEAL, Buenos Aires, 1980, p. 130.<br />Figueira, Ricardo, en prólogo de Los fundadores, colección Capítulo, CEAL, Buenos Aires, 1979, p.1.<br />Schmidel, Ulrico, Viaje al Río de la Plata, Emece, Buenos Aires, 1942, p. 11s.<br />Ibid., p.12.<br />Ibid., p.12.<br />Ibid., p.17.<br />Ibid., p.22.<br />Ibid., p.23.<br />Ibid., p.21.<br />Ibid., p.27.<br />Ibid., p.64s.<br />Ibid., p.67.<br />Ibid., p.67s.<br />Charnley, Mitchell V., Ob.Cit., p.64.<br />Fontcuberta, Mar, Estructura de la noticia periodística, Ate, Barcelona, 1981, p. 9. </div><br /><div><span style="font-size:78%;">Fuentes:<br />· Revista “Todo es Historia” N° 313, agosto de 1993, Buenos Aires, Argentina.<br />· Revista “Letralia. Tierra de letras” N° 148, 18 de septiembre de 2006, Cagua, Venezuela. En línea: </span><a href="http://www.letralia.com/148/articulo02.htm"><span style="font-size:78%;">http://www.letralia.com/148/articulo02.htm</span></a> </div></div></div>Jorgehttp://www.blogger.com/profile/03154504344793269691noreply@blogger.com0